Girls Who Code es una iniciativa estadounidense que busca aumentar la participación de mujeres en la programación a través de clubes y programas de verano que enseñan conceptos básicos de programación de manera divertida y práctica. El programa ha crecido exponencialmente desde 2012 y ahora cuenta con el apoyo de grandes empresas tecnológicas. Sin embargo, aún enfrenta desafíos como la falta de recursos y profesionales voluntarios.