1. La adquisición del lenguaje sigue etapas bien diferenciadas y es sensible a la complejidad estructural del lenguaje. 2. Se deja abierta la posibilidad de que los procesos intelectivos desempeñen un papel en la capacidad de reflexionar sobre el lenguaje. 3. La adquisición del lenguaje está determinada genéticamente en la especie humana.