Este documento describe tres técnicas de registro de la actividad eléctrica: electrocardiogramas, que miden la actividad eléctrica del corazón; electroencefalogramas, que miden la actividad eléctrica del cerebro; y electromiogramas, que miden la actividad eléctrica de los músculos y nervios. Cada técnica se utiliza para diagnosticar diferentes afecciones y proporciona información sobre el funcionamiento normal y anormal de dichos órganos. El documento también incluye ejemplos de resultados anormales y sus
3. Electrocardiogramas
Un electrocardiograma suele escribirse como ECG, y es un examen que registra
la actividad eléctrica de nuestro corazón.
Un ECG se suele utilizar para: descubrir cualquier tipo de daño que pueda existir
en el corazón; para medir las pulsaciones normales del corazón; comprobar que
los fármacos o dispositivos que controlan el corazón funcionen correctamente;
observar el tamaño y posición de las cámaras del corazón.
Normalmente los ECG se suelen realizar si: se presentan dolores torácicos; por
una programación de una cirugía; por problemas cardíacos en el pasado; por
familiares con algún fuerte problema cardiaco.
4. Electrocardiogramas
Los resultados normales de un ECG consisten en una frecuencia cardíaca de 60 a 100 latidos por minuto y un ritmo
cardíaco constante y uniforme.
En cambio, si los resultados no son normales puede deberse a: cambios o daños en el miocardio; cambios en la cantidad
de electrolitos (potasio y calcio) en la sangre; agrandamiento del corazón, etc.
5. Electrocardiogramas
Uno de los problemas que puede sufrir el corazón es arritmia. Es un trastorno de las frecuencias
cardíacas, el corazón puede latir demasiado deprisa (taquicardias) o demasiado lento (bradicardia) o de
manera irregular. Esto puede deberse a múltiples causas, como por ejemplo, a que un trozo del tejido del
corazón, esté muerto.
Para averiguar a qué es debido este problema, te someten a un electrocardiograma. Los
electrocardiogramas son indoloros y no dejan ningún tipo de secuela.
Si efectivamente, la arritmia es debido a un tejido muerto del corazón, deben quemar el tejido.
Dependiendo en cuál de las cuatro zonas se encuentre el tejido, deberán quemarlo o bien con frío o bien
con calor.
7. Electroencefalograma
Un electroencefalograma, también es conocido como EEG. Y trata de un examen para medir la actividad
eléctrica cerebral.
Los EEG se realizan de la siguiente manera:
Se tumban boca arriba en una cama o en una silla reclinable Se colocan electrodos, en el cuero
cabelludo, los cuales están conectados por cables a una grabadora. Una máquina, convierte las señales
eléctricas en patrones que se pueden observar o ser dibujadas en un papel. Durante el proceso es
necesario que el paciente se mantenga quieto y con los ojos cerrados. También, pueden pedirle que
realice diversas acciones o simplemente pueden pedirle que se duerma.
Si el médico necesita monitorear la actividad cerebral durante un período largo, se ordenará un EEG
ambulatorio. Además de los electrodos, usted usará o portará una grabadora especial por hasta tres días.
Usted podrá ocuparse de su rutina normal a medida que se esté registrando el EEG
8. Electroencefalograma
Los motivos por los cuales se puede realizar un EEG son: por convulsiones y
epilepsia; cambios anormales en la química corporal que afecten al cerebro;
enfermedades cerebrales; desmayos habituales o pérdidas de memoria;
traumatismos craneales; infecciones; tumores; problemas de sueño; monitorear el
cerebro durante una cirugía cerebral.
La actividad eléctrica del cerebro tiene un cierto número de ondas por segundo
que son normales para niveles diferentes de conciencia. Por ejemplo, las ondas
cerebrales son más rápidas cuando uno está despierto y más lentas en ciertas
etapas del sueño
9. Electroencefalograma
Si los resultados de un EEG no son normales puede deberse a: sangrado
anormal (hemorragia); un tumor cerebral; problemas de atención: tejido muerto
debido a un bloqueo de suministro de sangre (infarto cerebral); alcoholismo o
drogadicción; traumatismo craneal; epilepsia; trastornos de sueño; inflamación del
cerebro.
Un EEG es muy seguro. Las luces centelleantes o la respiración rápida
requeridas durante el examen pueden desencadenar convulsiones en aquellas
personas con trastornos convulsivos. El proveedor de atención médica que lleva a
cabo la electroencefalografía está capacitado para intervenir si esto sucede.
11. Electroencefalograma
En el Estado Vegetativo las funciones autonómicas como la respiración, el ritmo
cardiaco o la regulación de la temperatura están conservadas. Puede ser
diagnosticado pronto después de un daño cerebral y puede ser parcial o
totalmente reversible, o progresar a un estado de estado vegetativo permanente o
a la muerte del paciente.
Los principales criterios son: El paciente no muestra signo alguno de conciencia;
alterna períodos en los que está “despierto” con períodos de “sueño”; no
responde a ninguna orden; no muestra movimiento, etc.
13. Electromiogramas
Un electromiogramas es un examen que verifica la salud de los músculos y los nervios que los controlan.
El médico introduce un electrodo de aguja muy delgado a través de la piel dentro del músculo. El
electrodo en la aguja detecta la actividad eléctrica liberada por los músculos. Esta actividad aparece en
un monitor cercano y se puede escuchar a través de un parlante.
Después de la colocación de los electrodos, pueden solicitar que contraiga el músculo, por ejemplo,
doblando el brazo. La actividad eléctrica observada en el monitor suministra información sobre la
capacidad del músculo para responder cuando se estimulan los nervios que van a dichos músculos.
14. Electromiogramas
Una electromiografía se emplea con mayor frecuencia cuando una persona tiene síntomas de debilidad,
dolor o sensibilidad anormal. Este examen puede ayudar a diferenciar entre debilidad muscular causada
por lesión de un nervio fijado a un músculo y debilidad debido a trastornos del sistema nervioso, como
enfermedades musculares.
Normalmente hay muy poca actividad eléctrica en un músculo en reposo. Introducir las agujas puede
causar alguna actividad eléctrica, pero una vez que los músculos se calman, se debe detectar muy poca
actividad de este tipo.
Cuando se flexiona un músculo, la actividad comienza a aparecer. A medida que se contrae más el
músculo, la actividad eléctrica se incrementa y se puede observar un patrón. Este patrón le ayuda al
médico a determinar si el músculo está respondiendo como se debe.
15. Electromiogramas
Una electromiografía puede detectar problemas con los músculos durante el
reposo o la actividad. Entre los trastornos o afecciones que ocasionan resultados
anormales están los siguientes: neuropatía alcohólica; espondilosis cervical;
dermatomiositis; parálisis periódica familiar, etc.
Un electromiogramas, puede producir un sangrado mínimo o una infección en la
zona de inserción de los electrodos.
17. Electromiogramas
Una de las enfermedades que se puede hallar a través de un electromiograma
puede ser una atrofia muscular por denervación. Es Cuando un músculo pierde su
inervación por parte de las fibras nerviosas, ya no recibe las señales contráctiles
que son necesarias para mantener el tamaño muscular normal. Por tanto, la
atrofia, fenómeno donde ocurre la disminución de la masa total de un músculo,
comienza casi inmediatamente.