La enfermedad hemorrágica del recién nacido es una coagulopatía adquirida causada por una deficiencia de factores de coagulación dependientes de vitamina K. Puede presentarse de forma temprana, clásica o tardía. El tratamiento incluye la administración de vitamina K y derivados de plasma para prevenir hemorragias. La profilaxis consiste en una dosis intramuscular de vitamina K al nacimiento.