El documento resume varias definiciones clásicas de la ira y describe sus manifestaciones fisiológicas, como la activación del sistema simpático y aumento de la frecuencia cardíaca. Explica que la ira se localiza en regiones cerebrales como los lóbulos frontales y se ve influenciada por factores como los niveles de hormonas. También analiza cómo se aprende y modifica la ira a través de técnicas conductuales y cognitivas, y describe trastornos comunes como el trastorno explosivo intermitente y sus trat
Definición de ira. Localización de la ira en el cerebro. Influencias del aprendizaje. Modificaciones y tolerancia. Trastornos comunes. Tratamiento a estas reacciones
Universidad yacambu. Bianca Herrera
Definición de ira. Localización de la ira en el cerebro. Influencias del aprendizaje. Modificaciones y tolerancia. Trastornos comunes. Tratamiento a estas reacciones
Universidad yacambu. Bianca Herrera
Definición de ira. Localización de la ira en el cerebro. Influencias del aprendizaje. Modificaciones y tolerancia. Trastornos comunes. Tratamiento a estas reacciones.
Definición de ira. Localización de la ira en el cerebro. Influencias del aprendizaje. Modificaciones y tolerancia. Trastornos comunes. Tratamiento a estas reacciones.
Definición de ira. Localización de la ira en el cerebro. Influencias del aprendizaje. Modificaciones y tolerancia. Trastornos comunes. Tratamiento a estas reacciones.
Ira es un término de origen latino que se refiere a la furia y a la violencia. Se trata de una conjunción de sentimientos negativos que generan enojo e indignación.
En su acepción más positiva, la ira tiene como objetivo dar fuerza para protegerse y poder sobrevivir. Muchas veces se exacerba cuando no es necesario, con consecuencias a nivel fisiológico y del comportamiento, ya que el pulso se acelera, el corazón late rápido y la respiración se agita; pero también conlleva a que todos alrededor se sientan incómodos, amedrentados, con miedo y deseos de alejarse, porque seguramente nadie quiere relacionarse con una persona que estalla descontrolada y dice o hace cosas que luego cuesta olvidar.
Definición de ira, Localización de la ira en el cerebro.,Influencias del aprendizaje, Modificaciones y tolerancia, Trastornos comunes, Tratamiento a estas reacciones
SÍNDROME DE MOTONEURONA SUPERIOR E INFERIOR - SEMIOLOGÍA MÉDICAMATILDE FARÍAS RUESTA
El síndrome de motoneurona superior e inferior, también conocido como esclerosis lateral amiotrófica (ELA) o enfermedad de Lou Gehrig, es una enfermedad neurodegenerativa progresiva que afecta a las células nerviosas en el cerebro y la médula espinal. Estas células nerviosas controlan los músculos voluntarios, lo que lleva a la pérdida de control muscular y, eventualmente, a la parálisis.
Pòster presentat pel doctor José Ferrer, metge de l'equip d'Innovació de BSA, al XX Congrés de la Sociedad Española del Dolor, celebrat a León del 29 al 31 de maig de 2024.
DIFERENCIAS ENTRE POSESIÓN DEMONÍACA Y ENFERMEDAD PSIQUIÁTRICA.pdfsantoevangeliodehoyp
Libro del Padre César Augusto Calderón Caicedo sacerdote Exorcista colombiano. Donde explica y comparte sus experiencias como especialista en posesiones y demologia.
1. REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA
UNIVERSIDAD YACAMBU
CARRERA PSICOLOGÍA
MATERIA: FISIOLOGIA Y CONDUCTA
ALUMNA: MARÍA V. GARCÍA
JULIO, 2017.
2. Entre las definciones pioneras de la ira se encuentran la ofrecida por Buss (1961), que
incluye factores faciales-esqueléticos y autonómicos en la definición de la ira; la dada por
Feshbach (1964) en la que la ira es un estado indiferenciado de activación o arousal
emocional; o la dada por Kaufman (1970) que la ve como un estado de activación física que
coexiste con actos fantaseados o intencionados y que culmina con efectos perjudiciales
para otras personas. Algunos estudios transculturales muestran la estabilidad de un
conjunto de síntomas fisiológicos como son, el arousal displacentero, el “sentirese caliente”,
la tensión muscular o el incremento de la presión arterial, si bien es cierto que el peso de
estos síntomas podía variar de unos países a otros (Rimé y Giovannini, 1986). En la última
década (Berkowitz, 1999) hay un importante acuerdo en la descripción de los síntomas
fisiológicos de la ira) remarcándose la activación del sistema simpático, lo que favorece un
substancial incremento de la frecuencia cardiaca, y un importante incremento de la tensión
muscular.
LA IRA
3. LOCALIZACIÓN DE LA IRA
En el sistema neuroendocrino, el efecto de la ira en humanos y en primates no humanos
supone niveles altos de testosterona (hormona vinculada a la conducta agresiva y
dominante), así como niveles bajos de cortisol, y en el sistema nervioso central, destaca la
actividad cerebral asimétrica de los lóbulos frontales que se produce cuando se
experimentan estas emociones.
En este contexto, existen dos modelos conceptuales. Por un lado, el modelo de valencia
emocional, según el cual la región frontal izquierda del cerebro se halla implicada en la
experiencia de emociones positivas, mientras que la región frontal derecha se relaciona
más con las emociones negativas. Y el segundo modelo, de dirección motivacional, vincula
la región frontal izquierda con la experiencia de emociones que provocan el acercamiento, y
la región frontal derecha, con las emociones que incitan a la retirada.
4. INFLUENCIA DE LA IRA Y EL APRENDIZAJE
Su actitud hacia la ira probablemente fue desarrollada sobre la base de lo que aprendió
y vió de sus padres. Algunos niños aprenden a actuar cuando se sienten enojados,
mientras que otros niños aprenden a mantenerse tranquilos en situaciones de enojo. La
forma en que expresó su ira cuando era niño tenía que ver con la forma en que ustedes
ha sido criado. Incluso los niños que dicen: “No quiero ser como mi mamá cuando
estaba enfadada”, están influenciados por sus padres, aunque sea en un intento de
tener una actitud contraria.
En el proceso de aprendizaje de un sujeto, lo que abre la puerta a aprender es la
emoción. Esta despierta en las personas, la curiosidad, el interés y por tanto el foco de la
atención.
5. MODIFICACIONES Y TOLERANCIA DE LA IRA
El uso de técnicas conductistas es empleada para el cambio cognitivo. Dichas técnicas son
especialmente recomendadas cuando las técnicas cognitivas implementadas mediante
debate verbal, no arrojan eficacia suficiente para la modificación de los pensamientos
distorsionados y disfuncionales.
En algunos casos, suele ocurrir que las contingencias de la vida cotidiana refuerzan no
sólo conductas opuestas a la conducta que perturba al paciente, sino también a los
pensamientos contrarios asociados a tal conducta.
Ser Tolerante a la ira es ser capaz de afrontar los problemas y limitaciones. Buscar
soluciones alternativas a las utilizadas previamente. Para ello, se les enseña a identificar el
sentimiento de frustración cuando aparezca. Saber identificar, comprender y regular las
emociones que experimentamos a causa de la frustración (enfado, tristeza, decepción,
ira…).
6. Los episodios agresivos pueden ir antecedidos o acompañados por:
Irritabilidad
Aumento de la energía
Saña
Pensamientos agresivos
Hormigueo
Temblores
Palpitaciones
Opresión en el pecho
Sensación de presión en la cabeza
Depresión, cansancio o alivio son reacciones mentales que pueden acontecer tras el
episodio.
TRASTORNOS COMUNES DE LA IRA
7. TRASTORNOS COMUNES DE LA IRA
Las personas con trastorno explosivo intermitente presentan mayor riesgo de:
La autolesión. No siempre y en toda circunstancia dirigen su ira a los demás.
Presentan un riesgo significativamente mayor de dañarse a sí mismas, sea por lesión
deliberada o por intento de suicidio.
Las que, además, son adictas a las drogas o tienen otro trastorno mental grave, como
la depresión, se hallan en riesgo de hacerse daño a sí mismas.
El deterioro de las relaciones interpersonales. A menudo, estas personas son
percibidas por otros como estar siempre y en todo momento enojadas. Esto puede
conducir a problemas de pareja, divorcio y tensiones familiares.
Problemas en el trabajo, en casa o en la escuela. Otras complicaciones del trastorno
explosivo intermitente pueden incluir la pérdida de empleo, suspensión en la escuela,
accidentes de tráfico, problemas financieros o problemas con la ley.
8. TRATAMIENTO DE LA IRA
Psicoterapia
Las sesiones de terapia individual o grupal pueden ser útiles. Un tipo de terapia, la
terapia cognitivo-conductual, sirve para ayudar a las personas con trastorno explosivo
intermitente a identificar condiciones o prácticas que pueden provocar una respuesta
beligerante.
Más importante todavía, este tipo de terapia enseña a las personas a controlar la ira y
las respuestas inapropiadas a través del uso de técnicas semejantes (técnicas de
relajación, meditar diferente sobre situaciones (reestructuración cognitiva) y la
capacidad de aprendizaje).
Medicación
Los diferentes tipos de medicamentos pueden ayudar en el tratamiento de trastorno
explosivo intermitente. Estos medicamentos incluyen:
Los antidepresivos como la fluoxetina. Los anticonvulsivos, como carbamazepina,
oxcarbazepina, fenitoína, topiramato y la lamotrigina. Los agentes anti-ansiedad en la
familia de las benzodiazepinas, como el lorazepam y el clonazepam. Estabilizadores del
estado de ánimo como el litio.