Este documento presenta un ensayo sobre los salarios de los maestros y escuelas. Discute la realidad de que los salarios de los maestros son bajos y los limitan a la clase media, a pesar de ser tanto profesionistas como trabajadores. Propone incrementar los salarios mediante asociarlos con los resultados de pruebas estandarizadas, así como ofrecer mejores salarios en escuelas con desventajas. Concluye que los salarios solos no mejoran la calidad educativa, pero deben ser parte de las estrategias de política
1. Instituto Pedagógico de Posgrado de Sonora
Planeación presupuestaria de la educación
INSTITUTO PEDAGÓGICO DE POSGRADO DE SONORA
DOCTORADO EN ADMINISTRACIÓN EDUCATIVA.
Asignatura:
PLANEACION PRESUPUESTARIA DE LA EDUCACION
Dr. Gustavo Solano Rojas
Producto Cuatro
Ensayo
“Los maestros, sus salarios y escuelas”
Presentado por:
Wenceslao Verdugo Rojas
Hermosillo, Sonora, Julio 2009.
Wenceslao Verdugo Rojas, 1
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Planeación presupuestaria de la educación
Índice de contenido
PLANEACION PRESUPUESTARIA DE LA EDUCACION
Índice de contenido 2
Introducción 3
Realidad 4
Propuesta 5
Conclusiones 6
Bibliografía 6
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Introducción
Aún con el desarrollo y aplicación de las nuevas tecnologías la labor
docente sigue siendo fundamental para el sistema educativo, mucho más allá de
las necesidad de directivos, secretarías, intendentes, funcionarios y demás
participantes, es decir si no hay profesores y alumnos no hay escuela, aunque
estén ahí los directores y computadoras.
Al igual que se reconoce la necesidad de tener profesores se considera la
obligación de asignarles sueldos adecuados a sus funciones y que permitan una
vida digna con la cual educar al capital mas importante que tiene una sociedad: los
niños y jóvenes.
El sueldo de un profesor permite sobrevivir dignamente, pero finalmente
sobrevivir, difícilmente un profesor promedio puede movilizarse socialmente hacia
la siguiente clase social una vez que ascendió después de haber ingresado a las
filas del magisterio, lo que se puede explicar sin justificar con que a nivel
internacional ningún profesor se puede considerar que desarrolle actividades
productivas, por lo que no puede obtener mayores ganancias ya que solamente se
dedica a actividades de reproducción de conocimiento y no produce como si
estuviera en una empresa y no va a obtener dividendos o participaciones de su
productividad.
La anterior realidad pesa sobre nosotros como profesores y buscamos otras
formas de ascender socialmente, por lo que se ha propuesto “Abrir una nueva fase
del Programa de Carrera Magisterial acorde con las necesidades de actualización
docente y con los resultados de las evaluaciones educativas (Guevara, 2009), con
la idea de premiar al mejor desempeño docente y no tanto castigar al mal
desempeño sino solamente detener su crecimiento económico, por lo que el
sistema también detendrá su mejora en el sentido de la gran mayoría de docentes
actualmente no participa en el programa de carrera magisterial, lo que indica que
tampoco participarán en el nuevo programa y se guiarán por el conformismo del
regular salario base, de manera que solo unos serán maestros de calidad.
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Realidad
La afirmación de los profesores están bien o mal pagados es subjetiva, ya
que hace falta indicar en función o en comparación con quienes, con que
profesionistas o trabajadores, considerando las horas de trabajo en la escuela y
descontando los días de vacaciones, tomando en cuenta que es un trabajo tanto
operativo como intelectual, en fin, las comparaciones o criterios para determinar la
afirmación inicial son muchas, por lo que dependerá de la persona que la emite,
así fundamentalmente tendremos dos oportunidades de explicación:
a) que los profesores están muy bien pagados en comparación con los
trabajadores operativos.
b) que los profesores están muy mal pagados en comparación con los
profesionistas.
Lo anterior porque los profesores estamos en ambos campos, tanto somos
profesionistas como trabajadores, porque la licenciatura nos pone al nivel de
cualquier otro profesionista con la oportunidad de ganar como profesionales y el
sindicato nos coloca con los trabajadores de manera que esté en posibilidad de
protegernos como gremio y mantener las buenas prestaciones obtenidas y que tan
atractivo hacen nuestro empleo para los profesionistas externos.
Las desventajas de ser profesionista nos lleva a la posibilidad de ser
contratados en función con nuestros resultados de la misma forma que
pudiéramos ser despedidos sin mediar defensa por disposición de algún superior
independientemente de que sea justo o injusto.
La desventaja de ser trabajador es que nuestro sueldo será calculado en
función del salario mínimo, por lo tanto se mantendrá limitado y también eternizará
a los profesores en la clase media que es a donde pertenece la clase obrera.
Otra comparación se puede hacer mediante un indicador compuesto de
salario entre horas trabajadas al año, obteniendo que un profesor de secundaria
que trabaja siete horas diarias y suponiendo que se den efectivamente doscientos
días de clase se tendrá un total de mil cuatrocientas horas, mientras que otro
trabajador o profesionista ajeno al sistema educativo trabajará mil horas mas
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suponiendo que descanse los domingos, días feriados y una semana de
vacaciones.
El siguiente cuadro muestra una comparación de la relación de un sueldo
de ciento veinte mil pesos anuales entre horas trabajadas, donde se observa que
un profesor tiene un salario cincuenta por ciento mayor por hora que otros
trabajadores o profesionistas:
Horas Anual Sueldo
Diarias Días Horas Anual Relación
Profesor 7 200 1400 $120,000 $85.71
Otros 8 300 2400 $120,000 $50.00
Esta comparación desde luego que no refleja el esfuerzo que hace un
profesor al ser conductor de las enormes energías que poseen niños y jóvenes.
Propuesta
La propuesta es fundamentalmente incrementar el sueldo de docentes
mediante la asociación del mismo con los resultados de pruebas estandarizadas
como creando en el sistema educativo las mismas condiciones de competencia
que en la empresa privada.
Otra propuesta es ofrecer mejores sueldos en las escuelas con desventajas
contextuales o simplemente rotar a los profesores con las ventajas y desventajas
que esto implica.
En un nuevo sistema desarrollado paralelamente al actual se
experimentaría con los esquemas organizativos que más convenza a los
administradores, quienes deberán rendir cuentas de su eficiencia y eficacia
cubriendo así con la tendencia internacional de transparencia.
La contratación o despido hecha directamente en las escuelas tiene
también sus buenas y malas, provocaría que los profesores rindan buenas
cuentas o que realmente paguen las consecuencias, pero también dará lugar,
conociendo a los malos elementos del sistema, a una regresión en el tiempo y que
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directores o supervisores soliciten favores especiales para contratar o en su caso
condicionar los reportes para mantener el contrato.
Conclusiones
Tal como la evidencia lo presenta sabemos que el sueldo de los profesores
no determina una mejora en la calidad educativa por si solo, pero si forma parte
fundamental en el diseño de estrategias de política educativa.
Considero que una idea que puede funcionar además de otras es la
asociación de bonos tipo productividad que no descobijen a los profesores y
asegurarles un salario digno, pero que promueva la mejora continua a través de la
transparencia, es decir que las decisiones de a quienes corresponde pagar el
bono cada año deberá ser públicas con la oportunidad de que todos puedan
obtener los exámenes aplicados y comprobar las calificaciones.
Bibliografía
Andere, E. (2006) “México sigue en riesgo. El momumental reto de la educación”,
México, Ed. Planeta Mexicana.
Guevara, G. (2009) El qué y el cómo de la política educativa, México, Educación
2001, Num. 169, Junio 2009, pags. 7 – 11.
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