La reacción redox implica la transferencia de electrones entre reactivos, lo que causa un cambio en sus estados de oxidación. Para que ocurra una reacción redox, un elemento debe ceder electrones mientras que otro los acepta, siendo el primero el agente reductor y el segundo el agente oxidante. Tanto el NAD+ como el FAD pueden actuar como aceptores de electrones en sus formas oxidadas o como donantes de electrones en sus formas reducidas de NADH y FADH2.