Miofascitis necrotizante en perro con tratamiento inmunosupresor.

1. Miofascitis necrotizante por Streptococcus agalactiae en un perro bajo tratamiento
inmunosupresor
Pachi Clemente Vicario2
Joaquín Ortega3
David Viana3
Agustín Barragán3
Ángel García Muñoz4
1
Clínica Veterinaria La Merced 2
Servicio Oncología. Hospital Clínico Veterinario UCH CEU 3
Histología y
Anatomía Patológica. Facultad de Veterinaria. UCH CEU 4
Microbiología y Enfermedades Infecciosas.
Facultad de Veterinaria. UCH CEU
Introducción y caso clínico:
La fascitis necrotizante es una infección severa que afecta a la fascia superficial, y se asocia a toxicidad
sistémica y tiene una mortalidad del 30-60% en humana. Además, muchos animales tienen signos
sistémicos concurrentes de shock1. Se asocia principalmente a estreptococos del grupo A, mientras que
los del grupo B, al que pertenece Streptococcus agalactiae, solo se han relacionado en dos ocasiones en
animales con la fascitis necrotizante2, ninguna de ellas en el perro.
Ingresa de urgencia un gran danés de 6 años y 73 kg diagnosticado de anemia hemolítica
inmunomediada 16 días antes y en tratamiento con prednisona (2 mg/kg/12 h) y azatioprina (2 mg/kg/día)
con letargia y fiebre. En el examen físico presenta edema de extremidades y parte ventral del cuerpo, 200
lpm, y soplo mitral. El hemograma muestra anemia (hematocrito 25%, rango normal 37-55), macrocítica
(VCM 77.2, normal 60-77) hipocrómica (CHCM 30.4 g/dl, normal 32-36) y 12.200 leucocitos/ul (6.000-
17.000) con desvío degenerativo a la izquierda. El perfil bioquímica fue normal excepto para los valores
de ALT (855 U/l, normal 0-100) y Bilirrubina total (2.55 mg/dl, normal 0-0.6).
A las 24 horas el perro murió. En la necropsia se observó una miofascitis necrotizante severa en la
extremidad posterior izquierda, hidropericardio, endocarditis valvular mitral y degeneración glucogénica
hepática.
Los hisopos tomados del tejido necrosado en la extremidad posterior izquierda y conservados en medio
Stuart, fueron sembrados en Columbia agar suplementado con un 5% de sangre desfibrinada de oveja
(Oxoid, Basingstoke, UK). A las 24 horas se obtuvo un crecimiento en pureza. El aislado fue caracterizado
de acuerdo a su morfología, tinción de Gram, oxidasa, catalasa y confirmado como Streptococcus
agalactiae mediante el sistema Crystal (Becton Dickinson Laboratory).
Discusión:
Este perro presentó un proceso inflamatorio y necrotizante severo que afectaba a los planos profundos de
la extremidad posterior izquierda. La causa de la muerte es muy probablemente una septicemia
secundaria a dicho proceso, aunque no se realizó cultivo bacteriano en sangre u otros órganos internos.
Aunque la vía de entrada de las bacterias no se puede determinar con exactitud, la ausencia de
inflamación superficial (dermatitis / celulitis) y el hecho de que sólo estuviera afectada una extremidad,
sugiere que la infección pudo originarse a través de una herida perforante o inyección intramuscular
previa. La lesión observada en el hígado suele estar causada por el uso de glucocorticoides.
La fascitis necrotizante es una enfermedad severa que puede resultar en enfermedad sistémica,
septicemia y muerte con un síndrome tóxico2. La septicemia por estreptococos es rara en perros adultos,
menos del 1% de las infecciones por estreptococos resultaron en septicemia en adultos2, pero cuando se
presenta, suele ser secuela de infecciones localizadas como la fascitis necrotizante.
En personas, solo se han descrito una veintena de casos de fascitis necrotizante asociada a
estreptococos del grupo B, siendo 8 de ellos, niños menores a 12 años. En adultos, la fascitis por
Streptococcus agalactiae, se asoció a enfermedades que resultan en inmunosupresión, presentando una
gran mortalidad3. En el caso descrito, el animal estaba bajo un tratamiento inmunosupresor para tratar
una anemia hemolítica inmunomediada, lo que ha podido favorecer el desarrollo de la infección. Es
importante resaltar que la el único signo de inflamación en el hemograma era el desvío degenerativo a la
izquierda. Aunque el número total de leucocitos estaba dentro del rango normal, el desvío degenerativo a
la izquierda (número de neutrófilos inmaduros superior al de neutrófilos segmentados), se considera un
factor de mal pronóstico4.
A los autores no les consta ningún otro caso descrito, por lo que este sería el primer caso de miofascitis
necrotizante por Streptococcus agalactiae en el perro, siendo una complicación que debe tenerse en
cuenta en animales inmunodeprimidos o que reciben tratamientos inmunosupresores.
Bibliografía:
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