La educadora utilizó una situación didáctica llamada "Nuestros libros" para enseñarles a los niños las características de un libro como la portada, el título, el autor y las ilustraciones. Los niños crearon sus propios libros con ayuda de la educadora y sus padres, y aprendieron que los autores pueden ser hombres o mujeres y que las ilustraciones pueden ser dibujos o fotografías. Los libros creados por los niños se agregaron a la biblioteca del aula.