1. CAJA NACIONAL DE SALUD
HODE ONCOLOGICO
SERVICIO DE CIRUGIA ONCOLOGICA
2. CONDUCTO CISTICO
3 mm de diámetro y unos 2-
4 cm de largo
CONDUCTO BILIAR COMUN
conductos cístico y hepático común
y termina en la papila de Vater en l
a segunda parte del duodeno
3.
4.
5. Nódulo del conducto
cístico y nódulo del hiato
Segundo lugar a la
vasculatura hepática y el
lado posterior del
páncreas
Finalmente a los nódulos
aortocavos
6. El carcinoma de vesícula biliar es una enfermedad agresiva y de ominoso pronóstico
El cáncer de vesícula biliar (GBC) es la neoplasia maligna más prevalente del tracto biliar
y la sexta neoplasia maligna gastrointestinal más común en todo el mundo
Etiología: colelitiasis mayor de 3 cm, vesicula en porcelana, obesidad, unión ductal
anómalo de la pancreaticobiliar anómalo, colangitis esclerosante, etc.
Presentación incidental 80%, 20% presenta enfermedad sintonatica.
Localizacion 60% fondo, 30% cuerpo, 10% cuello
En el 98% surge en la mucosa (adenocarcinomas: adenoescamoso y escamoso)
7.
8.
9.
10. Tis/T1a Colecistectomia simple
T1b-T2 Colecistectomía extendida con linfadenectomía regional: Colecistectomía con resección
no anatómica en cuña de 2 cm de los segmentos 4b y 5 y linfadenectomía del ligamento
hepatoduodenal
T3 Colecistectomía extendida como para T1b-T2, pero GBC en el cuello de la vesícula biliar o
el conducto cístico puede requerir hepatectomía derecha extendida al segmento 4b y/o
al conducto biliar resección con hepaticoyeyunostomía para obtener márgenes claros. Es
más, dependiendo en órgano afectado: resección en cuña de duodeno o colon transverso.
Solo en pacientes con buen estado funcional.
T4 En cuanto a T3, cuidados paliativos si hay afectación de la vena porta principal o del
hígado adecuado. artería. Es poco probable que la mayoría de los pacientes en esta
categoría se beneficien de la resección, incluso si técnicamente viable. Solo en pacientes
con buen estado funcional.
11.
12. La vesícula biliar esta relacionada con los segmentos 4b y 5
Cara inferior del hígado
Duodeno
Angulo colonico derecho
13.
14. Drenaje linfático de la vesícula biliar.
Linfadenectomía N1: exéresis de los ganglios del pedículo
hepático (1, 2, 4,5, 6);
Linfadenectomía N2: exéresis de los ganglios
retropancreáticos, mesentéricos superiores y paraaórticos (3,
7).
1. Ganglio cístico;
2. Cadena portocoledociana externa;
3. Cadena pancreaticoduodenal posterior;
4. Cadena portocoledociana interna;
5. Cadena aórtico-celíaca;
6. Cadena hepática común;
7. Cadena lumboaórtica.
15. Linfadenectomía del pedículo hepático (N1).
Disección de los elementos del pedículo.
1. Vía biliar;
2. Arteria hepática;
3. Tronco celíaco;
4. Tronco de la vena porta.
17. Control del pedículo hepático mediante
pinzamiento vascular después de la abertura del
epiplón mayor.
El lazo peripedicular se deja en espera. El
pinzamiento se efectúa sólo en caso de
hemorragia.
18. Bisegmentectomía 4b - 5.
A. Incisión de la cápsula de Glisson en la cara superior del
hígado.
B. Incisión en la cara inferior.
19. Pedículos vasculares y biliares que deben
seccionarse.
1. Ramas derechas del receso de Rex;
2. Pedículo arterial del 4 anterior;
3. Vena hepática media;
4. Pedículo portal del 5;
5. Rama de origen de la vena hepática derecha.
20. Sección de las venas anteriores procedentes del
receso de Rex, previa hepatotomía 1cm a la derecha
del ligamento redondo, y de la cisura umbilical.
21. Inyección de carmín de índigo en una rama portal
anterior para delimitar el segmento 4 anterior que ha
sido desvascularizado.
24. Linfadenectomía portal.
Extirpación de ganglios retropancreáticos después de
despegamiento retroduodenopancreático.
1. Arteria hepática; 2. tronco de la vena porta; 3.
cabeza del páncreas; 4. vena cava inferior; 5.
estómago; 6. duodeno.
Notas del editor
La muerte por hemorragia representa un problema global importante, con más de 60,000 muertes por año en los Estados Unidos y aproximadamente 1.9 millones de muertes por año en todo el mundo, 1.5 millones de las cuales son resultado de traumas físicos. 5 Debido a que el trauma afecta a un número desproporcionado de personas jóvenes, estos 1,5 millones de muertes causan casi 75 millones de años de vida perdidos (Tabla 1). Además, aquellos que sobreviven al ataque hemorrágico inicial tienen resultados funcionales deficientes y aumentaron significativamente la mortalidad a largo plazo.