Las fracturas expuestas son lesiones óseas donde los huesos fracturados están en contacto directo con el medio ambiente debido a una herida en la piel y partes blandas. Se clasifican según el tiempo transcurrido desde la lesión, la gravedad de la lesión de los tejidos blandos, y el lugar donde ocurrió. Su tratamiento incluye limpieza quirúrgica de la herida, fijación de la fractura, antibióticos y manejo de posibles complicaciones como infecciones.