Las emociones son estados afectivos que indican estados internos como motivaciones y deseos. Aunque a menudo se les da menos importancia que a la razón, las emociones deben reconocerse y controlarse para no dejarse dominar por ellas. La inteligencia emocional es la habilidad para manejar las propias emociones y las de los demás de forma positiva. La autoestima se basa en la valoración personal derivada de experiencias de vida.