Tema 1. el cerebro humano sus partes, sus funciones y sus propiedades
1. TEMA 1. EL CEREBRO HUMANO:
SUS PARTES, SUS FUNCIONES Y SUS
PROPIEDADES
ASCENSIÓN PEÑARANDA RUIZ
#NEUROEDU
2. 1. PARTES Y FUNCIONES DEL CEREBRO
El cerebro es un órgano situado dentro de la cavidad craneal
que se encarga de controlar tanto funciones vitales, como
funciones cognitivas superiores.
CÉLULAS QUE LO COMPONEN:
NEURONAS: Su función es recibir y transmitir información
CÉLULAS DE GLÍA: Su función es ofrecer alimentación y soporte a las neuronas,
parecen intervenir en el proceso inicial de creación de conexiones neuronales .
3. Partes de la neurona
Estos axones pueden
estar recubiertos de mielina,
sustancia que provoca un
aumento en la velocidad de
transmisión del impulso en
las neuronas que lo
presentan.
4. Principal función de las neuronas, la sinapsis
Las neuronas se comunican entre sí
a través de las sinapsis.
La neurona que transmite la
información (neurona presináptica) se
conecta desde el final de su axón (terminal
axónico) con las dendritas de la neurona
que recibe la información (neurona
postsináptica) a través de un pequeño
espacio que queda entre ellas llamada
hendidura sináptica.
5. El interior de las neuronas tiene carga electromagnética
negativa. Cuando una neurona es estimulada, se abren los poros de
la membrana que permiten la entrada de iones positivos, lo que
hace que el interior se vuelva menos negativo. El cambio eléctrico
resultante, se denomina potencial de acción.
ESTIMULACIÓN
DE LA NEURONA
6. Este potencial de acción, va desde el cuerpo celular a través
del axón, y cuando alcanza los terminales del axón provoca que en
la hendidura sináptica se liberen unas sustancias químicas llamadas
neurotransmisores. Estos neurotransmisores se unen a receptores
específicos situados en el terminal dendrítico de la neurona
postsináptica.
RECEPTOR
NEUROTRANSMISOR
7. Organización funcional : circuitos neuronales
Las neuronas que realizan las mismas funciones o parecidas
están conectadas unas con otras en conjuntos.
Estos conjuntos a su vez están conectados con otros conjuntos,
uniendo, directa o indirectamente, un área del cerebro con otras en
complicados circuitos.
A todo el conjunto de distintos circuitos se le conoce como
conectoma.
8. La genética tiene un gran peso en que la organización
cerebral y la velocidad de procesamiento sea diferente en cada
persona.
A esto hay que añadirle la experiencia en nuestra
interacción con el ambiente (incluido el ambiente intrauterino),
que actúa sobre esta estructura básica produciendo cambios en la
organización del cerebro y en las redes neuronales que sustentan
los procesos cognitivos y emocionales.
9. Hemisferios cerebrales
Anatómicamente el cerebro está dividido en dos partes muy
similares: el hemisferio izquierdo y el hemisferio derecho.
El hemisferio derecho controla la mayoría de las actividades
del lado izquierdo del cuerpo y el hemisferio izquierdo las de la
derecha.
Ambos hemisferios se comunican por medio de una banda
de hasta 250 millones de fibras nerviosas llamada cuerpo calloso.
10. El hemisferio derecho se ha visto que juega un papel
importante en las habilidades espaciales y el reconocimiento de rostros,
mientras que el hemisferio izquierdo contiene redes cruciales
involucradas en el lenguaje, las matemáticas y la lógica.
No obstante, a pesar de que hay algunas actividades que
aparentemente son dominantes en un hemisferio, ambos
hemisferios contribuyen casi permanentemente a la actividad
cerebral como un todo.
11. Lóbulos
La capa exterior de los hemisferios, es decir, la corteza
cerebral o neocorteza (también neocórtex) se divide, a su vez, en
lóbulos.
Mientras que cada destreza depende de la acción
coordinada de redes neuronales entre los lóbulos, cada lóbulo
puede asociarse de manera aproximada más a unas funciones
particulares que a otras.
12. •INVOLUCRADO EN PLANIFICACIÓN Y ACCIÓNLÓBULO FRONTAL
•AUDICIÓN
•MEMORIA
•RECONOCIMIENTOS DE OBJETOS
LÓBULO TEMPORAL
•SENSACIÓN Y EL PROCESAMIENTO ESPACIALLÓBULO PARIETAL
•ESENCIAL PARA LA VISIÓNLÓBULO OCCIPITAL
División funcional de los lóbulos cerebrales
13. El sistema límbico recibe directamente la información de
sensaciones de los órganos internos y resto del cuerpo, de modo
que cualquier cambio estimular detectado a través de los sentidos
en el interior o el exterior al cuerpo se recibe en esta parte central
del cerebro, ocasionando, en la mayoría de los casos reacciones
cerebrales y corporales de respuesta que son inconscientes y van
encaminadas a mantener el bienestar y la supervivencia. Milésimas
de segundo después, algunas de estas informaciones tienen su
expansión hacia distintas zonas de la corteza cerebral.
Por debajo de la corteza cerebral destacan dos grandes
estructuras, conocidas como el lóbulo límbico o sistema límbico y la
base del cerebro (tronco cerebral y cerebelo).
14. El tronco cerebral y el cerebelo son
estructuras más básicas del cerebro y más
parecidas a las presentes en el cerebro de
reptiles, residiendo en ellas funciones cerebrales
de procesos corporales automáticos y vitales
para la supervivencia, como la respiración o la
tos.
15. La ciencia ha encontrado que partes del cerebro, como el
hipocampo, desempeñan un rol crucial en el aprendizaje y el
establecimiento y también borrado de recuerdos (memoria) ya que
generan nuevas neuronas cada día, a lo largo de toda la vida.
Mientras el cerebro procesa la información del ambiente (interior
del cuerpo y exterior a nuestro cuerpo), las conexiones cerebrales se van
ajustando, creándose nuevas conexiones (sinaptogénesis), o bien
reforzando las más activas o eliminando las más inactivas.
Neurogénesis
16. Cuando las conexiones de una neurona se vuelven
progresivamente inactivas, la célula misma puede morir, lo cual
sugiere que el cerebro funciona siguiendo el principio de economía o
rentabilidad: lo que se usa se mantiene e incluso mejora y lo que no
se usa, se deshecha y se derivan los recursos infrautilizados a otras
funciones con mayor demanda en el cerebro.
El nacimiento de nuevas neuronas (neurogénesis) unido a
la muerte de neuronas hace que la estructura cerebral se modifique
a lo largo del ciclo vital, permitiendo al cerebro ajustarse al
ambiente cambiante y a la experiencia.
17. Plasticidad
El cerebro cambia de manera significativa a lo largo de la vida a
partir de las experiencias de aprendizaje. Esta flexibilidad del cerebro
para responder a las demandas ambientales se llama plasticidad.
Antes se pensaba que sólo los cerebros infantiles eran plásticos.
Esto se debía al crecimiento extraordinario de sinapsis nuevas y a la
adquisición de nuevas habilidades simultáneamente en los tres
primeros años de vida.
Sin embargo, la información descubierta en las dos últimas
décadas ha confirmado que el cerebro retiene su plasticidad a lo largo
de toda la vida, por lo que podemos aprender en cualquier etapa de la
vida, aunque de formas un tanto diferentes en las distintas etapas
(Koizumi, 2003; OCDE, 2002).
18. La plasticidad se puede clasificar en dos tipos:
expectante a la experiencia o
dependiente de la experiencia.
La plasticidad expectante a la experiencia hace referencia a
aquellas modificaciones que se producen en el cerebro cuando éste
es expuesto en ciertos momentos a determinados estímulos para
los que está genéticamente más predispuesto en ese período. Estos
momentos son los que conocemos como periodos sensibles (término
actualmente más aceptado que el de períodos críticos).
19. La plasticidad dependiente de la experiencia en cambio,
hace referencia a los cambios que se producen en el cerebro como
resultado de exponer al cerebro a ambientes complejos durante la
vida.
20. BIBLIOGRAFÍA
Bisquerra Alzina, R., Pérez-González, J.C y García Navarro, E. (2015). Inteligencia
emocional en educación. Madrid: Síntesis.
Organization for Economic Cooperation and Development (OECD) (2002). Understanding
the Brain: Towards a New Learning Science. Paris: OECD
Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) (2009).La
comprensión del cerebro: El nacimiento de una ciencia del aprendizaje. Santiago de
Chile: OCDE.
Koizumi, H. (2003). “Science of Learning and Education: An Approach with Brain-function
Imaging”, No To Hattatsu, vol. 35, núm. 2, pp. 126-129.