Las electroválvulas distribuidoras tienen límites de potencia que dependen de la fuerza del solenoide y de las fuerzas opositoras como la fuerza dinámica del flujo. La fuerza dinámica depende del caudal, la presión, el tamaño y tipo de émbolo. Se usa un estrangulador insertable para proteger la válvula cuando el caudal supere los límites de potencia.