El documento discute cómo el pensamiento estratégico contribuye a la sostenibilidad de las empresas durante la pandemia. Explica que el pensamiento estratégico implica planificar el futuro con un objetivo específico y lograrlo de la manera más eficiente posible. Las empresas con personal altamente capacitado en pensamiento estratégico se han adaptado mejor a la nueva normalidad al desarrollar ideas y planes innovadores que les han permitido acceder a nuevos mercados, aumentar la confianza de los clientes e incrementar las ventas a través de mejoras en ventas