la ira, localizacion de la ira en el cerebro, Influencias del aprendizaje. Modificaciones y tolerancia. Trastornos comunes. Tratamiento a estas reacciones
2. La ira es claramente uno de los sentimientos más
complejos del ser humano, aunque pueda ser
relacionado con instintos casi animales. Siendo
esto verdad, la ira puede convertirse en un
verdadero problema si no es propiamente
canalizada o neutralizada, generando en el
individuo diferentes tipos de manifestaciones.
Estas manifestaciones pueden ser físicas y
pasajeras (como ruborización, acaloramiento,
presión alta, palpitaciones hasta violencia),
pero también pueden dejar un rastro psíquico
a través de la angustia, la ansiedad, la
insatisfacción, el enojo y un constante estado
de ánimo negativo.
3. Se le ha considerado como una emoción moral: se
produce ante situaciones de ruptura de compromiso,
promesas, expectativas, reglas de conductas y todo lo
relacionado con la libertad personal.
Es un sentimiento displancentero que generan un
impulso apremiante por eliminar o dañar al agente
causante
Posee un importante componente motivacional. Es junto
con el miedo las dos emociones las intensas y
pasionales, y potencialmente la mas peligrosa ya que su
propósito funcional es el de destruir las barreras del
entorno. En situaciones extremas puede llegar a
generar reacciones de odio y violencia tanto verbal como
física.
4. El sistema límbico es el
responsable de dirigir nuestras
emociones y sensaciones mas
primitivas. Aquellas
relacionadas con la
supervivencia, como por
ejemplo el miedo y la ira y con
las sensaciones del ser
humano en torno a nuestro
comportamiento sexual. De
hecho, muchos científicos han
llegado a llamarlo cerebro
reptil puesto que se encarga
5. Cuando las emociones entorpecen la concentración lo
que ocurre es que se paraliza la capacidad mental
cognitiva que los científicos llaman memoria activa , la
capacidad de retener toda la información que atañe a la
tarea que estamos realizando. La memoria activa es
una función ejecutiva por excelencia en la vida mental,
que hace posible todo los otros esfuerzos intelectuales,
desde pronunciar una frase hasta de despeñar una
compleja proposición lógica.
6. El objetivo del manejo de la ira es reducir los sentimientos y el
despertar fisiológico que provoca. A veces podemos deshacernos de
las cosas o las personas que sufren, ni se pueden cambiar, pero
podemos aprender a controlar nuestras emociones. La palabra
tolerancia es de mucha importancia en esta área, puesto que aunque
en ocasiones el entrono o los personas que nos rodean desatan el
volcán de la ira. También es cierto que hay momentos en que la ira
es injustificada y un reflejo de problemas o malestares subyacentes
del sujeto, que producen explosiones al menor descuido afectando a
veces a personas que no tienen nada que ver con la memoria
original.
7. El ataque de ira, o ataque explosivo intermitente, se caracteriza por
episodios coléricos y violentos, en los que las personas no pueden
controlar estos impulsos de ferocidad y perdida de control mental y
emocional, comprometiendo la seguridad de otros, insultándolos o
lesionando, o dañando todo a su alrededor sin medir las
consecuencias . El control de la ira comienza al tomar conciencia de
que se tiene un problema y se busca ayuda profesional.
8. El tratamiento puede conllevar una mezcla de terapia y
farmacológico. La terapia puede ayudar a reconocer los
impulsos para facilitar la adquisición de un mayor nivel de
conciencia y control de los accesos de ira, así como a tratar el
estrés emocional que acompañan estos episodios . Existen
diversos tratamientos farmacológicos indicados para este tipo
de paciente. Los antidepresivos tricíclicos y los inhibidores
selectivos de la repcatacion de serotonina como la fluoxetina, la
fluoxamina sertralina parecen aliviar algunos de los síntomas
psicopatológicos .