El documento proporciona orientaciones metodológicas para las instituciones educativas. Recomienda desarrollar metodologías que se adapten a los diferentes ritmos y estilos de aprendizaje de los estudiantes, así como fomentar el trabajo en equipo. También enfatiza la importancia de procesos cognitivos como el análisis, el reconocimiento y la identificación para facilitar el aprendizaje de los estudiantes y desarrollar sus capacidades y responsabilidades.