El buque Höegh Transporter cargó dos piezas grandes en el Puerto de Valencia que pesaban más de 65,000 kg y medían más de 2.5 metros de alto para su envío a Qatar; las piezas formaban parte de una desalinizadora y requerían un buque especial para su transporte debido a su tamaño, siendo cargadas con éxito en el puerto.