Son muchos los pasos que se deben seguir a la hora de adquirir un nuevo inmueble, cada uno de ellos indispensable, ya que es una decisión muy importante ante la que nos enfrentamos y no puede tomarse a la ligera.
2. A la hora de comprar una nueva vivienda, son muchos los pasos
que hay que llevar a cabo hasta que por fin cuentas con las
llaves en tu bolsillo.
Para llegar a ese fin son muchos los agentes externos con los
que se debe contar, además de tener paciencia ya que el
proceso como se comentaba antes, es largo y complicado.
Lo ideal en todo el proceso es comenzar con la búsqueda de la
vivienda con tiempo, dedicándole especial atención a aquellos
factores que consideremos más oportunos para el futuro
disfrute de esta.
3. En un primer lugar, y en cuanto a la elección de la vivienda
debemos tener en cuenta una serie de condiciones
indispensables, tener claros los gustos, preferencias y
necesidades de cada uno, ya que esto es una inversión a largo
plazo, es por ello que todo el tiempo que se le dedique a pensar
en ello es poco. En cuanto a los factores hay que analizar:
1. La zona en que se ubique.
2. El tipo o modalidad de vivienda deseado.
3. La antigüedad del edificio o inmueble.
4. Las características técnicas del mismo.
4. Otro de los pasos a llevar a cabo es el establecimiento de un
presupuesto fijo, centrarnos en el y ajustarnos al mismo es vital,
ya que una vez hecho este paso, cerramos el círculo de
posibilidades que se nos presenta.
Además de esto hay que tener en cuenta que gastos mensuales
se pueden llegar a afrontar, haciendo una pequeña proyección
futura de los ingresos mensuales de los que se dispondrá para
hacer frente a estos.
Antes que nada hay que hacer números, comprobar la
estabilidad y la liquidez disponible, para después lanzarnos a la
búsqueda de algo más concreto y accesible.
5. La selección del tipo de vendedor que tenga el inmueble es
importante, ya que el proceso de compra es variable
dependiendo de este. Así pues, podemos clasificarlos en los
siguientes:
1. Vendedores particulares, con este modelo el negociar el
precio es algo más accesible, se evita pagar comisiones,
pero hay que asegurarse que el proceso no esta ocultando
algún tipo de engaño.
2. Promotoras y constructoras, siempre se corre el riesgo de
que la obra quede sin terminar y nos veamos pagando por
un inmueble desde el plano, sin haber accedido al mismo.
Pero nos aseguramos que el precio de la misma no variará
cuando la obra haya finalizado.
6. 3. En la actualidad, las grandes inmobiliarias las conforman los
bancos, como inconvenientes de este tipo de vendedores es
que el precio de la vivienda suele ser más alto de la habitual,
pero el acceso a la misma y los planes hipotecarios son
mucho más accesibles y flexibles.
4. Por último, como agente vendedor, encontramos las
agencias inmobiliarias, que tienen la ventaja de que nos
ahorran dolores de cabeza ya que estos se encargan de todo
el proceso de compra, eso sí, a cambio de unas comisiones.
Para garantizar que todo el proceso está tramitándose bajo
procesos legales, es vitar garantizar que el profesional
intermediario esté colegiado.
7. Una vez seleccionado el presupuesto, el modelo de casa que
deseamos, la ubicación de la misma y el tipo de vendedor, es
paso fundamental, hacer una visita al barrio en el que nos
vamos a instalar.
En esta visita deberemos comprobar todos los servicios que nos
ofrece en cuanto a nuestras necesidades, así por ejemplo
deberemos visualizar la existencia de supermercados, centros
lúdicos y deportivos, colegios e institutos, zonas verdes,
dependiendo de la persona se necesitarán unos servicios u
otros.
Si tenemos la posibilidad de acceder a conversar con algún
vecino de la zona que te cuente de primera mano lo que es vivir
allí, mucho mejor.
8. En cuanto al precio del inmueble, este variará dependiendo del
barrio y de la zona. No todas las zonas tienen el mismo coste por
m2 ni los mismos gastos de mantenimiento.
Es por ello, que para valorar si el precio que nos da el vendedor
es el adecuado y no se sobrepasa de los límites, hay que
conocer el precio medio de la zona y de inmuebles del estilo del
que vayamos a adquirir.
Por norma general, como en la mayoría de los casos, cuanto más
oferta y diversidad exista, más ajustado será el precio de la
vivienda, la exclusividad es un lujo y esta se paga.
9. Una vez ya establecido el precio del mismo, hay que ver las
posibles formas de financiación o pago de la vivienda, en este
paso encontramos varias formas, que son las más comunes y
utilizadas por todos los compradores.
1. El pago al contado, a través de un cheque certificado o una
transferencia bancaria, una vez se hayan firmado las
escrituras del inmueble y comprobado que este esta libre de
cargas.
2. Bajo préstamo hipotecario, que es la opción más habitual.
3. Subrogarse a la hipoteca concertada, en la que el comprador
se hace cargo de la hipoteca del vendedor.
4. Y por último mediante el proceso denominado «precio
aplazado», con el que el coste de la vivienda se abona tras la
firma de la escritura de compraventa.
10. Por último, el paso definitivo es hacer frente a los gastos de
tramitación que vienen de la mano con el proceso de compra.
Entre estos gastos encontramos los de notaría, el IVA, el ITP, IBI,
IRPF, …, así como pagar el seguro de la vivienda y las cuotas de
la comunidad de vecinos.
En cuanto a la formalización de todo este proceso, se llevará a
cabo cuando la entidad financiera apruebe el crédito hipotecario
una vez superada la prueba de tasación. Es en este momento en
el que el comprador ya puede dar el paso de adquirir el
inmueble y aprobar la compra.