La membrana celular mide entre 7.5 y 10 nm de grosor, está compuesta principalmente de lípidos, proteínas, colesterol y azúcares, y no es visible bajo un microscopio óptico. La membrana protege la célula, mantiene su forma, regula el transporte de sustancias hacia adentro y afuera, y permite la comunicación y movimiento celular.