Watson rechazaba los métodos subjetivos como la introspección y aceptaba sólo los métodos objetivos experimentales para estudiar el aprendizaje y la memoria. Reconocía que los informes verbales podían usarse como datos científicos pero sólo para medir reacciones conductuales, no procesos mentales internos. Creía que el mejor enfoque para predecir el comportamiento se basaba en la observación controlada experimental.