El documento describe los cuatro tipos de capital de una empresa: capital humano, capital intelectual, capital estructural y capital relacional. El capital humano se refiere al conocimiento y habilidades de los empleados. El capital intelectual incluye las relaciones con clientes, socios e innovación. El capital estructural es el conocimiento sistematizado de la empresa. El capital relacional comprende las relaciones con proveedores, bancos y otros grupos de interés.