El documento discute la interpretación incorrecta de la dualidad onda-corpúsculo de la luz en el experimento de Young. Argumenta que si se consideran las proporciones cósmicas a escala cuántica, el espacio libre entre partículas es tan grande que no hay razón para que las partículas de luz no se puedan mover libremente sin interferencia. También señala que las interferencias observadas podrían explicarse por colisiones de partículas de luz al pasar por las rendijas, en lugar de su naturaleza ond

1. DE LA INCORRECTA INTERPRETACIÓN DEL EXPERIMENTO DE YOUNG
(dualidad de la onda-corpúsculo de la luz)
Si aceptamos la teoría de que el diámetro del electrón = 10-20 m = 10-17 mm, esto quiere decir que para un 1 mm de
ancho de abertura de las rendijas del Experimento de Young, dicho 1 mm sería equivalente a un número de 1017
(100.000.000.000.000.000) electrones colocados en fila uno detrás de otro según la figura siguiente:
Si estos valores los traducimos a una escala en donde el diámetro de 1 electrón = 1 m, esto supondría que 1 mm de
distancia real sería equivalente a 1017 m = 100.000.000.000.000.000 m según dicha escala, y si esta distancia la
convertimos en kilómetros, esta sería equivalente a 1014 km = 100.000.000.000.000 km. Esto quiere decir que una
abertura de 1 mm de la rendija de Young respecto al tamaño de 1 electrón de 1 m de diámetro (según escala),
equivaldría a una abertura de 100.000.000.000.000 km (1014), lo cual nos da un valor aproximado equivalente a 666
veces la distancia entre la Tierra y el Sol (149.000.000 km)
Si a su vez consideramos que el diámetro del Sistema Solar es igual a doce mil millones de kilómetros
(12.000.000.000 km), observaríamos que la abertura de 1 mm sería equivalente a 8,333 veces el diámetro del
sistema solar respecto a dicha escala (1 electrón de 1 m de diámetro). Si además aceptamos la teoría de que un
fotón es más pequeño que un electrón, entonces con tanto espacio libre al cual podríamos catalogar de infinito, no
existe ninguna razón que pueda evitar que la masa de una partícula de luz se pueda desplazar libremente sin
interferencia de ningún tipo. Este hecho ya nos obliga a pensar que la teoría de la dualidad onda-corpúsculo de
la luz es una incorrecta interpretación de proporciones cósmicas a escala cuántica. Por otro lado, si consideramos el
clásico ejemplo de la vela como fuente de luz en el experimento de la doble rendija de Young de la Fig.1, y que
dicha fuente de luz transmite haces de luz en todas las direcciones, entonces debemos admitir que por interferencias
de los haces de luz a su paso por dichas rendijas, también se crearía el mismo patrón de interferencias debido a los
choques de las fotones o partículas de luz pertenecientes a dichos haces de luz al paso por dichas rendijas, tal como
aparece en la agrupación de electrones de la Fig.2 según el experimento liderado por el Dr. Akira Tonomura (1989).
De nuevo se confunde una fuente o foco de luz con un haz de luz o haz de partículas de luz.
Considerando el Principio de la Navaja de Ockham: "en igualdad de condiciones, la explicación más sencilla
suele ser la más probable", estamos obligados a admitir que la teoría de la naturaleza ondulatoria de la luz
quedaría descartada y con ella la teoría de la elasticidad del espacio-tiempo. No tiene ningún sentido que los
átomos tenga una trayectoria lineal y que una de sus partículas atómicas, electrón, tenga una trayectoria ondulatoria
una vez se separa del átomo que lo contiene, y menos aún cuando se desplaza por el vacío sin interferencia alguna.
1017
Fig.2
Experimento de Young
Acumulación de
electrones con el paso
del tiempo.
Fig.1

2. Frecuencia de un haz de luz
e = espacio entre electrones
t = tiempo que tarda un electrón en recorrer el espacio e.
Haz de partículas de luz
El experimento de Young liderado por el Dr. Akira Tonomura (1989) fue realizado con electrones.
Miguel Cabral Martín
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