1. NUTRICION Y SALUD EN LA ADOLESCENCIA
Evelyn Eisenstein
Elsa Montserrat Rodríguez Barragán
Los seres vivos, como el ser humano, necesitan energía para poder sobrevivir.
Los organismos se alimentan para obtener combustible y la energía que les
permita desarrollar sus funciones vitales. Es por esta razón por la que se
entiende que la alimentación es la principal fuente de energía en los seres vivos.
La energía que los seres vivos necesitan se obtiene de los macronutrientes.
Se define la caloría como la cantidad de energía calorífica necesaria para elevar
un grado centígrado la temperatura de un gramo de agua pura, desde 14,5 °C a
15,5 °C, a una presión estándar de una atmósfera. La kilocaloría (símbolo kcal)
es igual a 1000 cal. Una caloría es equivalente a 4,1868 J.
Las calorías se emplean como un índice que controla la ingesta de ciertos
alimentos y poder así elaborar dietas "bajas en calorías" (suelen suponer una
reducción de un 30%[2] ) que permitan la pérdida de peso corporal en aquellos
casos que se haya diagnosticado sobrepeso. En cualquier caso, las dietas por
debajo de las 1200 kcal están consideradas como peligrosas, ya que son
deficientes en algunos nutrientes importantes.
Sin la ingesta calórica adecuada, la proteína se utilizara en la glucogénesis y no
estará libre para la síntesis en los tejidos. Los adolescentes en pleno periodo de
estirón puberal, el metabolismo proteico es muy sensible a las restricciones
calóricas.
Los alimentos naturales son la mejor forma de ingerir vitaminas según la autora,
ya que para ella las formulas o “drogas milagrosas” contienen medicamentos
hormonales o psicoadictivos que pueden llegar a perjudicar la duración y la
acumulación del proceso de crecimiento.
La valoración nutricional es aquella que permite determinar el estado de nutrición
de un individuo, valorar las necesidades o requerimientos nutricionales y
pronosticar los posibles riesgos de salud que pueda presentar en relación con su
estado nutricional.
La adolescencia es una edad con unos requerimientos dietéticos y nutricionales
concretos e importantes, en la que no pocas veces comienzan a presentarse
2. desordenes alimenticios, a veces imbuidos por modas y corrientes sociales,
otras por excesivas exigencias internas y externas, y a menudo por una mezcla
de ambas.
La familia influye en la forma de interactuar con los adolescentes en donde
deben orientar a sus hijos a llevar una buena dieta balanceada. Los medios de
comunicación son las principales difusores de alimentos (la mayoría chatarra) es
aquí que bajo la influencia de los comerciales el adolescente observa y piensa
que si come de esos alimentos va a pasar lo mismo que lo que ocurre en ellos.
Los hombres y las mujeres no crecemos igual. La proporción y distribución de la
composición corporal. En los varones enflaquecen más y, paradójicamente,
aumenta su número de células adiposas mientras disminuye el aporte porcentual
de la adiposidad al total de la masa corporal.
Las mujeres tienen un aumento progresivo de la acumulación de grasas y un
incremento y un porcentaje de adiposidad en relación con el total de la masa
corporal.
La realización de una actividad física o algún deporte influye la forma en cómo
se alimente unas actividades necesitan más masa corporal para realizar dicho
deporte mientras que en otras se requiere menos un ejemplo de ello es el
deporte box o boxeo donde existen diferentes categorías en donde el peso
muscular incluye mucho.