Un esguince de tobillo implica una lesión parcial de uno o más ligamentos del tobillo, causando dolor, hinchazón y limitación funcional. Los ligamentos más comúnmente afectados son el talofibular anterior y el calcaneofibular. El tratamiento incluye descanso, hielo, compresión y ejercicios de fortalecimiento, con una recuperación típica de 2 a 6 semanas dependiendo de la gravedad de la lesión.