El capital de trabajo es la diferencia entre los activos corrientes y los pasivos corrientes de una empresa. Las principales fuentes de capital de trabajo son el endeudamiento o financiación con entidades financieras o proveedores, y la capitalización mediante la entrada de nuevos socios. Los principales usos del capital de trabajo son la declaración de dividendos, la compra de activos no corrientes, la reducción de deuda a largo plazo y la recompra de acciones.