La salud bucal es fundamental para la salud general y depende de factores como la higiene, dieta y educación. Es importante cepillarse correctamente los dientes, encías y lengua diariamente y después de comer, usar hilo dental y visitar al odontólogo cada seis meses. Una dieta balanceada rica en fibras, lácteos y frutos secos contribuye a la salud bucal, mientras que los azúcares, jugos ácidos y alimentos fritos deben consumirse con moderación.