La ira es una emoción causada por la indignación y el enojo cuando se sienten vulnerados los derechos de una persona. Se caracteriza por ser una emoción moral que surge ante situaciones donde se rompen compromisos, promesas o expectativas. Provoca un impulso por eliminar o dañar al causante y conlleva efectos fisiológicos como aumento de la frecuencia cardíaca y la presión arterial.