El documento describe la evolución histórica de las relaciones entre padres e hijos a lo largo de 6 períodos. Inicialmente, durante el infanticidio y el abandono los niños no tenían derecho a la vida y su muerte indirecta era común. Más tarde, en la Edad Media hubo ambivalencia donde los niños participaban en la vida de los adultos en el trabajo y ocio. Posteriormente se produjo una intrusión en el siglo XVIII y una preocupación por la socialización de los niños en el siglo XIX. Finalmente, a mediados del sig

1. HISTORIA DE LA INFANCIA
Lloyd de Mause
Por:
Sandra
Danelly
Paloma

2. Estudio de la
infancia
Relaciones
Paterno-filiales

3.  Relación Proyectiva
Niño utilizado como recipiente
donde se proyectan y descargan
contenidos inconscientes del adulto

4. Reacción de inversión

5. Niño
(responsable)
Adulto
(infantil)
El niño satisface
las necesidades
del adulto
Lo protege
mientras obtiene
un provecho
Uso del chantaje
afectivo y fuerza físico

6. Reacción empática
El adulto es capaz de
identificar y comprender
sus necesidades
Verlo como la persona
que es hoy y no como el
adulto que será
mañana

7. 6 PERIODOS DONDE SE VAN MODIFICANDO
LAS RELACIONES PATERNO-FILIALES
 Infanticidio
 Abandono
 Ambivalencia
 Intrusión
 Socialización
 Ayuda

8.  Infanticidio
Derecho de vida
determinado por
padres.
 Abandono
Niño – Ser con alma.
Muerte indirecta.

9. Ambivalencia (siglos XIV-XVII)
Edad media
El niño participa en la vida del adulto tanto en el ocio como en el trabajo
Los adultos preocupados por amoldar a los niños (Educación)
Entra en la vida afectiva de los padres

10. Intrusión (siglo XVIII)

11. Socialización
(siglo XIX – mediados siglo XX)

12. Formar y cuidar
al niño
Educación
(preocupación
pedagógica)
Socialización
del niñoPadres de
familia
“Todavía no”

13. Ayuda
(Mediados del siglo XX)

14. Empatía Niño
Desarrollar sus
características
propias
Comprender
sus
necesidades
Potencializar sus
habilidades

15. Padres
Pacientes Dedicados
Ambiente
agradable y
cuidador
Las teorías no se anulan
sino que conviven
La sociedad aún no es
empática