1. Robert Owen
Owen influido por su suegro, el cual estaba preocupado por la situación social y
laboral de sus trabajadores, decidió crear las Infant School para conseguir entre
sus principales objetivos suprimir la explotación laboral de niños en las
fábricas. Por otro lado, los adultos también podían recibir formación en estas
aulas por la noche, ya que también tenían derecho a formarse.
Para ello, construyó un edificio en New Lanark de dos plantas. En la planta
baja, existían tres aulas para impartir clase a niños de hasta cuatro años. Y en la
planta superior, dos aulas para los niños de cuatro a seis años.
La metodología que utilizaba Owen se basaba en: no usar premios ni castigos,
no usar palabras que pudieran herir la sensibilidad del niño, no aburrir a los
niños, sino intentar hacerlos felices, para ello creó escuelas para los maestros.
Entre otros principios, se les inculcó la importancia del orden y la limpieza, así
como a no pelearse y tratarse con amabilidad. Aboga por la danza, el canto, los
juegos infantiles, y los cuentos adaptados a su nivel de comprensión.
Respecto a los contenidos, no se planteaban contenidos como tal, sino que
ocasionalmente se enseñaban los números, pero siempre a través de juegos o
actividades dinámicas en contacto con la naturaleza.
Por otro lado, se le concedía a la educación física una gran importancia en el
ámbito escolar.
Los elementos curriculares no estaban integrados dentro de las escuelas. No
existía un guión de como se iban a realizar las clases; simplemente todo surgía
de manera espontánea, daban lo que les apetecían, de forma natural. Los
autores no podían demostrar los planteamientos educativos que establecían sino
que se dejaban llevar por la intuición de los mismos.
Como conclusión, Owen opina que la educación es el único medio para lograr
el bienestar social, acabar con las desigualdades sociales y la explotación
infantil.