El documento habla sobre la celebración del Día de la Paz en la Iglesia Católica. El Papa Francisco ha elegido como tema para este año "La no violencia: estilo de una política para la paz". El documento también menciona que en este día primero del año la Iglesia se enfoca en la Virgen María y su maternidad divina.
3. Todos se desean la felicidad. Los
cristianos, hijos de Dios, con mayor razón
nos deseamos la verdadera felicidad que
es el estar en unión con Dios y en paz
entre nosotros.
4. La primera lectura
de la misa nos
habla de la
bendición de Dios,
que sinceramente
os deseo:
6. Si Dios nos bendice, será cierta la felicidad.
La palabra de
Dios es como un
beso, amor
creativo: Dice y
acontece. Dijo
“vive” y el
hombre
comenzó a ser.
Dice “Paz” y la
alegría nadie nos
la puede quitar.
7. El problema está en que Dios quiere nuestra
colaboración. Él bendice, pero quiere que nosotros nos
dediquemos a bendecir.
Él nos da la
paz, pero
quiere en
nosotros
personas
pacíficas,
constructo-
res de paz.
8. Bendecir a los demás es bien-decir: hablar bien de
los otros y hablar cosas buenas con los otros.
9. Aprendamos a bendecir. Comencemos con
cosas pequeñas: Cuando felicitemos. que sea
de verdad, que lo hagamos de corazón. Que si
deseamos el bien a una persona, lo hagamos
real el recuerdo en la oración ante Quien puede
dar el gran Bien.
10. Y que nos convirtamos en una bendición viva, de
modo que nuestra presencia sea ya una bendición.
Por eso
en este
día 1º del
año
pedimos
de
manera
especial
por la
paz.
16. Fue iniciada por el
Papa Pablo VI y cada
año el Papa manda
un mensaje a las
Iglesias particulares
y a las cancillerías
del todo el mundo
para destacar el
valor "esencial" de
la paz y la necesidad
de trabajar
incansablemente
para lograrla.
Desde hace 50 años, en este día primero del año,
se celebra en la Iglesia la Jornada Mundial de la
Paz.
17. Cada año hay un tema especial. Para este año de 2017
el Papa Francisco ha elegido: “»La No violencia: estilo
de una política para la paz».
18. Esta paz
la
deseamos
y
pedimos
hoy.
Viene a decir el papa que la fraternidad tiene necesidad
de ser descubierta, amada, experimentada, anunciada y
testimoniada. Pero sólo el amor dado por Dios nos
permite acoger y vivir plenamente la fraternidad. Con
ella tendremos la paz.
19. La violencia y la paz
están en el origen de
dos maneras opuestas
de construir la
sociedad.
La proliferación de
brotes de violencia da
origen a gravísimas y
negativas
consecuencias
sociales. El Santo
Padre refleja esta
situación con la
expresión de la “tercera
guerra mundial por
partes”.
20. La paz tiene consecuencias sociales positivas y permite
realizar un verdadero progreso. Por lo tanto, debemos
movernos negociando vías de paz, incluso ahí donde
las dichas vías parecen ambiguas e impracticables. De
esta manera, la no-violencia podrá adquirir un
significado más amplio y nuevo: no sólo como rechazo
moral de la violencia, sino como enfoque político
realístico, abierto a la esperanza.
21. Si se salvaguardan los
derechos de cada
persona y la igual
dignidad de cada uno
sin discriminación ni
distinción, la no-
violencia, entendida
como método político,
puede constituir una vía
realista y llena de
esperanza para superar
los conflictos armados.
En esta perspectiva, es
importante que siempre
se reconozca la fuerza
del derecho, en vez, del
derecho de la fuerza.
22. Con este Mensaje, el Papa Francisco desea indicar un
camino de esperanza conforme a las presentes
circunstancias históricas. Dentro de esta perspectiva
encontramos el respeto por la historia y la identidad de
todos los Pueblos, y la idea de la superioridad moral de
una parte sobre la otra sería derrotada. Al mismo tiempo,
sin embargo, esto no significa que una Nación pueda
permanecer indiferente hacia las tragedias de otra.
En cambio,
significa
reconocer
el primado
de la
diplomacia
sobre el
fragor de
las armas.
23. El comercio mundial
de las armas, dice el
papa, es de tal
magnitud que en
general es
subestimado. El
tráfico ilícito de las
armas con frecuencia
sostiene la mayor
parte de los conflictos
en el mundo. La no-
violencia como una
táctica política puede
hacer mucho para
combatir este flagelo.
24. «Que la no violencia se trasforme, desde el nivel local y
cotidiano hasta el orden mundial, en el estilo característico
de nuestras decisiones, de nuestras relaciones, de nuestras
acciones y de la política en todas sus formas».
«No nos cansemos
nunca de repetirlo:
Nunca se puede usar
el nombre de Dios
para justificar la
violencia. Sólo la paz
es santa. Sólo la paz
es santa, no la
guerra».
25. Jesús, como los buenos israelitas, saludaba
deseando la paz: “SHALOM”. Significaba unidad
total, la armonía querida por Dios. Este es el deseo
de Jesús al comenzar el año.
30. En este día,
primero del
año, la Iglesia
se fija
especialmente
en la madre de
ese Dios que
se hace
hombre.
31. Dios podía haber
escogido un modo
grandioso y
espectacular, pero
escoge el modo
sencillo y normal
de nacer, «de una
mujer», como nos
dice hoy san
Pablo en la 2ª
lectura.
32. Dios quiso ser verdadero hombre, nacido de mujer y
enraizado en un pueblo concreto, Israel. Un acto que
ellos consideraban como la entrada a pertenecer al
pueblo, era la circuncisión, a los ocho días de nacer.
Hoy nos lo
dice en el
evangelio.
Lucas 2, 16-21
33. En aquel tiempo los pastores fueron corriendo y
encontraron a María y a José y al niño acostado
en el pesebre. Al verlo, les contaron lo que les
habían dicho de aquel niño. Todos los que lo oían
se admiraban de lo que decían los pastores. Y
María conservaba todas estas cosas,
meditándolas en su corazón. Los pastores se
volvieron dando gloria y alabanza a Dios por lo
que habían visto y oído; todo como les habían
dicho.
Al cumplirse los ocho días tocaba circuncidar al
niño, y le pusieron por nombre Jesús,
como lo había llamado el ángel antes de su
concepción.
34. El evangelio de hoy nos narra el hecho de que,
al llegar los pastores a Belén, encontraron al
Niño que estaba con su madre.
Los pastores,
en cierto
sentido,
evangelizan a
María, contando
lo que les han
dicho los
ángeles sobre
el misterio de
ese Niño.
35. Dice el evangelio:
“María conservaba
todas estas cosas,
meditándolas en
su corazón”. Ella,
la verdadera
contemplativa,
meditaba y
guardaba en su
corazón las
vivencias de
Jesús.
36. Continúa el evangelio narrando lo que hizo la
Sagrada familia a los ocho días de Navidad:
37. Era en la
octava
como hoy.
Realizaron
una
ceremonia
que era
muy
importante
en aquella
cultura.
38. Era como la entrada oficial para pertenecer
al pueblo de Dios y a sus leyes.
39. Tenía mucha
importancia el
nombre entre
los israelitas.
Por eso el ángel
lo anunció de
parte de Dios. Y
no sólo a María
sino también a
José
40. Y nos podremos preguntar: Cuál será la razón
por la que quiere que le llamemos «Jesús»?
46. Jesús significa
“Salvador”, porque
por medio de Él nos
ha llegado la
salvación de Dios. Se
lo dijo el ángel a san
José: Se llamará
Jesús, «porque
salvará a su pueblo
de sus pecados».
49. Aquel niño es verdadero hombre, pero es también
verdadero Dios, dos naturalezas en una sola persona.
Por eso a la madre, que lo es de esa persona, en
verdad la llamamos “Madre de Dios”.
50. Ya sabemos que
Dios existe desde
siempre y nadie le
ha hecho. Pero por
amor nuestro ha
tomado nuestra
naturaleza de una
virgen, la llena de
gracia, que desde
ese momento es
“Madre de Dios”.
51. No es que Dios
vino a habitar en
una persona
humana nacida
de María. En ese
caso Dios no
hubiera muerto
por nosotros ni
nos hubiera
redimido.
52. La 2ª persona
de la Santísima
Trinidad se
unió a la
naturaleza
humana
formando una
sola persona. Y
de esa persona
María es la
Madre.
53. Desde los padres
de la Iglesia más
antiguos se
habla de que
Dios vino al
mundo por
medio de su
madre María.
Pero había
enemigos.
54. Por eso en el año
431 se reunió un
concilio de
obispos en Éfeso
y proclamó como
dogma de fe la
maternidad divina
de María.