Los agentes biológicos son contaminantes constituidos por seres vivos microscópicos que pueden causar enfermedades como fiebres, gripes y hepatitis. Se transmiten a través del agua, el aire, animales y superficies, y afectan principalmente a trabajadores de la salud, laboratorios y alimentación. Para protegerse se recomiendan medidas como lavado de manos, uso de guantes, batas, mascarillas y gafas, así como contenedores especiales.