La muerte celular puede ocurrir por necrosis o apoptosis. La necrosis es la muerte celular patológica causada por daños letales como isquemia, traumatismo o agentes tóxicos, mientras que la apoptosis es una muerte celular controlada que elimina células dañadas o no necesarias para mantener la homeostasis. La apoptosis implica cambios morfológicos como la condensación de la célula y la liberación de factores mitocondriales, y sirve para prevenir enfermedades eliminando células anormales.