Los signos vitales incluyen el pulso, la presión arterial, la frecuencia cardiaca y la frecuencia respiratoria. El pulso es la pulsación de las arterias causada por la circulación de la sangre bombeada por el corazón. La presión arterial mide la fuerza ejercida en las paredes de las arterias y depende de la contracción del corazón. Estos signos vitales se miden para monitorear la salud del paciente.