El autoclave permite esterilizar material médico y de laboratorio mediante el uso de vapor de agua a alta presión y temperatura, lo que inactiva bacterias y virus. Funciona calentando agua limpia y purificada para generar vapor libre de impurezas que se usa en el proceso de esterilización, el cual incluye fases de purga de aire, calentamiento, esterilización, secado y finalización.