La Primera Guerra Mundial fue causada por las rivalidades imperialistas y nacionalistas entre las potencias europeas a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, que llevaron al enfrentamiento militar en 1914. El conflicto duró cuatro años y medio y tuvo lugar principalmente en Europa, causando una gran pérdida de vidas humanas y dejando a los países participantes en un estado de inestabilidad política y económica.