El documento define la ira como una combinación de sentimientos negativos que generan enojo e indignación. Explica que la psicología recomienda exteriorizar la ira de manera no violenta para evitar que se convierta en una enfermedad, por ejemplo a través del deporte o la música. También describe que la ira se localiza en las regiones frontales y temporales del cerebro y que emociones intensas como la ira pueden interferir con el aprendizaje al desviar la atención. El documento analiza trastornos relacion