1. LA EDUCACIÓN CRISTIANA
Este modelo educativo incorpora nuevos elementos culturales; lo relevante
de esta nueva pedagogía es la importancia que toma la figura de Cristo
como modelo de la vida humana.
A este proceso histórico de la formación y educación cristiana se le
denomina como educación cristo céntrica; este término expresa un tipo de
educación conforme a la vida de Cristo; es decir, una educación que hace
de la figura de Jesús la esencia principal de la existencia, esto se debe a
que gracias a la imitación del paradigma de Cristo, la vida del hombre se
acerca la perfección divina.
Loyola Zavaleta Rosa Abigail
Maestría en Educación
2. Bajo el nuevo objetivo ideológico-religioso, la escuela cristiana fue
dogmática y vocacional (formación de sacerdotes que difundieran
en Evangelio), sin embargo, la Iglesia también, se convierte en el
centro de la cultura de su época, además de propagar la enseñanza
secular.
Los fines religiosos cristianos ocupaban especial lugar en la vida y
la educación; por ello, el ideal educativo del cristianismo es un
renacer a un mundo nuevo del espíritu.
3. El cristianismo es una religión fundada por Jesús de Nazaret o Cristo; en un
sentido extenso, se considera como un conjunto de manifestaciones histórico-religiosas
que derivan de la doctrina y vida de Cristo.
Esta religión es herencia de los judíos mediante sus tres dogmas básicos:
primero, un solo Dios creador y rector del mundo; segundo, la idea de un
Mesías enviado para liberar y redimir al pueblo de Israel, y tercero; concepto
de santidad en conjunto con la doctrina de la Trinidad cristiana.
4. El cristianismo se propago a la muerte de Jesús, rápidamente se difunde en el
seno de pequeñas comunidades, las más importantes fueron Galilea y Judea.
De casa en casa iban los heraldos del evangelio predicando la fe cristiana; su
único recurso era su entusiasmo desbordante para lograr que otros
escucharan su doctrina; así como de la vida del Mesías.
5. La educación y pensamiento cristiano tiene un amplio desarrollo cronológico
e histórico; su evolución paso no sólo por diferentes momentos, si no también
por actuaciones diferentes y variadas, ejemplo de ello son las aportaciones
de tres religiosos que en su momento particular, aportan al cristianismo, pero
también, a la educación de esta época.
6. Autores Postulado Educativo
San Pablo La instrucción de San Pablo exhortaba a los padres a cuidar del cuerpo y del alma de sus hijos; los
invita al estudio de un oficio manual, pero principalmente, difunde la importancia de una
enseñanza de las verdades cristianas como medios para el supremo designio de la existencia.
El cristianismo es un renacer del hombre que muere para la vida de la carne y revive en el espíritu,
es decir, la justicia y el amor. Al respecto, San Pablo en sus epístolas explica, desde su visión, la
alternativa entre la vida según la carne y la vida según el espíritu, entre el antiguo hombre, que el
hombre corpóreo, y el hombre nuevo y espiritual.
San Agustín San Agustín logra que el cristianismo se vea como un medio de disciplina, al tiempo que la
pedagogía, como un proceso de contemplación.
El punto de partida de su pedagogía es la situación conflictiva e inquietante en que se encontraba el
hombre. Se consideraba al hombre como voluntad, por ello debía decidir entre varios propósitos, en
ocasiones contradictorios y antagónicos.
Respecto al objeto de la enseñanza explica que “las palabras imprescindibles en el acto del
aprendizaje, sólo son signos de los objetos mismos. Qué estos se adquieren por contemplación
inmediata de la verdad, cuyo más elevado fin es el mundo de las ideas divinas. Por ello, la educación
liberal debe culminar en la filosofía y la teología” (Larroyo, 1950).
Causas del fracaso pedagógico
1. poca capacidad del maestro,
2. reiteración monótona del conocimiento,
3. la reducida inteligencia del educando,
4. la falta de atención del alumno durante el momento de la enseñanza.
Con esto, deja en claro San Agustín el enfoque de la etapa de la patrística cuando se habla de una
perspectiva científica.
7. Autores Postulado Educativo
San Anselmo Escolástica es un método de trabajo intelectual: todo pensamiento debía someterse al principio
de autoridad, y la enseñanza se podía limitar en principio a la repetición de los textos antiguos, y
sobre todo de la Biblia, (principal fuente de conocimiento).
Incentivó la especulación y el razonamiento, pues suponía someterse a un rígido armazón lógico
y una estructura esquemática del discurso que debía exponerse a refutaciones y preparar
defensas.
Ideológicamente la escolástica evolucionó en tres fases, a partir de la inicial identificación entre
razón y fe, ya que para los religiosos el mismo Dios es la fuente de ambos tipos de conocimiento
y la verdad es uno de sus principales atributos, de forma que Dios no podía contradecirse en
estos dos caminos a la verdad y, en última instancia, si había algún conflicto, la fe debía
prevalecer siempre sobre la razón, así como la teología sobre la filosofía.
De ahí se pasó a una segunda fase en que existía la conciencia de que la razón y la fe tenían sólo
una zona en común.
Santo Tomás
de Aquino
Para Aquino, son dos los factores esenciales del proceso educativo: principium scientiae y vis
collativa.
La primera se refiere a que el saber tiene determinada estructura susceptible de asimilarse y, la
segunda, que el hombre posee la capacidad para asimilar dicha estructura.
En su magna obra Summa teológica aceptó el empirismo aristotélico y su teoría hilemórfica y la
distinción entre dos clases de intelectos.1 De la filosofía árabe, Avicena tomó la distinción (ajena
a los griegos) entre ser de esencia y el ser. Dios se hace comprensible únicamente a través de
una doble analogía.2
Elaboró así una fusión platónico-aristotélica, el tomismo, que con sus argumentos cosmológicos
para demostrar la existencia de Dios: las cinco vías ha sido la base fundamental de la filosofía
cristiana durante muchos siglos. La demarcación entre filosofía y creencia religiosa llevada a
cabo por Tomás de Aquino iniciará el proceso de independencia de la razón a partir del siglo
siguiente y representará el fin de la filosofía medieval y el comienzo de la filosofía moderna.
8. Autores Postulado Filosófico
San Pablo La instrucción de San Pablo exhortaba a los padres a cuidar del cuerpo y del alma de sus hijos; los
invita al estudio de un oficio manual, pero principalmente, difunde la importancia de una
enseñanza de las verdades cristianas como medios para el supremo designio de la existencia.
El cristianismo es un renacer del hombre que muere para la vida de la carne y revive en el espíritu,
es decir, la justicia y el amor. Al respecto, San Pablo en sus epístolas explica, desde su visión, la
alternativa entre la vida según la carne y la vida según el espíritu, entre el antiguo hombre, que el
hombre corpóreo, y el hombre nuevo y espiritual.
Santo
Tomas de
Aquino
Santo Tomás de Aquino advierte que Dios es el verdadero maestro que enseña dentro del alma,
subraya la necesidad de una ayuda exterior. “Dios nos infunde en el entendimiento los principios
fundamentales; pero las aplicaciones de estos principios, las deducciones que de ellos se derivan,
son obra humana y de la experiencia.
Organizó el conocimiento de su tiempo y lo puso al servicio de su fe. En su esfuerzo para reconciliar
fe con intelecto, creó una síntesis filosófica de las obras y enseñanzas de Aristóteles y otros sabios
clásicos: de san Agustín y otros Padres de la Iglesia, de Averroes, Avicena, y otros eruditos
islámicos, de pensadores judíos como Maimónides y Solomon ben Yehuda ibn Gabirol, y de sus
predecesores en la tradición escolástica. Santo Tomás consiguió integrar en un sistema ordenado el
pensamiento de estos autores con las enseñanzas de la Biblia y la doctrina católica.
El éxito de santo Tomás fue inmenso; su obra marca una de las escasas grandes culminaciones en
la historia de la filosofía. Después de él, los filósofos occidentales sólo podían elegir entre seguirle
con humildad o separarse radicalmente de su magisterio.
San Agustín En 385 Agustín se convirtió al cristianismo.11 Fue en Milán donde se produjo la última etapa antes
de su conversión: empezó a asistir como catecúmeno a las celebraciones litúrgicas del obispo
Ambrosio, quedando admirado de sus prédicas y su corazón. Entonces decidió romper
definitivamente con el maniqueísmo.
San Agustín, a los diecinueve años, se pasó al racionalismo y rechazó la fe en nombre de la razón.
Sin embargo, poco a poco fue descubriendo que razón y fe no están necesariamente en oposición,
sino que su relación es de complementariedad.17 Según él la fe es un modo de pensar asintiendo, y
si no existiese el pensamiento, no existiría la fe. Por eso la inteligencia es la recompensa de la fe. La
fe y la razón son dos campos que necesitan ser equilibrados y complementados.