El documento discute cómo enseñar la composición escrita en la educación secundaria. Argumenta que escribir es una actividad social y cognitiva compleja que involucra procesos como la planificación, redacción y revisión. También destaca la importancia de enseñar géneros discursivos específicos en contextos reales y de fomentar la reflexión a través del diálogo entre profesores y estudiantes.