La atención temprana incluye intervenciones dirigidas a niños de 0-6 años, sus familias y entornos. Su objetivo es responder lo más pronto posible a las necesidades de desarrollo de los niños. Estas intervenciones deben ser planificadas por equipos interdisciplinarios y comprenden tres niveles: prevención primaria para promover el bienestar infantil, prevención secundaria para detectar problemas tempranamente en grupos de riesgo, y prevención terciaria para minimizar las consecuencias una vez diagnosticado un problema.