El documento proporciona recomendaciones sobre el manejo de la anticoagulación en pacientes que requieren una endoscopia digestiva. Señala que para procedimientos de bajo riesgo de sangrado, como endoscopias diagnósticas, no es necesario suspender la anticoagulación, mientras que para procedimientos de alto riesgo, como polipectomías, se debe suspender la anticoagulación y realizar un puente con heparina de bajo peso molecular hasta alcanzar un INR menor a 1,5.