Este documento resume los aspectos clave de la ecografía de la semana 11-13+6 en el embarazo, incluyendo la importancia del examen para detectar anomalías cromosómicas y estructurales, la medición de la translucencia nucal, el hueso nasal, el ángulo facial y otros marcadores bioquímicos. También describe cómo se usa la ecografía para diagnosticar gemelos, síndrome de transfusión feto-fetal y otras complicaciones en embarazos múltiples.
VARIANTES ANATÓMICAS PANCREÁTICAS Y ANOMALÍAS CONGÉNITASNadia Rojas
Descripción de las principales variantes anatómicas pancreáticas y anomalías congénitas pancreáticas. Páncreas divisum, páncreas anular, tejido pancreático ectópico, variantes del contorno pancreárico, quistes pancreáticos, variantes de los conductos pancreáticos.
SIGNO DE LA GALAXIA EN TOMOGRAFÍA COMPUTADA DE PULMONNadia Rojas
presentación del signo radiologico del signo de la galaxia, paper publicado en la revista chilena de radiología en 2014. caracteristico de la sarcoidosis y de la tuberculosis pulmonar.
De entre todos los estudios de imagen, la radiografía de tórax es el más empleado en la rutina clínica, y uno de los más versátiles. Es probable que, como médicos de Atención Primaria, solicitemos a menudo esta prueba para completar el estudio de una serie de patologías y alcanzar diagnósticos. Saber interpretar los resultados de esta prueba y manejarla correctamente son aptitudes imprescindibles para nosotros; por ello, en las siguientes dos sesiones, estudiaremos las posibilidades técnicas de la radiografía desde el marco de la Atención Primaria.
VARIANTES ANATÓMICAS PANCREÁTICAS Y ANOMALÍAS CONGÉNITASNadia Rojas
Descripción de las principales variantes anatómicas pancreáticas y anomalías congénitas pancreáticas. Páncreas divisum, páncreas anular, tejido pancreático ectópico, variantes del contorno pancreárico, quistes pancreáticos, variantes de los conductos pancreáticos.
SIGNO DE LA GALAXIA EN TOMOGRAFÍA COMPUTADA DE PULMONNadia Rojas
presentación del signo radiologico del signo de la galaxia, paper publicado en la revista chilena de radiología en 2014. caracteristico de la sarcoidosis y de la tuberculosis pulmonar.
De entre todos los estudios de imagen, la radiografía de tórax es el más empleado en la rutina clínica, y uno de los más versátiles. Es probable que, como médicos de Atención Primaria, solicitemos a menudo esta prueba para completar el estudio de una serie de patologías y alcanzar diagnósticos. Saber interpretar los resultados de esta prueba y manejarla correctamente son aptitudes imprescindibles para nosotros; por ello, en las siguientes dos sesiones, estudiaremos las posibilidades técnicas de la radiografía desde el marco de la Atención Primaria.
es esta presentacion se maneja los diferentes métodos de radiología que se utilizan en obstetricia, tanto para pelvimetria como para detección de un óbito fetal
Módulo III, Tema 9: Parásitos Oportunistas y Parasitosis EmergentesDiana I. Graterol R.
Universidad de Carabobo - Facultad de Ciencias de la Salud sede Carabobo - Bioanálisis. Parasitología. Módulo III, Tema 9: Parásitos Oportunistas y Parasitosis Emergentes.
DIFERENCIAS ENTRE POSESIÓN DEMONÍACA Y ENFERMEDAD PSIQUIÁTRICA.pdfsantoevangeliodehoyp
Libro del Padre César Augusto Calderón Caicedo sacerdote Exorcista colombiano. Donde explica y comparte sus experiencias como especialista en posesiones y demologia.
Presentación utilizada en la conferencia impartida en el X Congreso Nacional de Médicos y Médicas Jubiladas, bajo el título: "Edadismo: afectos y efectos. Por un pacto intergeneracional".
En el marco de la Sexta Cumbre Ministerial Mundial sobre Seguridad del Paciente celebrada en Santiago de Chile en el mes de abril de 2024 se ha dado a conocer la primera Carta de Derechos de Seguridad de Paciente, a nivel mundial, a iniciativa de la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los objetivos del nuevo documento pasan por los siguientes aspectos clave: afirmar la seguridad del paciente como un derecho fundamental del paciente, para todos, en todas partes; identificar los derechos clave de seguridad del paciente que los trabajadores de salud y los líderes sanitarios deben defender para planificar, diseñar y prestar servicios de salud seguros; promover una cultura de seguridad, equidad, transparencia y rendición de cuentas dentro de los sistemas de salud; empoderar a los pacientes para que participen activamente en su propia atención como socios y para hacer valer su derecho a una atención segura; apoyar el desarrollo e implementación de políticas, procedimientos y mejores prácticas que fortalezcan la seguridad del paciente; y reconocer la seguridad del paciente como un componente integral del derecho a la salud; proporcionar orientación sobre la interacción entre el paciente y el sistema de salud en todo el espectro de servicios de salud, incluidos los cuidados de promoción, protección, prevención, curación, rehabilitación y paliativos; reconocer la importancia de involucrar y empoderar a las familias y los cuidadores en los procesos de atención médica y los sistemas de salud a nivel nacional, subnacional y comunitario.
Y ello porque la seguridad del paciente responde al primer principio fundamental de la atención sanitaria: “No hacer daño” (Primum non nocere). Y esto enlaza con la importancia de la prevención cuaternaria, pues cabe no olvidar que uno de los principales agentes de daño somos los propios profesionales sanitarios, por lo que hay que prevenirse del exceso de diagnóstico, tratamiento y prevención sanitaria.
Compartimos el documento abajo, estos son los 10 derechos fundamentales de seguridad del paciente descritos en la Carta:
1. Atención oportuna, eficaz y adecuada
2. Procesos y prácticas seguras de atención de salud
3. Trabajadores de salud calificados y competentes
4. Productos médicos seguros y su uso seguro y racional
5. Instalaciones de atención médica seguras y protegidas
6. Dignidad, respeto, no discriminación, privacidad y confidencialidad
7. Información, educación y toma de decisiones apoyada
8. Acceder a registros médicos
9. Ser escuchado y resolución justa
10. Compromiso del paciente y la familia
Que así sea. Y el compromiso pase del escrito a la realidad.
Transaminacion y desaminacion en el ciclo de krebs
Ecografia 11-13,6
1. ECO 11 – 13,6
Fundación Universitaria de
Ciencias de la Salud FUCS
Bogotá, Colombia
2019
Doanella girón peláez
Ginecologia y obstetricia
2. Importancia
80% de los defectos estructurales más
comunes están presentes semana 12
Esta exploración foco de atención
anomalías cromosómicas
Alto Valor embarazos de bajo riesgo
Detecta la mitad de los principales
defectos estructurales
3. Datos epidemiológicos
Sharifzadeh M, Normal reference range of fetal nuchal translucency thickness in pregnant women in the first trimester,
one center studyJ Res Med Sci. 2015 Oct; 20(10): 969–973.
8. Morris JK, Revised estimates of the maternal age specific live birth prevalence of Down's syndrome J Med Screen.
Cribado de anomalias cromosomicas
Edad materna
Disminuye con el avance de la gestación
30% de fetos afectos muere 12 y 40
un 0.75%
9. Morris JK, Revised estimates of the maternal age specific live birth prevalence of Down's syndrome J Med Screen.
Cribado de anomalias cromosomicas
Edad materna- Trisomia 21
10. Semana 11-13 más 6 días
La trisomía 18 retraso de crecimiento severo
Trisomía 13 retraso de crecimiento leve
trisomía 21 crecimiento normal
Cribado de anomalias cromosomicas
12. Zona hipoecoica tras el cuello fetal
Colección de líquido por debajo de la piel
Visible en fetos entre las 11-13 más 6 días
Tiende a ser mayor que en los fetos con trisomia
Translucencia nucal
Cribado de anomalias cromosomicas
Nicolaides KH. Nuchal translucency and other first-trimester sonographic markers of chromosomal abnormalities. Am J
Obstet Gynecol 2004;191:45-67
13. Translucencia nucal
Cribado de anomalias cromosomicas
Nicolaides KH. Nuchal translucency and other first-trimester sonographic markers of chromosomal abnormalities. Am J
Obstet Gynecol 2004;191:45-67
14. Imagen debe estar suficientemente magnificada
La cabeza fetal y la parte superior del tórax
ocupen toda la pantalla
El perfil fetal debe ser visible debe estar en una
posición neutral
La cabeza debe estar alineada con la columna
Medir la parte mas ancha y varias mediciones
Translucencia nucal- Medición
Cribado de anomalias cromosomicas
Nicolaides KH. Nuchal translucency and other first-trimester sonographic markers of chromosomal abnormalities. Am J
Obstet Gynecol 2004;191:45-67
15. Cribado de anomalias cromosomicas
Translucencia nucal- Medición
Extensión Flexión
Nicolaides KH. Nuchal translucency and other first-trimester sonographic markers of chromosomal abnormalities. Am J
Obstet Gynecol 2004;191:45-67
16. Translucencia nucal- valores normales
Cribado de anomalias cromosomicas
Sharifzadeh M, Normal reference range of fetal nuchal translucency thickness in pregnant women in the first trimester,
one center studyJ Res Med Sci. 2015 Oct; 20(10): 969–973.
17. Translucencia nucal- valores normales
Cribado de anomalias cromosomicas
Sharifzadeh M, Normal reference range of fetal nuchal translucency thickness in pregnant women in the first trimester,
one center studyJ Res Med Sci. 2015 Oct; 20(10): 969–973.
18. Translucencia nucal- Alteraciones
Cribado de anomalias cromosomicas
Nicolaides KH. Nuchal translucency and other first-trimester sonographic markers of chromosomal abnormalities. Am J
Obstet Gynecol 2004;191:45-67
19. Cribado de anomalias cromosomicas
Hueso nasal
obtener una imagen del perfil de la cara fetal en su
Se define por:
La punta de la nariz brillante y una forma rectangular
del paladar en la parte anterior
La porción del cerebro medio oscura en el centro
La membrana nucal en la parte posterior
21. Morris JK, Revised estimates of the maternal age specific live birth prevalence of Down's syndrome J Med Screen.
Cribado de anomalias cromosomicas
Hueso nasal
Imagen magnificada solo la cabeza y la mitad
Tres líneas diferentes a nivel de la nariz fetal:
La línea superior representa la piel
representa el hueso nasal
alejado de la piel fetal, que representa la punta de la
nariz
22. Hueso nasal
Cribado de anomalias cromosomicas
Morris JK, Revised estimates of the maternal age specific live birth prevalence of Down's syndrome J Med Screen.
2002;9(1):2-6.
23. Morris JK, Revised estimates of the maternal age specific live birth prevalence of Down's syndrome J Med Screen.
Cribado de anomalias cromosomicas
Hueso nasal
brillante que la piel
ausente si no es visible o el brillo es igual o
inferior que la piel que lo recubre
En las semanas 11-13+6 hueso nasal ausente entre
24. Morris JK, Revised estimates of the maternal age specific live birth prevalence of Down's syndrome J Med Screen.
Cribado de anomalias cromosomicas
Angulo facial
Se mide en el perfil de la cara fetal
una sobre la superficie superior del paladar
paladar con la frente fetal
26. Morris JK, Revised estimates of the maternal age specific live birth prevalence of Down's syndrome J Med Screen.
Cribado de anomalias cromosomicas
Angulo facial
27. Morris JK, Revised estimates of the maternal age specific live birth prevalence of Down's syndrome J Med Screen.
Cribado de anomalias cromosomicas
Longitud del maxilar
Subdesarrollo del maxilar en 50% de los casos trisomia
El maxilar del feto puede visualizarse fácilmente
Un plano sagital medio del perfil fetal
Orientar ligeramente el transductor de forma lateral
Visualizar el hueso maxilar y la mandíbula
la longitud aumenta de forma lineal con la gestación
0,1 mm por cada milímetro que aumenta la LCC
29. Cribado de anomalias cromosomicas
Flujo del ductus venoso
El feto no debe estar en movimiento
La imagen debe ampliarse
fetal ocupen toda la pantalla
El flujo color se debe usar para demostrar la
vena umbilical (VU), el ductus venoso, la aorta y
30. Cribado de anomalias cromosomicas
Flujo del ductus venoso
La onda obtenida se clasifica en base a la onda-a
positiva (normal) o reversa (anormal)
La onda-a anormal o reversa 3% de fetos
Puede combinarse con la medida de la TN fetal
mejorar el cribado (reevaluar-borderline)
32. Spencer K, The impact of correcting for smoking status when screening for chromosomal anomalies using maternal serum
biochemistry and fetal nuchal translucency thickness in the first trimester of pregnancy. Prenat Diagn 2004;24:169-73
Cribado de anomalias cromosomicas
33. Cribado de anomalias cromosomicas
Implicación de incremento de TN
Asociación amplio rango de anomalías fetales
Defectos cardiacos mayores
Onfalocele
Megavejiga
34. Cribado de anomalias cromosomicas
Defectos cardiacos mayores
posibilidad de tener un defecto cardiaco mayor
aumenta con la translucencia nucal,
3 de cada 1.000 embarazos con TN normal
125 de cada 1.000 embarazos para TN de 7 mm
35. Cribado de anomalias cromosomicas
Onfalocele
1 de cada 1.000 fetos
50% fetos con onfalocele tienen defectos
Sin otros defectos el resultado es bueno
37. Cribado de anomalias cromosomicas
Megavejiga
Vejiga mide longitudinalmente menos de 6 mm
1 de cada 1.500 embarazos
Desaparece en un 90% de los casos.
Produce lesión renal
39. Cribado de anomalias cromosomicas
Alteraciones sistema nervioso central
Acrania
Holoprosencefalia
Espina bifida
40. Cribado de anomalias cromosomicas
Alteraciones sistema nervioso central
Acrania-Anencefalia
1 de cada 1000 embarazos
Imposibilidad de medir DBP por ausencia
simétrica de la calota
órbitas sobresalientes
Posible a partir de la semana 12-13
Signo de Mickey Mouse
41. Cribado de anomalias cromosomicas
Alteraciones sistema nervioso central
Acrania-Anencefalia
42. Cribado de anomalias cromosomicas
Alteraciones sistema nervioso central
Holoprosencefalia
1 de cada 10000 gestaciones
50% trisomia 13
Ausencia del desarrollo en dos hemisferios
43. Cribado de anomalias cromosomicas
Alteraciones sistema nervioso central
Holoprosencefalia
44. Cribado de anomalias cromosomicas
Alteraciones sistema nervioso central
Espina bifida
Signos Directos:
Apertura del Tubo Neural
Signos indirectos:
Signo del limón-Signo de la banana
45. Cribado de anomalias cromosomicas
Alteraciones sistema nervioso central
Espina bífida-Signo del limón
46. Cribado de anomalias cromosomicas
Alteraciones sistema nervioso central
Espina bífida-Signo de la banana
47. Ecografía de la semana 11-13+6
Embarazos gemelares
Determinación de la corionicidad
complicaciones en el embarazo
(Aborto,retraso del crecimiento,
muerte de uno de los fetos )
Síndrome de transfusión feto-fetal
Anomalías cromosómica
48. Ecografía de la semana 11-13+6
Determinación de la corionicidad
Se evalúa la unión de las membranas
que separan los dos fetos y la placenta
Gemelos bicoriales
Proyección de tejido placentario
triangular (signo lambda) en la base de
la membrana
49. Ecografía de la semana 11-13+6
Determinación de la corionicidad
Bicorial Monocorial
50. Ecografía de la semana 11-13+6
Síndrome de transfusión feto-fetal
Aumento en el grosor TN en uno o ambos fetos
flujo Doppler anormal en el ductus del receptor
Volumen de líquido amniótico
Secuencia polihidramnios/anhidramnios
51. Ecografía de la semana 11-13+6
Síndrome de transfusión feto-fetal
Disminuir la morbi-mortalidad materna y perinatal asociada con el momento del nacimiento. Sin embargo, el procedimiento también conlleva riesgos periparto para el binomio madre-hijo y, a largo plazo, para gestaciones futuras
Cesárea del latín caedere ("cortar").
a operación cesárea constituye uno de los avances más importantes de la medicin a perinatal contemporánea y ha tenido indiscutiblemente un impacto extraordinario en la disminución de la mortalidad materna y perinatal
Disminuir la morbi-mortalidad materna y perinatal asociada con el momento del nacimiento. Sin embargo, el procedimiento también conlleva riesgos periparto para el binomio madre-hijo y, a largo plazo, para gestaciones futuras
Cesárea del latín caedere ("cortar").
a operación cesárea constituye uno de los avances más importantes de la medicin a perinatal contemporánea y ha tenido indiscutiblemente un impacto extraordinario en la disminución de la mortalidad materna y perinatal
Disminuir la morbi-mortalidad materna y perinatal asociada con el momento del nacimiento. Sin embargo, el procedimiento también conlleva riesgos periparto para el binomio madre-hijo y, a largo plazo, para gestaciones futuras
Cesárea del latín caedere ("cortar").
a operación cesárea constituye uno de los avances más importantes de la medicin a perinatal contemporánea y ha tenido indiscutiblemente un impacto extraordinario en la disminución de la mortalidad materna y perinatal
Disminuir la morbi-mortalidad materna y perinatal asociada con el momento del nacimiento. Sin embargo, el procedimiento también conlleva riesgos periparto para el binomio madre-hijo y, a largo plazo, para gestaciones futuras
Cesárea del latín caedere ("cortar").
a operación cesárea constituye uno de los avances más importantes de la medicin a perinatal contemporánea y ha tenido indiscutiblemente un impacto extraordinario en la disminución de la mortalidad materna y perinatal
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
El Instituto Nacional de Excelencia Clínica (NICE) del Servicio Nacional de Salud del Reino Unido publicó en abril del 2004; las guías para la operación cesárea, siendo el objetivo principal resaltar los aspectos de éstas que pueden tener implicaciones para los anestesiólogos y diferenciar entre una verdadera emergencia donde la vida de la madre o el feto son amenazadas y situaciones en las cuales no es una amenaza inminente a la vida; ésta la clasificó cae en 4 puntos con base en el bienestar del producto.
Categoría I. Amenaza inmediata para la vida de la mujer o el feto. Se debe realizar la operación cesárea por bradicardia fetal severa, prolapso de cordón, ruptura uterina y pH fetal menor de 7.2. Categoría II. Compromiso materno o fetal que no es una amenaza inminente para la vida. Hay un grado de urgencia para la fi matización del embarazo a fi n de evitar un mayor deterioro futuro de las condiciones ya sea de la madre o del feto. Por ejemplo, la hemorragia previa al parto, la falta en el progreso de trabajo de parto con compromiso materno o fetal. Categoría III. No hay compromiso materno o fetal pero se requiere interrumpir el embarazo. Ruptura prematura de membranas y cesárea programada con trabajo de parto. Categoría IV. Interrupción programada del embarazo adaptándose a la paciente y al personal. Cesárea electiva. En la cesárea urgente el tiempo seguro entre el diagnóstico y el inicio de la cesárea no deberá superar los 30 minutos (estándar internacional). En el caso de cesárea urgente o emergente el tiempo entre el diagnóstico y el inicio de la intervención no debería ser superior a los 15 minutos. Recientemente, la mortalidad obstétrica asociada a anestesia ha descendido al séptimo lugar en la lista de causas de mortalidad materna en los Estados Unidos de Norteamérica (2003) y se mantiene en porcentajes de una equivalencia de 1-3 muertes maternas por millón
Sus indicaciones son:
Segmento con mioma o tumor.
Vejiga adherida sobre el segmento.
Carcinoma invasivo de cérvix.
Placenta previa anterior.
Situación transversa fetal.