Este documento ofrece instrucciones para aquellos que no pueden ayunar durante la Cuaresma debido a enfermedad u otras razones. Les pide que 1) reconozcan su incapacidad ante Dios, 2) intenten entrar en disposición de ayunar si Dios lo pidiera, y 3) ofrezcan los ayunos de Jesús y los santos en lugar del suyo propio.