Este documento presenta el caso clínico de una mujer de 31 años embarazada de 42.3 semanas que fue referida por embarazo prolongado. Se realizó una inducción del parto con prostaglandinas que no tuvo éxito, por lo que finalmente se interrumpió la gestación mediante cesárea debido a un parto no progresivo. La paciente sufrió una hemorragia posparto grave que requirió transfusiones. El recién nacido fue un varón vivo de 3500 gramos con buen estado de salud.