F81 trastornos especificos del desarrollo del aprendizaje escolar
1.
2. BIOLOGICOS-Estos trastornos no son
directamente atribuibles ni a anomalías
neurológicas o de los mecanismos del lenguaje, ni
a deterioros sensoriales, retraso mental o factores
ambientales.
Aunque el niño pueda ser capaz de comprender y
comunicarse en ciertas situaciones muy
familiares, más que en otras, la capacidad de
lenguaje es deficitaria en todas las circunstancias.
3. El deterioro no es
únicamente
consecuencia de la
falta de oportunidades
para aprender, ni es la
consecuencia de
traumatismos o
enfermedades
cerebrales adquiridos.
surgen de alteraciones
los procesos
cognoscitivos, en gran
parte secundarias a
algún tipo de
disfunción biológica.
4. La necesidad de diferenciar estos trastornos de las
variaciones normales del rendimiento escolar
En segundo lugar, la necesidad de tener en cuenta el
momento evolutivo, lo cual es importante por dos razones
diferentes:
a) la gravedad, por ejemplo, un retraso de un año en la
lectura a los 7 años de edad, tiene un significado muy
diferente de un retraso de un año a los 14 años y
b) los cambios de la manera de manifestarse, de modo que
es frecuente
que un retraso en el lenguaje en la edad preescolar, pierda
intensidad con el paso del tiempo, pero se prolongue en
forma de un retraso específico de la lectura que, a su
vez, disminuye en la adolescencia y da lugar al comienzo de
la edad adulta a un trastorno grave de la ortografía.
5. tercer lugar, está la dificultad de que el
rendimiento escolar es también consecuencia del
aprendizaje y de la enseñanza, es decir no es sólo
consecuencia de la maduración biológica.
6. El nivel de aprendizaje de los niños depende
inevitablemente de las circunstancias familiares y
escolares, así como de sus propias características
individuales
7. En cuarto lugar, aunque los resultados de la
investigación apoyan las hipótesis de la presencia
de alteraciones subyacentes de los procesos
cognoscitivos, no hay un método fácil para
diferenciar en un niño en concreto las que causan
las dificultades de lectura, de aquellas que son
consecuencia de una escasa capacidad de lectura o
que son concomitantes.
8. En quinto lugar, persisten dudas sobre cual es la
mejor forma de subdividir los trastornos
específicos del desarrollo del aprendizaje escolar.
9. En todos los sistemas educativos, está claro que
en cada grupo de edad cronológica hay una amplia
variación del rendimiento escolar adquirido y que
en algunos niños puede ser bajo en aspectos
concretos en relación con el nivel general de su
capacidad intelectual.
10. Los trastornos específicos del desarrollo del
aprendizaje escolar suelen presentarse
acompañados de otros síndromes (tales como
trastornos de déficit de atención o trastornos
específicos del desarrollo del habla y el lenguaje).
11. El retraso del rendimiento escolar de los niños
puede aparecer en un estadío posterior de sus
estudios, pero estos problemas no forman parte
de la definición de los trastornos específicos del
desarrollo del aprendizaje escolar.
12. Primero, debe haber un deterioro clínicamente
significativo del rendimiento escolar
específico, valorado a partir de la gravedad
definida por el nivel de escolaridad
(antecedentes-problemas concomitantes-por
formas o conjuntos específicos de rasgos-por la
respuesta a intervenciones concretas )
Segundo, el déficit debe ser específico en el
sentido de que no sea explicable por un retraso
mental o por déficits menores de la inteligencia
general.
13. Tercero, el déficit debe ser precoz, en el sentido de
que debe haber estado presente desde el
comienzo de la educación y no haber sido
adquirido con posterioridad
Cuarto, deben estar ausentes factores externos
que pudieran justificar suficientemente las
dificultades escolares.
En quinto lugar, los trastornos específicos del
desarrollo del aprendizaje escolar no pueden
deberse directamente a déficits visuales o de
audición no corregidos.
14. Hay que tener en cuenta que es clínicamente
importante distinguir entre los trastornos
específicos del desarrollo del aprendizaje escolar
que se presentan en ausencia de algún trastorno
neurológico diagnosticable y los que son
secundarios a algún trastorno neurológico, como
por ejemplo, una parálisis cerebral.
15. La característica principal de este trastorno es un
déficit específico y significativo del desarrollo de
la capacidad de leer que no se explica por el nivel
intelectual, por problemas de agudeza visual o por
una escolarización inadecuada.
16. Pueden estar afectadas la capacidad de
comprensión de lectura, el reconocimiento de
palabras leídas, la capacidad de leer en voz alta y
el rendimiento en actividades que requieren leer.
17. El mejor modo de evaluar este rendimiento es la
aplicación de forma individual de tests
estandarizados de lectura y de precisión y
comprensión de la lectura.
Dificultades para recitar el alfabeto, para hacer
rimas simples, para denominar correctamente las
letras y para analizar o categorizar los sonidos.
18. trastorno cuya característica principal es un
déficit del dominio de la ortografía en ausencia de
antecedentes de un trastorno específico de la
lectura y que no es explicable por una nivel
intelectual bajo, por problemas de agudeza visual
o por una escolarización inadecuada.
19. Afectada la capacidad de deletrear en voz alta y de
escribir las palabras correctamente.
20. El mejor modo de evaluar este trastorno es la
aplicación individual de un test estandarizado de
ortografía.
La capacidad de lectura del niño (tanto en lo que
respecta a la exactitud como a la comprensión)
deben estar dentro de los límites normales y no
debe haber antecedentes de dificultades
significativas de lectura.
21. Alteración específica de la capacidad de
aprendizaje de la aritmética, no explicable por un
retraso mental generalizado o por una
escolaridad claramente inadecuada.
22. Se valora preferentemente mediante la aplicación
individual de test de cálculo aritmético
estandarizados.
Las capacidades perceptivas, auditivas y verbales
tienden a estar dentro de niveles
normales, mientras que la capacidad viso espacial
y viso perceptiva tienden a estar afectadas
23. Se trata de una alteración,, en la cual están
alterados de un modo significativo tanto el
rendimiento aritmético como el de lectura u
ortografía y en la que la inteligencia general está
dentro del rango normal y no está presente una
mala enseñanza escolar.