Estructura y elaboración de un presupuesto financiero
Volatilidad de la deuda publica
1. Volatilidad de la deuda pública
(Tratando de entender la situación de Sergio Fajardo Valderrama ante las imputaciones de la Fiscalía General de la Nación)
En este tiempo de exacerbación de la crisis económica. No tanto, a pesar de la incidencia de una
situación inédita como la pandemia Covid19, en lo circunstancial. Más que nada porque el modelo
capitalista siempre ha estado y estará signado por expresiones cíclicas que han conllevado y conllevan
desequilibrios. En veces hasta situaciones de profunda conmoción. Con afectaciones no solo en el
estricto marco de la economía. También en todo el espectro social y politico.
Introducción:
La deuda pública externa e interna es una realidad inmemorial, desde el momento histórico mismo
en que se constituyen los Estados. Y, fundamentalmente, desde la vigencia del capitalismo. Algo así
como una expresión inherente a la condición misma de este modo de producción y su desarrollo.
ESTRATEGIAS DE GESTIÓN DE LA DEUDA PÚBLICA.
Las estrategias de gestión de la deuda en que se recurre en exceso a deudas en moneda extranjera, o indizadas en moneda
extranjera0 y deuda a corto plazo (inclusive de tasa de interés flotante) son muy riesgosas. Por ejemplo, la deuda en moneda
extranjera puede parecer, ex ante, menos costosa que la deuda en moneda nacional del mismo plazo de vencimiento (que
puede entrañar un mayor riesgo de liquidez, así como primas de liquidez), pero puede resultar más costosa en los mercados
de capital inestables o en casos de depreciación de la moneda. Por otra parte, los responsables de la gestión de la deuda
deben tener en cuenta que el régimen cambiario elegido puede afectar los vínculos entre la gestión de la deuda y la política
monetaria. Por ejemplo, la deuda en moneda extranjera puede parecer menos costosa en un régimen de tipo de cambio fijo,
en que la inestabilidad cambiaria está sujeta a límites, pero puede resultar muy riesgosa si el régimen cambiario se vuelve
insostenible. Debería elaborarse un marco que permita a los responsables de la gestión de la deuda pública identificar y llegar
a una solución de compromiso entre el costo y el riesgo de la cartera de instrumentos. Habitualmente los encargados de la
gestión de la deuda pública manejan varios tipos de riesgos; un papel importante del órgano encargado de la gestión de la
deuda consiste en identificar esos riesgos, evaluar en lo posible su magnitud y elaborar la mejor estrategia viable para llegar
a una solución de compromiso entre costo y riesgo. Para cumplir esos cometidos deben tener acceso a diversas proyecciones
financieras y macroeconómicas. Para evaluar el riesgo, los responsables de la gestión de la deuda deberían efectuar
regularmente pruebas de tensión de la cartera de la deuda, basadas en las perturbaciones económicas y financieras a las que
el sector público –y en forma más general el país– pueda estar expuesto. A los efectos de realizar esas evaluaciones los
responsables de la gestión de la deuda deben tener en cuenta el riesgo de que el gobierno no logre renovar su deuda y se
vea obligado a incurrir en incumplimiento, lo que supone costos cuyos efectos no recaen tan sólo sobre elpresupuesto público.
También deben tener en cuenta la interrelación entre la situación financiera del sector público y la de los sectores financiero
y no financiero en épocas de tensiones, a fin de que las actividades de gestión de la deuda del sector público no exacerben
los riesgos que afectan al sector privado. En general, los modelos utilizados deben permitir a los responsables de la gestión
de la deuda pública efectuar los siguientes tipos de análisis de riesgos: • Elaborar proyecciones de los costos futuros del
servicio de la deuda…
• Elaborar proyecciones de los costos futuros del servicio de la deuda en un horizonte de mediano a largo plazo, tomando
como base supuestos referentes a factores que influyen sobre la capacidad de atención del servicio de la deuda; por
ejemplo los siguientes: nuevas necesidades de financiamiento; perfil de plazos de vencimiento del saldo de la deuda;
características, en cuanto a tasas de interés y monedas, de la nueva deuda; proyecciones referentes a tasas de interés y
tipos de cambio futuros, y la evolución de variables no financieras pertinentes (por ejemplo, en el caso de algunos países,
precios de los productos básicos). • Generar un “perfil de la deuda” consistente en indicadores clave de riesgos de la cartera
de la deuda −existente y prevista− a lo largo del horizonte de las proyecciones. Un perfiltípico debería incluir indicadores
tales como relación entre deuda a corto plazo y a largo plazo, relación entre deuda en moneda extranjera y en moneda
nacional, composición de monedas de la deuda en moneda extranjera, plazo de vencimiento medio de la deuda y perfil de
las deudas que van haciéndose exigibles. • Calcular el costo previsto de la deuda en términos pertinentes para los objetivos
del gobierno (por ejemplo, en relación con el impacto de la deuda sobre el presupuesto público). • Calcular el riesgo real del
futuro costo del servicio de la deuda, resumiendo los resultados de pruebas de tensión elaboradas sobre la base de las
perturbaciones económicas y financieras a las que puedan verse expuestos elgobierno, y en forma más general, el país. •
Resumir los costos y riesgos de estrategias alternativas de gestión de la cartera de instrumentos de deuda pública, como
2. base para la adopción de decisiones informadas sobre futuras alternativas de financiamiento. LA VOLATILIDAD EN
MERCADOS FINANCIEROS Y DE COMMODITIES. UN REPASO DE SUS
CAUSAS Y LA EVIDENCIA RECIENTE
Invenio, vol. 16, núm. 30, 2013, pp. 59-74
Universidad del Centro Educativo Latinoamericano
Rosario, Argentina
1. Un contexto de Estado Social de Derecho y Economía Política
En términos económicos, el contexto en el quehacer constitutivo del universo global de la teoría
económica; supone precisiones. De tal manera que, al momento de incorporar normativas a cargo
del Estado; se presumen como variables puntuales. Por lo mismo que ya están dadas premisas de
vuelo teórico general; que han ejercido como soporte en procesos de desarrollo de la economía,
válidas en el universo mismo de las relaciones entre los estados y quienes son considerados sujetos
(as) sobre los cuales recaen obligaciones y derechos.
Por esta vìa, entonces, se entienden premisas, en cuanto a la cuantificación de las riquezas, la manera
como estas están distribuidas. Asimismo como también el hecho que relaciona a beneficiarios directos
e indirectos. Cobra, para el caso de análisis, fuerza el vuelo que ha sido dado como estudiado a
partir de análisis de períodos concretos en la historia de la humanidad.
Siendo asì, entonces, cada quien es cada quien, dependiendo de los actos, acciones y procedimientos
que puedan ejercer como condicionantes. Pero, de todas maneras, siempre se da como sabido
aquello que expresa, por ejemplo, que los estados nacen y se desarrollan, en la medida que se erigen
como personalidad jurídica y política que debe ser acatada. Y, en esta misma perspectiva, se ha dado
por sabido que los estados tienen razón de ser en la medida en que ejercen como representantes de
todos los sectores sociales que, en su aplicación plena, conllevan a entender la existencia de los y las
sujetos individualmente considerados.
Ahora bien, dado que los estados ejercen como cuerpos que, si bien son intangibles en lo que esto
hace alusión a lo incorpóreo. Es decir que no es posible palparlo como sustancia viva, física, pétrea:
No es menos cierto que, aquí, cuerpo es igual a estructuras que se han venido desarrollando a través
de la historia. Y que, por lo mismo, tienen dotaciones acumuladas. En términos de raza, cultura,
política, costumbres, economía e ideología. Si se quiere, entonces, podría decirse que el Cuerpo del
Estado, no es otra cosa que el aparato ideológico, político, cultural y económico que ha logrado
configurarse de manera progresiva. Y que, asì no sea aceptado por quien o quienes asumen que “El
Estado” denota, de por sí, la máxima condición de equilibrio. Y que, en consecuencia, representa a
todos y todas. Que debe ser acatado, defendido y consolidado.
Pero, en el día a día, es cuando se puede analizar y evaluar esa condición que los Estados tienen de
ejercer como cuerpo jurídico, ideológico, económico y politico situado por encima de los intereses
particulares. La realidad, entonces, nos invita a dilucidar cada momento de la existencia de ese corpus
inamovible. Quien o quienes no lo acojan como tal, están y estarían inmersos en condición de sujetos
sobre los cuales tiene que existir la tipificación de desertores. Para el caso práctico, en casi todos los
códigos penales de los Estados, la tipificación màs ilustrativa y punible se denomina como rebelión.
Comoquiera que la existencia y fortalecimiento del cuerpo jurídico, político e ideológico (Estado),
supone la existencia de aplicaciones concretas de las teorías de Estado. En cada caso concreto; cada
Estado concreto existe, por lo mismo que se ha producido un acumulado, jurídico, económico,
político, cultural, racial. Y, en fin de cuentas, esto se traduce en la existencia de las normativas.
Digamos, entonces, que las normativas han sido desarrolladas y graduadas a lo largo de la historia.
La principal, aplicando el entendido de norma básica. O ley de leyes, como han dado llamar a los
bloques constitucionales. Con opciones de construcción, consolidación y aplicación; en el entendido
mismo de la noción de democracia. O, simplemente, opción u opciones asimiladas a una determinada
forma de lograr el funcionamiento de ese cuerpo incorpóreo.
3. En el caso particular de Colombia, todo el entramado vigente y que rige como Estado Social de Derecho,
según la norma constitucional vigente desde 1991; los asertos planteados arriba, cobran vida. Es
decir la aplicación real, práctica. Del corpus jurídico, económico, politico e ideológico.
En preciso, la identificación de propósitos que sugiere el título; supone la acreditación del día a día,
como desarrollo de normas pre-existentes. Asì como de normas se han ido creando. Y que se seguirán
creando en el transcurso del tiempo de vida del Estado Colombiano. Y, en ese contexto, yo diría que,
ese desarrollo, en la medida que se hace realidad al andar, convoca a la creación de normativas de
manera casi constante. Si bien es cierto que el título de referencia hace alusión al entramado
económico que se desarrolla y rige; de tal manera que “El Estado Social de Derecho; pueda
consolidarse y servir a los propósitos ya definidos por mi arriba, para todos los Estados.
De lo que se trata, ahora, es de contextualizar el propósito de este escrito. A partir de expresar
contenidos jurídicos, políticos, económicos e ideológicos. En ese universo de teorías y postulados que
han ejercido como soportes fundamentales.
2.1 El Estado Social de Derecho versus Política Monetaria. La deuda pública
DEUDA PÚBLICA CIERTA Y CONTINGENTE:
EL CASO DE COLOMBIA (Sergio Clavijo)
La Deuda Pública Cierta La principal diferencia conceptual entre la deuda pública cierta y la deuda contingente es que sobre
la primera se pagan intereses en atención a una regla acordada previamente (bien sea a tasa fija o a tasa flotante, bien sea
en moneda nacional o moneda extranjera). No obstante, elresultado final de lo que representa dicho costo financiero sobre
la deuda cierta tampoco puede conocerse ex-ante, pues sus determinantes están afectados por la política monetaria, la
cambiaria y las inter-relaciones de estos mercados con el gasto público. 4 Por ejemplo, la necesidad de financiar localmente
un déficit fiscal más elevado tiende a elevar las tasas de interés internas, generándose elllamado “crowding-out” financiero.
Si la presión del mayor gasto público eleva también los precios de los bienes finales en el sector real, entonces se dará
concomitantemente un “crowding-out”real. Así, pues, un mayor gasto público terminará por encarecer el servicio de la deuda
vía incrementos en las tasas de interés y, todo lo demás constante, también generará inflación, dando origen a un círculo
vicioso que puede volver explosiva la dinámica de la deuda.
Del documento acerca de la deuda pública Contraloría General de la Nación.
La Situación de la Deuda Pública 2004 Introducción La Contraloría General de la República, en cumplimiento del mandato
Constitucionaly la Ley 42 de 1993, presenta al Congreso y a la ciudadanía el informe sobre la Situación de la Deuda Pública
Colombiana. Ante todo, se quiere llamar la atención en que la reducción, por primera vez en diez años, en el saldo de la deuda
pública, no se corresponde con un ajuste en las finanzas públicas sino que, por el contrario, se desprende de una coyuntura
favorable en los precios. Los desequilibrios estructurales, en cambio, persisten. Alevaluar el endeudamiento y su entorno en
2004, se destaca en primer lugar la reducción del saldo de la deuda externa como consecuencia de la apreciación del peso, y
que compensó con creces elincremento en la deuda interna. Sobresale igualmente la reducción en elendeudamiento territorial,
como consecuencia del ajuste en este nivel. Estos dos elementos se enfrentan para reforzar la posición de la Contraloría en
torno a la urgente necesidad de corregir la dinámica del endeudamiento. La ligera reducción de la deuda en 2004 no es
pretexto para desviar la atención ni escatimar esfuerzos en procura de la sostenibilidad fiscal. Por el contrario, los resultados
del gobierno y aquellos del nivel territorial, ponen de manifiesto la diferencia entre lo coyunturaly lo estructural. Eldéf icit del
gobierno se profundizó, la deuda interna creció en un entorno de amplia liquidez y bajos tipos de interés, y la deuda externa
– en dólares - aumentó a pesar de condiciones apropiadas para su reducción. Luego, los problemas de largo plazo prevalecen
y los resultados de 2004 no indican mejora en este sentido. Por el contrario, la enseñanza que deja este año es que, así como
la deuda y su servicio se redujeron por factores exógenos, movimientos opuestos tendrían efectos adversos. Esta
vulnerabilidad de las finanzas públicas se incrementa con el creciente ritmo de endeudamiento. De allí la importancia de
establecer mecanismos orientados a mitigar el riesgo y los costos que de él se deriven. En este sentido avanza el presente
informe. La deuda pública colombiana en 2004 ascendió a $167 billones, equivalentes a 67.2% del PIB. De este total, $152
billones correspondieron al nivel nacional y $15 billones a los niveles territoriales. Como porcentaje del PIB, la deuda pública
bruta se redujo de 70.7% en 2003 a 67.2% en 2004. Este comportamiento obedeció principalmente a dos factores: en primer
lugar, al esfuerzo adelantado por el nivel territorialy las entidades descentralizadas 4 (reducción de 1.5% y 1% del producto,
respectivamente); y en segundo lugar, a factores de mercado que afectaron especialmente al GNC (reducción de 1%). En el
primer caso – nivel territorial -, se destaca el esfuerzo generalizado en todos los subniveles para reducir sus pasivos a tal
punto que la deuda bruta territorialy de las entidades descentralizadas se contrajo de 17.1% a 14.8% del PIB entre 2003 y
2004. Esta tendencia registrada en su endeudamiento, indica el avance en el proceso de ajuste de las finanzas de los niveles
subnacionales, de carácter estructuralacorde con las restricciones impuestas por reglas fiscales “duras” (Leyes 358 de 1997
y 617 de 2000)1 . El segundo factor – condiciones de mercado -, aplica especialmente al Gobierno Nacional Central, cuya
deuda evidenció una reducción relativa de 53.3% a 52.4% del PIB en ese período. El saldo externo, expresado en pesos, se
redujo de $57 billones en 2003 a $53 billones en 2004, mientras que en dólares, presentó un aumento de U$ 20.6 mil millones
a U$ 22.4 mil millones. De esta manera, la apreciación del tipo de cambio (14% nominal) explica la reducción registrada en el
4. saldo de la deuda externa delGNC en 4 puntos del producto (de 25.2% en 2003 a 21.4% del PIB en 2004), lo que se reflejó
por supuesto en el resultado total. Luego la reducción del endeudamiento, antes que una contraparte fiscal (i.e. un ajuste)
presentó una contraparte de mercado (i.e. valoración)2 . De allí que resulte compatible la reducción en el saldo de la deuda
con crecientes necesidades de financiamiento público (profundización del déficit del gobierno de 5.1% en 2003 a 5.9% del
PIB en 2004). No obstante, estas condiciones sólo tienen lugar en el corto plazo, cuando priman los efectos de mercado. En
el largo plazo, sin embargo, priman las condiciones estructurales de las finanzas públicas y tal combinación resulta claramente
insostenible. Para el caso particular del GNC, la brecha entre ingresos y gastos se profundiza, sin una solución definitiva. De
allí que, a pesar de resultados relativamente favorables en materia de endeudamiento, elriesgo de insostenibilidad fiscaly de
llegar a contratar deuda para pagar deuda (financiamiento tipo Ponzi) no se ha reducido y, por elcontrario, tiende a acentuarse
con cambios desfavorables en eltipo de cambio o en los tipos de interés. Ahora bien, la coyuntura cambiaria redujo también
el servicio de la deuda externa, mientras las condiciones de expansión monetaria permitieron, además, adelantar prepagos
por U$ 162 millones con dólares a bajo costo. Así, y como consecuencia de la apreciación del peso, sumada al incremento en
más de $1 billón en los ingresos tributarios y el alto precio del petróleo, se generaron condiciones propicias para realizar un
significativo ajuste de las finanzas a través del manejo de la deuda. No obstante, el espacio presupuestal no fue suficiente
para contener la profundización del desequilibrio fiscal del gobierno
De las transcripciones anteriores, como que se va desprendiendo un tejido complejo en términos de
la complejidad del manejo de la deuda pública. En lo que respecta a su composición técnica y sus
implicaciones en el espectro politico y económico. Fundamentalmente respecto a las implicaciones
en la política monetaria, incluidas variables como el PIB y el déficit fiscal.
Además, toda decisión por parte de los mandatarios respecto al endeudamiento. Sopesar términos
de referencia y comportamiento de las variables financieras, su volatilidad tendencial y efectiva y sus
impactos a corto, mediano y largo plazo. Son decisiones, las de los mandatarios(as), siempre serán
susceptibles de valoraciones políticas e incluso penales; habida cuenta que el crecimiento de la deuda
pública siempre podrá ser interpretado como resultado de imprevisiones en el contexto de la
economía de mercado. Deriva, entonces, en contradicciones reales o potenciales entre el mandato
constitucional, como en nuestro caso, en el contexto del Estado Social de Derecho.
Norberto Bobbio no pudo dilucidar nunca los alcances de algunas postulaciones acerca del Estado.
Mi aseveración relaciona el título de su obra (Estado Gobierno y Sociedad: Por una Teoría general de
la Política). Tanto como entender que su premisa […] En el lenguaje politico actual la expresión “Sociedad
Civil” es conocida generalmente como uno de los términos de la gran dicotomía Sociedad Civil/Estado. Lo que
quiere decir que no se puede determinar su significado y delimitar su extensión màs que referirlo y de limitarlo
al mismo tiempo que el término Estado”.. No logra ser demostrada en toda la extensión. Comoquiera que
desenvuelve opciones que no conducen a la precisión requerida.
[…] Al ser el derecho un ordenamiento de relaciones sociales, la gran dicotomía público/privado se
duplica primeramente en la distinción de dos tipos de relaciones sociales: entre iguales y entre
desiguales. El Estado, y cualquiera otra sociedad organizada donde hay una esfera pública, no
importa si es total o parcial, está caracterizado por relaciones de subordinación entre gobernantes
y gobernados, esto es, entre detentadores del poder de mandar y destinatarios del deber de
obedecer, que son relaciones entre desiguales; la sociedad natural como fue descrita por los
iusnaturalistas, o bien la sociedad de mercado en la idealización de los economistas clásicos, en
cuanto son tomadas normalmente como modelos de una esfera privada contrapuesta a la esfera
pública, están caracterizadas por relaciones entre iguales o de coordinación. La distinción entre
sociedad de iguales o sociedad de desiguales no es menos clásica que la distinción entre esfera
privada y esfera pública. Recuérdese a Vico: “Omnis societas omnino dúplex, inaequalis et aequalis”
[1720, cap. Lx]. Entre las primeras están, la familia, el Estado, la sociedad entre Dios y los hombres;
entre las segundas tenemos la sociedad de hermanos, parientes, amigos, ciudadanos, huéspedes,
enemigos.
[…] Los ejemplos anteriores permiten observar que las dos dicotomías público/privado y sociedad
de iguales/sociedad de desiguales no se sobreponen totalmente: la familia pertenece convencional_
mente a la esfera privada opuesta a la esfera pública, o mejor dicho, es ubicada en la esfera privada
5. allí donde por encima de ella se encuentra una Organización más compleja, como la ciudad (en el
sentido aristotélico de la palabra) o el Estado (en el sentido de los escritores políticos modernos);
pero con respecto a la diferencia de las dos sociedades es una sociedad de desiguales, porque en
la pertenencia convencional de la familia a la esfera privada está la prueba de que el derecho público
europeo que acompaña la formación del Estado constitucional moderno ha considerado privadas
las concepciones patriarcales, paternalistas o despóticas del poder soberano, que asemejan el
Estado a una familia en grande o atribuyen al soberano los mismos poderes del patriarca, el padre,
el amo; señores con diversos títulos o con diferente dominio en la sociedad familiar… […] Con el
nacimiento de la economía política, de la que proviene la diferenciación entre relaciones económicas
y relaciones políticas, entendidas las relaciones económicas como relaciones fundamentalmente
entre desiguales a causa de la división del trabajo, pero formalmente iguales en el mercado, la
dicotomía público/privado aparece bajo la forma de distinción entre sociedad política (o de
desiguales) y sociedad económica (o de iguales), o desde el punto de vista del sujeto…” (Versión
digital Fondo de Cultura Económica duodécima reimpresión, 2006, referencia a Las Dicotomías).
Siendo asì, entonces, no podría (yo) expresar mi visión de Estado, en comparación con los
postulados de Norberto Bobbio. Desde mi interpretación, la respuesta tiene que ser de màs amplio
espectro. Por lo mismo que no se avizora (en Bobbio) una posición clara. Algo asì como entender
que sus dicotomías Sociedad Civil-Estado se extienden en todo el texto, sin una expresión
inequívoca respecto a si el Estado, como figura que deviene en poder político y control, se encuentra
en crisis tendencial real.
El escenario es el Estado, en lo que este tiene de unificador de voluntades. Algo así como culminación
de un proceso, en el cual el interés individual se entiende en sumisión a los intereses colectivos. Es
decir supone aceptación de ese hilo conductor. En lo que sigue expongo mi análisis a partir de un
texto que, en mi opinión, es mucho màs trascendente, comparado con el texto de Norberto Bobbio.
El profesor Younes en su texto Prospectividad del Estado Social de Derecho (edición
Universidad Autónoma de Colombia, 2005) convoca a una reflexión en torno al significado que
adquiere la figura del Estado Social de Derecho. Da por entendido la aceptación de una tipología
inherente a la noción del Estado. Su énfasis, en ese contexto, tiene que ver con período histórico. O
mejor: un estadio o momento en el desarrollo del concepto y aplicación del Estado como sujeto
colectivo concreto. Queda claro, en esta línea de interpretación (la del autor), la asunción de una
opción teórica y práctica como sustento del análisis.
Siendo el escenario, la universalidad del concepto de Estado; precisa su nivel de intervención en el
sustento teórico y práctico del modelo intervencionista. Un relato o interpretación que se desenvuelve
soportado en prerrequisitos indispensables. Esto es, a manera de explicación, la referencia implícita
en cuanto al bagaje teórico del modelo keynesiano. En donde el rol intervencionista del Estado,
suscita tendencias en lo que a modelos de Estado precisos se refiere Pero, al mismo tiempo, concita
reflexiones, como quiera que la dinámica histórica remite a establecer referentes. Por los mismo que
el proceso de evolución y de consolidación del Estado, como figura y como icono del equilibrio;
Es un reto no solo interesante, sino también necesario. Habida cuenta de la aparición de
interpretaciones disímiles, emparentadas con el curso no lineal de las relaciones inherentes al modo
de producción capitalista.
El autor recurre a una metodología que incluye diversos referentes. Como proceso que conlleva a
proponer diferentes confrontaciones; en donde la simulación de confrontaciones está dada por la
noción de Estado y por la concreción del mismo. No como utopía irrealizable; sino como concreción
en la cual el rol asumido por los sujetos vinculados al Estado, definen una perspectiva no homogénea.
6. Siendo el objeto particular del análisis, el Estado Social de Derecho, propone un recorrido teórico en
un momento en el cual, diferentes teorías asociadas al mercado como referente básico y la teoría de
la globalización como soporte, desemboca en corrientes y tendencias que, cada vez más, tratan de
desestabilizar la noción de solidaridad y redistribución de los acumulados económicos (riquezas).
Proponiendo elementos reguladores que, de por sí, contarían la noción de Estado Benefactor.
En esa dimensión, el autor, asume retos. Por cuanto no pretende una defensa ortodoxa de la figura
del Estado Social de Derecho. Por el contrario, introduce reflexiones en las cuales se reconocen los
errores de interpretación y de aplicación de la teoría del Estado Social de Derecho.
Asuntos como la ineficiencia de las entidades estatales, la indisciplina individual y colectiva en
términos de la recepción de los beneficios y su aplicación en lo cotidiano. La intervención del Estado
como ejercicio de políticas públicas al garete. Como obsesión acrítica, en reemplazo de exigencias
vinculadas con la calidad y la eficiencia en la gestión.
Es un escrito en el cual se desvirtúa la aseveración vinculada con la incompatibilidad entre un ejercicio
o gestión en los cuales el beneficio colectivo sea predominante, y la iniciativa privada, a partir de la
concreción de actividades económicas ajustadas al modelo capitalista clásico y en donde el Estado
ejerza como regulador imperativo. Veamos, al respecto, lo consignado en el documento que
transcribo. Se evidencia el conflicto entre decisiones económicas relacionadas con el contexto de la
política económica en determinados periodos y la vinculación con el comportamiento de variables del
mercado financiero.
Estrategia de Gestión de Deuda de Mediano Plazo de la Nación. Ministerio de Hacienda y Crédito Público Dirección Generalde
Crédito Público y Tesoro Nacional
1. Marco Conceptual:
En términos generales, una estrategia de deuda no es otra cosa que una combinación particular de instrumentos disponibles
de endeudamiento que apuntan hacia una estructura de portafolio, escogida para ser implementada durante un período
determinado y satisfacer ciertos objetivos de política definidos con antelación. En este sentido, previo a la discusión sobre los
aspectos específicos del diseño de la estrategia deseada de deuda, resulta conveniente describir las herramientas con que
cuentan los gestores de la deuda en el ejercicio de sus actividades. En este capítulo se describen los aspectos teóricos
relevantes bajo los cuales se debe enmarcar la gestión de deuda pública. Primero, se evalúan los tipos de riesgo inherentes a
implementar diferentes tipos de estrategia, así como los costos y beneficios adquiridos en este proceso. Posteriormente, se
describen los indicadores objetivos del portafolio de referencia de la deuda, que constituyen las hojas de ruta para definir la
estructura deseada delsaldo de ésta. Finalmente, se estudian otros aspectos relevantes de la deuda, como las interacciones
con otros factores y variables de la economía y del mercado
. 1.1. Análisis de riesgos, costos y beneficios La gestión de la deuda pública es el proceso de establecer e implementar una
estrategia para administrar la deuda del Gobierno Nacional Central. El objetivo principal de la política de manejo de la deuda
es asegurar que las necesidades de financiamiento del Gobierno y el pago de sus obligaciones se satisfagan al menor costo
posible y con un nivel prudente de riesgo. Una estrategia de gestión de deuda de mediano plazo (EGDMP) consiste en un plan
bajo el cual las autoridades formulan las directrices del Gobierno y tiene como propósito alcanzar la estructura deseada del
portafolio de deuda, al tiempo que se tienen en cuenta las limitaciones y se capturan las preferencias públicas relativas a las
alternativas de costos y riesgos. De este modo, la EGDMP hace especial énfasis en gestionar la exposición al riesgo del
portafolio de deuda. Específicamente, permite identificar las posibles variaciones de los costos fiscales que inciden en elservicio
de la deuda, aquellos factores como fluctuaciones macroeconómicas, movimientos inesperados en las variables de mercado o
posibles choques exógenos que afecten la economía en términos agregados. Lo anterior permite administrar el riesgo para el
balance general del país, minimizando la carga relativa de la deuda para los contribuyentes y maximizando los recursos
disponibles para otros gastos (FMI et al., 2009). Los beneficios resultantes de la definición de objetivos claros en materia de
gestión de deuda son determinantes almomento de elegir una estrategia de administración adecuada. En general, los gestores
de la deuda tienen el propósito de alcanzar tres objetivos fundamentales (Gráfico 1), que suelen ser mutuamente excluyentes
(García, 2000): i. Minimizar el costo promedio de la deuda. ii. Minimizar el riesgo de mercado. iii. Maximizar el plazo promedio
de la deuda, procurando un perfil de vencimientos uniforme.
1
2Por otro lado, cuando las tasas de interés externasson inferiores a las locales, las emisiones en moneda extranjera y de largo
plazo resultarían a priori más atractivas, pues se estarían reduciendo los costos de la deuda. Si bien esta estrategia
7. incrementaría el plazo al vencimiento, reduciendo así el riesgo de refinanciamiento, no contempla el mayor riesgo cambiario
que conlleva la deuda denominada en moneda extranjera
3. Ahora, sila estrategia está encaminada a reducir elriesgo de refinanciación, los administradores de la deuda incrementarían
la emisión de títulos a tasa fija de largo plazo, atentando contra el objetivo de minimizar el impacto sobre presupuesto que
implica por servicio de intereses la emisión de deuda a mayor plazo. Si bien este tipo de estrategias resultan bastante costosas,
suelen tener acogida entre los gobiernos en la medida que limitan la incertidumbre asociada a los flujos futuros de la deuda,
resultado de cambios inesperados en las variables de mercado. En últimas, esta volatilidad sobre el servicio de la deuda tiene
altos costos políticos asociados, ya que al afectarse el resultado del ejercicio fiscal, el gobierno se ve en la necesidad de
incrementar los ingresos o reducir el gasto primario (García, 2000). Por lo anterior, es conveniente que la evaluación de los
costos y riesgos realizada al momento de diseñar la EGDMP abarque el ciclo económico completo4, de modo que se ponderen
y evalúen en todas las etapas de su diseño e implementación, las interrelaciones entre los tres objetivos mencionados.
5. Una alternativa adicionalque tienen los gobiernos es la emisión de deuda indexada a la inflación. Emitir este tipo de tít ulos
resulta ventajoso en la medida en que los inversionistas no necesitan ser compensados por la incertidumbre alrededor del
comportamiento futuro de los precios, requiriendo así menores tasas de interés y a plazos más amplios. De hecho, los
beneficios pueden ser particularmente importantes en los casos donde las expectativas de inflación delgobierno son inferiores
a las expectativas delmercado. Desde luego, eldiseño y la implementación efectiva de la EGDMP requieren de la construcción
y/o diseño de instrumentos financieros y vehículos de deuda que puedan ser adquiridos por la base de inversionistas a la cual
el gobierno tiene acceso y que asimismo cuenten con demanda en el mercado secundario. Por tanto, estos instrumentos
deberán guardar correspondencia en términos de los objetivos propios de la deuda y de los que tenga el Gobierno en materia
macroeconómica y fiscal.
3
1.2. Portafolio de referencia La gestión de la deuda de un gobierno consiste en el diseño e implementación de un portafolio
de deuda que, de acuerdo con unos objetivos de política previamente definidos, balancea adecuadamente, entre otras
características, las siguientes: i. Estructura de vencimientos de la deuda. ii. Composición por monedas. iii. Composición por
tipos de tasas de interés. iv. Composición por indexación a la inflación o alguna otra referencia de mercado o macroeconómica.
Estos cuatro elementos mencionados implican la definición de cuatro indicadores objetivo análogo, que constituyen el
portafolio de referencia o benchmarkque refleja las preferencias delGobierno en relación con la gestión de deuda. Los gestores
de la deuda también disponen de otras herramientas adicionales (que no implican por sí mismas nuevo endeudamiento) que
permiten modificar, cuando se considere necesario, alguna de las características de las mencionadas anteriormente, en busca
de mejorar el perfilgeneralde la deuda pública. Entre estas se encuentranlos swaps y otras coberturas de mercado, recompras
y canjes de deuda. A partir de las cuatro características mencionadas y mediante el uso de las coberturas, los gobiernos
implementan sus estrategias de gestión de deuda.
1.2.1 Portafolio de referencia – Definiciones Con el objetivo de establecer políticas de deuda pública constantes en el tiempo,
se incorporan a la gestión de la deuda unos indicadores objetivos, a partir de las características anteriormente mencionadas.
Concretamente, se definen cuatro indicadores en los siguientes términos: i. Vencimientos. Consiste en la definición de los
diferentes horizontes objetivo a los cuales se emitirá la deuda.
ii. Moneda extranjera. Este indicador determina el nivel objetivo de participación por monedas de emisiones y su efecto en el
saldo. Este indicador es fundamentalcuando se analizan consideraciones delingreso totaldelGNC, bajo un enfoque de gestión
de activos y pasivos del BF y de costos relativos de endeudamiento. Este tema se discutirá con profundidad más adelante. iii.
Tipo de tasa. Representa la participación de las emisiones en tasa fija vs tasa variable de la deuda pública. iv. Indexación.
Determina el nivel que alcanza la deuda que se encuentra atada a ciertas variables macroeconómicas, principalmente locales,
siendo la inflación la más común de ellas. Estos indicadores deben representar la composición o estructura óptima de la deuda
en términos del balance entre los beneficios y los riesgos que surgen de la gestión de la deuda. Asimismo, otras características
deseables de los portafolios de referencia es que sean consistentes con la estrategia de financiamiento, posean perspectiva
de largo plazo y ofrezcan una herramienta de análisis para la correcta administración de la deuda y el proceso de toma de
decisiones. En el mismo sentido, los indicadores permiten institucionalizar y facilitar el seguimiento de los objetivos de
administración de deuda. Diferencias entre la estructura del portafolio de deuda vigente y el portafolio de referencia son
indicativo del grado en el que los administradores son exitosos en replicar su estructura y en acercar el portafolio actualhacia
la composición preferida del gobierno. Es recomendable que los criterios considerados en la definición del portafolio de
referencia sean neutrales a la coyuntura del mercado, en el sentido que no reflejen ninguna visión particular del gobierno o
de los involucrados en el manejo de la deuda acerca del comportamiento futuro de algunas variables macroeconómicas o de
mercado. De hecho, el portafolio de referencia puede convertirse en un instrumento muy dañino en caso de no ser bien
especificado e implementado (Wheeler, 2004). De cualquier forma, es importante reconocer al momento de diseñar los
portafolios de referencia y de especificar e implementar la estrategia de emisión, que el comportamiento de la deuda responde
de diferente manera dependiendo de la naturaleza de los choques sobre la economía. Sin embargo, es difícil establecer en
qué medida un país es más propenso a sufrir choques de oferta o de demanda. Un choque negativo sobre la demanda origina
una caída en el nivel de precios y una contracción de la economía. Con los precios a la baja, la deuda cuyo servicio esté
indexado al nivel de precios (inflación) tendría la capacidad de cubrir la posición fiscal, en el momento que los ingresos caigan
y la demanda por gasto aumente como resultado del choque. Por su parte, una cobertura en la posición fiscal puede ser
obtenida con deuda indexada a tasa fija en los casos que se presente un choque de oferta adverso, generalmente caracterizado
por una caída del producto y un aumento en el nivel de precios. Bajo este escenario, los instrumentos atados a tasa fija
resultan convenientes, pues esta estructura de deuda apoya la política fiscal contracíclica (caracterizada por una caída en los
8. ingresos provenientes de impuestos y un aumento en el gasto en relación al PIB) durante el tiempo en que la economía
enfrenta elchoque de oferta, puesto que hace que decrezcan los pagos delservicio de la deuda realdurante la recesión (Togo,
2007).
Como se puede observar, la definición de los indicadores objetivo atiende a condiciones macroeconómicas, fiscales, de
desarrollo del mercado financiero, entre otras, por lo cual cada gobierno deberá identificar las variables relevantes en su
economía y diseñar su portafolio de referencia de acuerdo con el comportamiento de éstas, para así realizar una gestión
adecuada de su deuda. Así, el propósito de este libro es responder a los planteamientos anteriores para el caso colombiano.
1.2.2 Otras herramientas de gestión de la deuda – Instrumentos de cobertura Por otra parte, la ejecución de operaciones con
derivados, particularmente los swaps de tasa de interés y de monedas, se constituye como una herramienta clave en la meta
por alcanzar los objetivos de la EGDMP. Así, la composición del portafolio de deuda es gestionada rebalanceando la deuda ya
existente a través de coberturas de swaps de tasa de interés y/o de tasa de cambio. La implementación de estos instrumentos
permite hablar por separado de la estrategia de emisión y del manejo del riesgo. Si bien esta estrategia implica costos de
cobertura, combinar emisiones de bonos de largo plazo con CCS contribuye a reducir el riesgo de mercado y de refinanciación,
a cambio de incrementar el endeudamiento de corto plazo. Lo anterior también contribuye a mantener una estrategia de
emisión estable y predecible, fundamentalpara elgobierno central, quien es un participante crucialen el mercado de capitales
doméstico
8. 1.3. Integración de la EGDMP en el marco macroeconómico No es suficiente para un gobierno definir políticas de gestión y
una estrategia de deuda en sí mismas. Por el contrario, las políticas adoptadas deben garantizar la coherencia entre la
administración de la deuda pública y el marco macroeconómico general, por lo cual es importante que se comprendan
adecuadamente los enlaces, los efectos de retroalimentación y los mecanismos de coordinación entre ambas, de modo que se
potencien los efectos de la estrategia de manejo de deuda y de otras políticas macroeconómicas en el desempeño generalde
la economía. En este proceso es fundamental identificar las tensiones y los incentivos que tienen los diferentes agentes y
actores gubernamentales que inciden en las decisiones que al respecto se tomen, de forma que los espacios de discusión y
las políticas efectivamente implementadas no respondan a los intereses particulares de ningún grupo o sector de la sociedad
ni del gobierno. El Gráfico 2 presenta de forma esquemática los enlaces entre algunos aspectos de la deuda y otros objetivos
macroeconómicos.
Esto último es lo que sirve para titular el escrito. Aquí, Prospectividad, es sinónimo de avance en procura de asimilar los
cambios en el quehacer económico y social. Es, si se quiere, un ejercicio teórico que propone alternativas de solución a las
aparentes o reales incompatibilidades entre (como quedó dicho arriba) el modelo clásico, con sus ajustes necesarios según el
desarrollo del modo de producción, incluida una opción de macroeconomía asociada a las perspectivas de crecimiento, de
acumulación y redistribución, de conformidad con los principios reguladores, establecidos por el mercado. Y, un concepto de
intervención estataldinámica, coherente, en el cual la redistribución del ingreso esté garantizada por la acción del Estado. En
una figura, a manera de ejemplo, que no se subsume en contradicciones entre los modelos. Por el contrario, elescrito, incluye
una noción teórica en la cual el “El Estado Social no sólo debe ser entendido en términos de contenido sino del proceso
productor de soluciones político sociales, superando la asfixia impuesta por las reglas y los imprescindible, encarnando la
complejidad de un modo no simplificador…”1
Así las cosas, el profesor Simón Younes Jerez, presenta una interpretación asertiva delmodelo de Estado Social de Derecho.
Combinando escenarios y entornos. Es decir, haciendo un recorrido que nos otorga expresiones precisas. Sin detenerse en el
tiempo. Sin condicionar al lector, en cuanto le presenta opciones relevantes, vinculadas con el tránsito histórico de la figura
del Estado. Haciendo énfasis en la interacción entre los diferentes actores en la sociedad. Sujetos individuales y colectivos
partícipes del proceso.”…Elmejor análisis prospectivo del Estado Social de Derecho, tiene que tener una óptica que supere
las falsas polarizaciones, evitando la mitificación ideológica del Estado o la Sociedad (civil) y contemplar los diferentes ámbitos
de realidades sociales como fragmentadas e interdependientes, cuyas fronterasno son nítidas y cuyos condicionamientos son
múltiples. Como afirma algún pensador francés, el nuevo modelo de Estado Social, el nuevo contrato social, tal vez brote
únicamente cuando se reúnan las condiciones para su elaboración...”2
“…La presencia pública basada en los principios de solidaridad y redistribución sólo sostenibles a través de un Estado Social,
puede y debe ser capaz de adaptarse a nuevas circunstancias sin desdibujar su esencia, esto es con un pluralismo que da
cabida al llamado tercer sector que constituye la vanguardia de la sociedad delbienestar yque está formado por organizaciones
y asociaciones que fomentan las relaciones secundarias a través de medios pro sociales como la solidaridad…” 3
1 Tomado del texto, página 231
2 Ibíd., página 230
3 Ibíd., páginas 191-192
9. El hecho de convocar a los diferentes estamentos de la sociedad, para que participen en ese proceso de transformación del
concepto de Estado de Bienestar; sin que esto conlleve una modificación de los principios que lo soportan. Constituye, de por
sí, una propuesta creativa.
“…Cuando el Estado Social de Derecho parece haber alcanzado el techo, toca decir que la sociedad debe asumir más
responsabilidades, debe ser más activa y debe participar más en los problemas que le afecten. Se trata de que la sociedad
civil sea también responsable del futuro bienestar de los ciudadanos, junto al Estado y al mercado…”4
Para decirlo en términos del proceso vinculado con el desarrollo económico y social; el autor, asume un hilo conductor práctico.
Pero soportado en una visión de futuro, anclada en sólidos conocimientos teórico; como quiera que expresa:”…ElEstado Social
es un conjunto de instituciones cruciales para paliar los efectos sociales de la crisis e integrador de las quiebras sociales. El
Estado Social de Derecho ha mantenido, en todos los países que ejercitan el modelo, la cobertura, pero sin la garantía de una
protección suficiente. Hay que anotar que dicho estado está afrontando un proceso de reorientación teórico-ideológica, ante
la emergencia de nuevas necesidades sociales y nuevas formas de producción de bienestar...”5
Lo anterior, traduce que no se trata (en lo que respecta al Estado Social de Derecho), de ejercer una posición ortodoxa
irrelevante. Es más bien una acotación dinámica. Que involucra una noción de lo social, en la cuallos y las sujetos, se involucran
en el proceso. A partir de nuevas interpretaciones a manera de exigencia de los nuevos hechos.
[…] Se destaca también que el Estado Social de Derecho ha tenido que adaptarse a nuevas realidades socioeconómicas, como
la emergencia de nuevas necesidades sociales, como consecuencia del envejecimiento de la población, pérdida del peso
asistencial de la familia, expansión del divorcio y diversificación de los núcleos familiares y no familiares de convivencia…”6
El escrito aparece, pues, como evidencia social, política y económica, en lo que respecta a la evolución del concepto y de la
aplicación del Estado Social de Derecho. Aún, siendo un hecho la confrontación derivada de expresiones como la globalización
económica y política, elescrito exhibe posiciones en búsqueda de un equilibrio; entre las opciones de Estado Social de Derecho
y el concepto que avala el mercado como referente único y fundamental.
Mi postulación, entonces, refiere una opción de interpretación que trasciende la posición exhibida por Norberto Bobbio
(Estado,Gobierno y Sociedad:Por una Teoría Generalde la Política). Esto traduce que, ni tendencialmente, ni en lo
inmediato la figura del Estado se pueda tipificar como si estuviese en crisis. Lo que pasa es que ha tenido (El Estado)
modificaciones respecto a su estructura inicial. Asì como también, en lo que refiere a los pulsos políticos que lo atraviesan
transversalmente. Precisamente a partir de acciones de, La sociedad civil.Que,para mí,no tiene elmismo sentido que
le atribuye Bobbio.Entonces,en plena fidelización de miposición,no existe taldicotomía.Por elcontrario,es
algo asìcomo dos conceptosy dos figurasque serequieren una a la otra; por la vìa de expresionesrelacionales
que exhiben contradicciones. Pero que, en fin de cuentas, se necesitan una a la otra. Sin una Sociedad Civil
activa en términospolíticos;no se conciben las transformaciones delEstado,paraenfrentar crisis y la absorción
de nuevos requerimientos.
3. La contratación de créditos internos y externos en el contexto de una gestión pública concreta.
Es más o menos como tener que soportar el enredo asociado aloficio de la deuda. Como recurso necesario en todo momento.
En el contexto de la economía centrada en elmodelo capitalista. Ser prestatario como estado, en cualquiera de sus expresiones.
Tanto en lo que conocemos como gobierno central, como también en las denominadas entidades territoriales. Supone entender
la dinámica misma del proceso. Aquíno se trata de delénfasis en términos políticos. Más bien es una dicotomía que persevera.
Porque, cualquiera sea la posición política en el oficio gubernamental; mientras se actúe en el escenario dominado por la
economía política capitalista, las opciones de estabilidad siempre estarán asociadas a la necesidad de mantener uyn flujo de
efectivo que permita atender el gasto público.
Ahora bien, si lo miramos en la perspectiva propia de las contingencias derivadas del desarrollo económico; diríamos que las
situaciones deficitarias siempre estarán en relación directa con la insuficiencia en la creación de riqueza. Ese entendido básico
de la dinámica capitalista estará de lado de unos términos de beneficio y/o de incapacidad para atender con los recursos
básicos derivados delproceso productivo, las necesidades inherentes a la construcción de un espectro social, politico y cultural.
De tal manera que podamos asumir opciones de distribución de los acumulados económicos. Algo así como entender que el
endeudamiento siempre estará en relación directa con la capacidad o la incapacidad para atender, insisto en ello, los gastos
asociados a la estructura delestado y su fortalecimiento. El problema, entonces, es como atender la exigencia propia de esta
dinámica.
4 Ibíd., página 192
5 Ibid., página 194
6 Ibíd., páginas 194-195
10. Los argumentos a favor y en contra de la deudapública Versus impuestos:Una interpretación globalRICARDO
CALLE SAIZ Catedrático de Hacienda Pública y Derecho Fiscal
Se ha señalado generalmente que el Gobierno opera bajo una restricción presupuestaria que determina que en cada período
los gastos públicos totales (pagos de transferencia más compras de bienes y servicios) debe ser igual al flujo total de
financiación de todas las fuentes (incluyendo la emisión de dinero). Esto implica, según ha destacado Cari F. Christ (1) y
recogido J. F. Due y A. F. Friedlaender (2), que: 4G = ¿7" + AD + A# (3) En palabras del propio Christ, «al elegir una política
mixta, monetaria y fiscal, las autoridades públicas (incluyendo el banco central) están limitadas por una restricción
presupuestaria. Esta restricción es menos severa que una limitación privada de la misma naturaleza para los individuos o
empresas, porque las autoridades gubernamentales pueden poner en circulación billetes. No obstante, la restricción
presupuestaria delgobierno es importante. Exige (1) «A Simple Macroeconomic Model with a Government Budget Restraint».
Journal of Política! Economy, vol. LXXVI, enero-febrero 1968, páginas 53-67. (2) Análisis Económico de los Impuestos y del
Sector Público, Editorial El Ateneo, Buenos Aires, 1977, pág. 522. (3) Siendo G = gastos públicos; T = ingresos impositivos;
D = Deuda pública, y H = creación de dinero. RICARDO CALLE SAIZ que en cada período el gasto público total (pagos de
transferencia más compras de bienes y servicios) debe ser igual al flujo totalde financiación de todos los recursos (incluyendo
la emisión de dinero). Esto significa que existe una limitación a la libertad del Gobierno para escoger valores arbitrarios de
variables políticas tales como gastos, impuestos, cuantía neta de deuda pública y de emisión de nueva moneda. Por ejemplo,
si un gobierno ha decidido sobre sus gastos, impuestos, deuda pública y los restantes medios de financiación, excepto sobre
la emisión de dinero, entonces no existe elección posterior sobre la cuantía de dinero a emitir: el importe neto emitido debe
ser justamente lo suficiente para que los flujos totales de financiación se igualen al gasto» (4). Pues bien, generalmente se
admite que estos tres medios de financiación —impuestos, deuda pública y emisión de dinero— pueden proporcionar en sí
mismos las cantidades precisas para hacer frente a los gastos del Estado, que son neutrales desde el punto estrictamente
financiero. Y es que el juicio sobre la conveniencia o no de utilizar la deuda pública como fuente alternativa de ingresos se ha
venido condicionando, tradicionalmente, a las conclusiones sostenidas sobre la transferencia o no de la carga de la deuda
pública sobre las generaciones futuras. Por ello, hemos de contemplar desde una perspectiva actual todos los argumentos
esgrimidos en favor o en contra de la existencia de una transferencia de «carga» sobre las futuras generaciones, para poder
disponer de argumentos que permitan, al final de este ensayo, responder a la principal interrogante planteada: cuándo debe
utilizarse la deuda pública en lugar de la imposición y de la emisión de moneda, y qué posibles ventajas e inconvenientes se
derivarán de una decisión razonada sobre este extremo. Anticipemos que, en torno a la polémica histórica desarrollada, las
discrepancias se inician desde el propio concepto de carga (4) CHRIST introduce la restricción presupuestaria gubernamental
en un muy simple modelo teórico macroeconómico estático de demanda agregada con nivel de precios rígido, para demostrar
cómo el análisis de las políticas macroeconómicas está afectado por la restricción presupuestaria. En concreto, deduce de su
análisis que el efecto multiplicador de un cambio en las compras del Gobierno no puede ser definido hasta que se decide cómo
financiar las compras, y que el valor que se da al multiplicador por el análisis general aceptado (que ignora la restricción
presupuestaria delGobierno) es en generalincorrecto. 8 LOS ARGUMENTOS A FAVOR Y EN CONTRA DE LA DEUDA PUBLICA
—unos autores se refieren a la carga bruta y otros a la carga neta, es decir, deduciendo la productividad del gasto público—,
hasta llegar a una distinta conclusión respecto de si existe o no una carga diferencial por el hecho de que la Deuda Pública
sea la forma de financiación elegida, pasando por el diferente contenido con que se emplea el concepto de generación: para
unos, la referencia a generaciones futuras es sinónimo de «períodos de tiempo futuros», independientemente de que las
personas existentes sean esencialmente las mismas o sean distintas; para otros, el término «generación» se utiliza más
precisamente para referirse alconjunto de personas de igual edad. Estas discrepancias observadas nos obligan a profundizar
en la polémica existente sobre este extremo: traslación de la carga de la deuda sobre las generaciones futuras, para detectar
si efectivamente responde a un contenido real o no. El punto de partida tradicional de investigaciones de esta naturaleza es
la consideración delpensamiento clásico, que han sintetizado entre otros J. M. Buchanan (5) y R. A. Musgrave(6). Este último,
en su trabajo «Teoría de la Deuda Pública», y en su obra «Teoría de la Hacienda Pública», expone, según el enfoque clásico
(7), cuándo precisamente es necesaria la financiación por deuda pública, analizando los siguientes supuestos: financiación
«pay-asyou-use»; equidad intergeneracional; financiación por deuda para ajustar la distribución de la renta; financiación por
deuda para reducir la «fricción impositiva», y financiación por deuda de proyectos autoliquidables. Musgrave, como otros
muchos autores, no hace sino constatar —desde la perspectiva que aquí nos interesa— cómo para la mayoría de los autores
clásicos la financiación mediante deuda permitía trasladar el peso de la carga sobre generaciones futuras. El argumento
sostenido era que un país gastaba y (5) Vid. «A Review of Pre-Keynesian Debt Theory», capítulo 8 de Public Principies of
Public Debt. Ed. R. D. Irwin, Inc. Homewood, Illinois, 1958, páginas 102-122. (6) Vid. R. A. MUSGRAVE: «Teoría de la Deuda
Pública», en Tratado de Finanzas, de W. GERLOFF y F. NEUMARK. Ed. El Ateneo, Buenos Aires, 1961, tomo I, págs. 607-691;
Teoría de ¡a Hacienda Pública. Ed. Aguilar, Madrid, 1967, capítulo 23. (7) MUSGRAVE, al referirse a los aspectos llamados
clásicos de la teoría de la Deuda Pública, entiende por tales el uso de la política de la deuda para todos aquellos fines no
dirigidos a la estabilización. En un sistema clásico, señala Musgrave, es éste elproblema de la política de la deuda; aun cuando
siguen existiendo tales aspectos clásicos bajo condiciones previas más realistas, no es posible separarlos ya de la función
estabilizadora. RICARDO CALLE SAIZ financiaba elgasto a travésde deuda pública, cargaba sobresu juventud, e incluso sobre
los ciudadanos futuribles, el peso del gasto presente. Era a esos ciudadanos a los que se iba a exigir la carga por impuestos
correspondientes para devolver la Deuda y pagar los intereses. Por el momento, si el gasto se financiaba mediante deuda, se
creía, no sufrirían las generaciones presentes. Un Estado responsable sería, en definitiva, aquelEstado que no comprometiese
a sus nietos mediante Deuda. La Deuda aparece como un medio posible para distribuir la carga a lo largo del tiempo entre
11. distintas generaciones y podría utilizarse de hecho para evitar, asimismo, las injusticias excesivas a la generación actual, ya
que si ésta gozaba tan sólo parcialmente de los rendimientos de un bien, después no sería justo exigirle el pago
correspondiente a todos los impuestos. Como ha señalado Fuentes Quintana, entendida por los clásicos la carga del gasto
público como una detracción coactiva de los particulares para su financiación, no existe diferencia de magnitud entre la carga;
sólo hay diferencias en cuanto a su distribución en el tiempo. En efecto, cuando se financia un gasto mediante impuestos, la
carga bruta del mismo pesa íntegramente sobre la generación presente en el momento de su realización; por el contrario, la
Deuda traslada la carga bruta inherente al pago de los impuestos a los períodos futuros en que tales impuestos hayan de ser
exigidos a las obligaciones financieras del interés y amortización originados por la existencia de los títulos. En conclusión,
parece claro que, para los autores clásicos, todo el gasto público tiene una carga bruta (lo que no supone negar que en
ocasiones haya gastos productivos) que, en el caso en que el gasto haya sido financiado mediante impuestos, es soportado
íntegramente por la generación presente y, en el caso alternativo de financiación mediante Deuda, es soportada por las
generaciones futuras, a las que toca pagar los impuestos necesarios para el servicio financiero de la deuda pública (8). De lo
expuesto hasta aquí nos interesa retener dos ideas: la primera, que según los autores clásicos la deuda pública supone una
transferencia de la carga financiera sobre las generaciones futuras; la segunda, que la deuda pública se configura, no obstante,
como un medio posible para distribuir la carga de la deuda a lo (8) Vid. E. FUENTES: Hacienda Pública, Madrid, 1973. pág.
474. 10 LOS ARGUMENTOS A FAVOR Y EN CONTRA DE LA DEUDA PUBLICA largo del tiempo entre distintas generaciones.
Este segundo aspecto ha merecido una atención detallada de Musgrave al analizar la deuda interna en el sistema clásico, con
la finalidad de demostrar cómo la financiación por deuda pública no se limita a posibilitar una prolongación del pago de
impuestos, sino que también permite una justa distribución de los costes sobre varias generaciones, cosa imposible en el
supuesto de financiación exclusivamente por impuestos (9). El razonamiento de Musgrave es muy simple. Después de explicar
la importancia de la deuda como instrumento de política cuando se sitúa el pago sobre la base de pago según su uso («payas-
you-use»), Musgrave destaca que este principio general gana en importancia si se tiene en cuenta que los servicios ofrecidos
por el Gobierno serán utilizados frecuentemente por varias generaciones de contribuyentes. Esto es particularmente cierto —
en su opinión— para la Hacienda municipal, donde la composición de los grupos residentes está sujetaa cambios más o menos
frecuentes. En este caso, el principio financiero de «pay-as-you-use» se deriva directamente del gravamen del beneficio y la
deuda pública es necesaria para distribuir los costes entre las diversas generaciones. Para demostrar esta última afirmación,
que es la que interesa justificar desde nuestro punto de vista para llegar a una más perfecta comprensión del planteamiento
clásico, Musgrave considera un proyecto cuyos servicios están disponibles por plazos iguales durante tres períodos. También
supone que la etapa de vida (o residencia) de cada generación cubre tres períodos y que la población es estable. Finalmente,
estima que los préstamos avanzados por cualquier generación deben devolverse dentro de su etapa de vida. En cada período
los beneficios llegan a tres generaciones, incluyendo las generaciones 1, 2 y 3 en el primer período; 2, 3 y 4 en el segundo, y
3, 4 y 5 en el tercero. Para contribuir en la proporción adecuada, las generaciones 1 y 5 deben pagar cada una 1/9 del coste;
las generaciones 2 y 4, 2/9 cada una, y la generación tercera 3/9. Se supone que el coste totales de 100 dólares y que ha de
distribuirse adecuadamente (10). (9) Vid. R. A. MUSGRAVE: Teoría de la Deuda Pública, op. cit., págs. 613 y 614. (10) En un
excesivo afán de simplificación, Musgrave no tiene en cuenta la distribución del coste de los intereses, y supone que el interés
se dividirá entre las generaciones en proporción a su participación..
De todas maneras, entonces, es preponderante la necesidad de una determinación respecto a las
decisiones. En esto de la deuda pública se entiende la condición de prestatario referida a unas
determinadas condiciones existentes al momento de decidir una determinada transacción. Si el dinero
se necesita para aplicar +a las exigencias del gasto público, es necesario conseguirlo. Otra cosa son
los términos de referencia de la contratación de esa deuda. Y, aquí, derivaríamos en la asunción de
otro tipo de roles asociados. Uno de ellos hace referencia al entendido de ética en lo concerniente al
ejercicio de la condición de mandatario o mandataria.
Veamos esto en un ejemplo como el caso de la deuda pública de Uruguay.
Sostenibilidad y Vulnerabilidad de
la Deuda Pública:
La Experiencia Uruguaya
Isabel Rial 1
irial@bcu.gub.uy
Leonardo Vicente1
lvicente@bcu.gub.uy
Octubre 2003
Sostenibilidad y Vulnerabilidad de la Deuda Pública:La Experiencia Uruguaya
4En elpresente trabajo se desarrolla un set de indicadores fiscales que tiene por objetivo evaluar la sostenibilidad de la política
fiscal más allá del concepto tradicionalde solvencia pública. El entorno macroeconómico fuertemente volátilque caracteriza a
países como Uruguay torna insuficiente un análisis basado únicamente en el nivel de endeudamiento, siendo necesario
12. introducir elementos que evalúen y cuantifiquen los riesgos de cambios en dicho entorno. Partiendo de los indicadores
tradicionales de solvencia pública, que calculan el resultado primario requerido para estabilizar el coeficiente deuda-producto,
se introducen extensiones con el objetivo de explicitar los riesgos relativos a la estructura de deuda. En este sentido, en el
capítulo II, se hace hincapié en la vulnerabilidad del nivel de endeudamiento ante shocks en sus principales determinantes,
dada su estructura por moneda, plazo y tasa de interés. Basándonos en el comportamiento histórico de los determinantes de
la deuda desarrollamos indicadores de vulnerabilidad que cuantifican los riesgos ante desvíos de los valores de tendencia. Por
último, se analizan problemas de liquidez implícitos en la estructura temporalde vencimientos de la deuda y sus posibilidades
de financiamiento. El desarrollo de estos indicadores resultó ser de gran utilidad tanto a la hora de evaluar la evolución reciente
del nivel de endeudamiento presentada en el capítulo III, como en la construcción de simulaciones de mediano y largo plazo,
estas últimas presentadas en elcapítulo IV. En el análisis de la evolución de la deuda pública entre 1988 y 2002 se identificaron
cuatro subperíodos. Al inicio, entre 1988 y 1990, la economía se ajustaba luego de varias refinanciaciones de deuda en un
marco de estancamiento. El siguiente período, entre 1991 y 1998, se caracterizó por un gran dinamismo regional que se
tradujo en una combinación particularmente favorable de todos los determinantes de la deuda. El coeficiente deuda-producto
se redujo endógenamente generando una percepción de sostenibilidad de la política fiscal. Entre 1999 y 2001 se produce un
rápido deterioro de las condiciones macroeconómicas como consecuencia de la ocurrencia simultánea de varios shocks
adversos. Es en este período donde comienzan las primeras señales de alerta en los indicadores de solvencia, los que explicitan
los riesgos inherentes a la estructura de endeudamiento heredada de períodos previos. Por último, en el 2002 terminan por
materializarse los riesgos latentes al deteriorarse la percepción del sector privado respecto a la sostenibilidad de la polít ica
fiscal. Sin embargo, el trabajo muestra que en todo el período estaba implícita una vulnerabilidad permanente de la deuda a
cambios en sus fundamentos. Elcapítulo IV plantea inicialmente la dinámica de la deuda pública tomando como base los datos
efectivos hasta 2002,momento previo tanto a la reprogramación de deuda como a las medidas de ajuste delaño 2003, siendo
entonces un escenario inercial. Luego se incluyen las medidas de 2003 para analizar la dinámica resultante, presentando
escenarios alternativos. Utilizando los indicadores desarrollados en el capítulo II, se analiza la sostenibilidad de la política fiscal
en cada uno de los escenarios planteados. El análisis abarca hasta el año 2015, momento en que los fundamentos ya han
alcanzado sus valores de equilibrio. Se observa que la tendencia resultante en un escenario inercial (sin canje ni ajuste
primario) determina una situación insostenible, con lo que eran necesarias medidas correctivas. En este sentido, paramodificar
la dinámica anterior se requiere un mayor esfuerzo fiscal recurrente en todo el período; por lo tanto, el actual nivel de
endeudamiento impone restricciones de corto y largo plazo al manejo de la Política Fiscal. Los problemas de liquidez surgidos
luego del cierre de los mercados de capitales plantearon la necesidad de un cambio en la estructura temporal de la deuda
uruguaya; aquíse analizan los resultados derivadosdelcanje de deuda efectuadoen mayo 2003. Este reperfilamiento temporal
logra cerrar la brecha de financiamiento en el corto plazo y otorga mayor tiempo para realizar los ajustes necesarios en el
resultado primario. Sin embargo, elcierre de la brecha a más largo plazo está atado a la efectividad de los ajustes mencionados.
Por otra parte, puede afirmarse que el coeficiente deuda-producto se muestra vulnerable a cambios en los precios relativos,
la evolución del producto y la tasa de interés de referencia, dados elnivel inicial de endeudamiento; la estructura actualde la
deuda pública por moneda, tasa de interés y plazo; y la volatilidad que enfrentan las principales variables macroeconómicas.
En este marco, el análisis de la sostenibilidad de la política fiscal basado en la dinámica del coeficiente deuda-producto es
claramente insuficiente, pudiendo llevar a errores de percepción que reducen las posibilidades de medidas correctivas
oportunas. Por lo tanto, elmismo debe ampliarse incorporando explícitamente los indicadores de vulnerabilidad. El trabajo se
organiza como sigue. El capítulo II presenta el marco conceptual, el capítulo III analiza la evolución reciente mientras que el
capítulo IV presenta las simulaciones de largo plazo. Por último, se derivan las conclusiones y se plantean algunos temas
pendientes. Al final del documento se incluyen tres anexos: la derivación de las principales ecuaciones presentadas en el
capítulo II se dejan para el anexo 1; el anexo 2 presenta simulaciones considerando el modelo ampliado a spreads variables
endógenamente, mientras que el anexo 3 analiza en forma más detallada la brecha de financiamiento.
Sostenibilidad: un gobierno presenta una Política Fiscal sostenible si satisface la condición de solvencia sin necesidad de un
ajuste significativo en su trayectoria planeada de ingresos y egresos futuros, dado el costo financiero que enfrenta en el
mercado3. Por un lado el concepto de sostenibilidad incorpora alconcepto de solvencia la noción de que existen límites sociales
y políticos a los eventuales ajustes requeridos en la Política Fiscal que determinan la voluntad más allá de la habilidad de pagar
la deuda pública. Por otra parte, el costo del financiamiento es un factor determinante de la dinámica de la deuda pública y
por ende de la sostenibilidad de la Política Fiscal. Por lo tanto, elconcepto de sostenibilidad incorpora no solamente elconcepto
de solvencia sino también el de liquidez del sector público. Liquidez: se dice que un gobierno está en una posición ilíquida,
independientemente de si satisface o no la condición de solvencia, si sus activos líquidos y su financiamiento disponible no
son suficientes para enfrentar los vencimientos de sus pasivos. Por lo tanto, dependiendo de las posibilidades de
financiamiento, será más relevante uno de los aspectos incluidos dentro del concepto de sostenibilidad: solvencia o liquidez.
Dada una situación de restricciones 6
Siendo así, para el caso del exgobernador del departamento de Antioquia (Sergio Fajardo
Valderrama); los cargos que endilga el fiscal Francisco Barbosa, será necesario entenderlos en el
contexto de lo expresado por mí en las consideraciones acerca de las condiciones originarias de un
determinado contrato de deuda pública. Aunados, demás los documentos trascriptos como soporte
teórico.
13. Es decir, haciendo énfasis en que toda deuda tiene características específicas. Pero,
fundamentalmente, lo referido a la volatilidad del mercado financiero. Y, esencialmente, cuando la
contratación de la deuda se efectúa en moneda extranjera. Particularmente en dólares. Es como de
Perogrullo entender que las fluctuaciones del mercado son realidad que no es posible eludir. Algo así
como entender que nunca, en el mercado de valores y de moneda extranjera encontraremos un
escenario de plenas condiciones de absoluto equilibrio y/o de estatismo. Ni circunstancial. Ni vigente
en el tiempo transcurrido. Otra cosa sería remitir las condiciones de contratación a determinados
referentes que tengan en consideración “las adecuaciones a la volatilidad del mercado. En esto me
parece conveniente establecer otro referente. Esta vez mucho más adherido a la casuística en el
mercado de valores y las condiciones del riesgo al momento de pactar los términos de una deuda.
De la casuística: Tomado de: Economipedia
La prima de riesgo es el sobrecoste que tiene un emisor de deuda cualquiera, frente a otro emisor de deuda
que se considera como referencia y que se presupone con menor riesgo.
La prima de riesgo es una recompensa o una «prima» (de ahí su nombre) que se le concede al inversor por invertir en un
activo con riesgo en vez de invertir en uno con menos riesgo (es decir, por arriesgarse más). Se utiliza habitualmente para
comparar la rentabilidad o interés de un activo con riesgo con la del activo sin riesgo.
La prima de riesgo es un concepto que se utiliza como medida de riesgo. Eso sí, antes que todo, es importante saber que el
concepto de prima de riesgo es un concepto muy amplio. Si bien es cierto, todo sea dicho, que normalmente se utiliza para
designar la diferencia entre el coste de la deuda de un país (con más riesgo) frente a la deuda de un país de referencia (con
menos riesgo).
De ahora en adelante explicaremos su cálculo y los distintos contextos en los que se utiliza este concepto. Es decir, hablarem
os
de la prima de riesgo cuando se habla de países, así como cuando se habla de empresas privadas.
Cálculo de la prima de riesgo
La fórmula de la prima de riesgo es muy sencilla. Para calcular la prima de riesgo tan solo hace falta saber el tipo de interés
que ofrece un título de deuda y conocer el tipo de interés del título de referencia. La fórmula para calcular la prima de riesgo
es:
Prima de riesgo = i País con más riesgo – i País de referencia
Dónde:
i = Tipo de interés que ofrece la deuda del país
Prima de riesgo país
Al igual que cuando nosotros pedimos un préstamo en un banco tenemos que devolverlo con intereses, las empresas y los
Gobiernos también tienen que devolver sus préstamos con intereses. La prima de riesgo supone el interés extra que debe
pagar una empresa con respecto al Gobierno (por tener más riesgo). O bien, el interés extra que paga un país con
menos solvencia con respecto a otro país con más solvencia, conocido como prima de riesgo país.
De esta manera, la prima de riesgo país es la diferencia entre el tipo de interés que paga un país cuando pide prestado y la
que paga otro país que ofrece menor interés. Así, cuanto mayor es el riesgo de un país respecto a otro, mayor será su prima
de riesgo país y más alto será el tipo de interés de su deuda.
Visto desde otra perspectiva, la prima de riesgo es la rentabilidad extra que exigen los inversores para invertir en un país en
comparación con la que exigen a otro país. Por eso, la prima de riesgo es un buen indicador de la confianza que tienen los
inversores en la solidez de una economía. En Europa, normalmente se tiene en cuenta la deuda de Alemania como deuda de
menor riesgo.
14. Prima de riesgo empresarial
La prima de riesgo también se utiliza para medir elsobrecoste que tienen que pagar las empresas para financiarsecon respecto
a la empresa más grande del sector o con respecto al coste de financiación del Gobierno. Es habitual ver en informes
financieros, conceptos como que una empresa tiene una prima de riesgo de X puntos frente a su sector o frente a otra
empresa. Es decir, el coste extra que la empresa paga por financiarse en los mercados financieros. Ese coste extra se paga
para compensar al inversor por asumir un riesgo mayor frente a la empresa de referencia.
Ejemplo de cálculo de la prima de riesgo
Por ejemplo el interés de la deuda de España menos el interés de la deuda de Alemania. La prima de riesgo de la deuda
pública española se calcula, en general, respecto a la alemana. Es decir, la diferencia entre el tipo de interés de la deuda
emitida por el Tesoro de España con respecto a la emitida por el Tesoro de Alemania. El periodo de vencimiento de la deuda
debe ser el mismo, generalmente se suele calcular con los bonos a 10 años. Si el tipo de interés que paga España por su
deuda a 10 años es un 5% y el tipo de interés que paga Alemania es un 2%, la diferencia será del 3%. Expresando en puntos
básicos diremos que la prima de riesgo de España es de 300 puntos, porque España paga un 3% más por el interés de su
deuda que Alemania.
Prima de riesgo de España = i ESP – i ALE = 5% – 2% = 3%
En este caso la prima de riesgo sería del 3%. Dicho en otro formato, la prima de riesgo es de 300 puntos básicos. Un 1%
representan 100 puntos básicos.
Otro ejemplo podría ser la prima de riesgo de los bonos (deuda) de Inditex con respecto a los bonos del Gobierno español.
Si Inditex paga por sus bonos un 7% anual a 10 años y España un 5%, la prima de riesgo de Inditex es un 2%. O bien, de
200 puntos básicos.
Lo que aduce la fiscalía está soportado en lo siguiente: “no hubo previsión. Al momento de contraer
deuda pública interna en moneda extranjera. Con el banco Corbanca. Es decir, en todo caso, siempre
la contratación de deuda pública en moneda extranjera debe efectuarse previendo la volatilidad del
mercado financiero. Siendo así, entonces, el ordenador del gasto (Sergio Fajardo Valderrama) incurrió
en contratación indebida, sin el lleno de los requisitos legales. Configurándose el delito de peculado
por omisión agravado en favor de terceros. Como producto de esta acción, la deuda pública del
departamento de Antioquia s incrementó. Siendo que, al momento de contratar la deuda en dólares
este tenía un valor de $1800 aprox. (2013) en 2015 el valor del dólar era de $ 3140 aprox. Es decir
un detrimento patrimonial cercano a los $ 140.000.000.000.”.
Desde mi interpretación, habría que remitir la tipificación del delito endilgado al exgobernador Sergio
Fajardo Valderrama a las consideraciones que he venido expresando, soportadas en los diferentes
documentos citados.
Ahora bien, aparece un hecho adicional que tiende a complejizar la situación. Es el caso de quien era
la secretaria de hacienda (María Eugenia Valderrama) de la gobernación de Antioquia al momento en
que se concreta la contratación del préstamo. Se le endilga la figura de interés indebido. Ya que, en
2013, era accionista de la matriz de Corbanca (Helpbank). Ella, la funcionaria, aduce que “mis
acciones no valían más de $7000000 (siete millones). Cabría la precisión en términos de que la norma
no habla de la cuantía en pesos de las acciones, al momento de configurarse el conflicto de intereses.
Lo cierto es que ella era accionista.
Precisando: yo considero que la acción en sí de contratación del préstamo por parte de Sergio Fajardo
Valderrama se hizo en los términos descritos como posibles en el contexto de lo que se entiende
como contratación de deuda pública interna o externa. Es decir en cumplimiento de protocolos
internacionales y del país. La figura de volatilidad siempre estará presente, fundamentalmente
cuando el préstamo se efectúa en moneda extranjera. Yo diría que el asunto un tanto confuso, aun
en el contexto de la vulnerabilidad, tendría que ver con la contratación adicional de la cobertura de
15. riesgos propios de la volatilidad. Hasta donde está claro, al momento, se trató de una decisión en
términos del costo en sí de la deuda en términos porcentuales, de la prima inherente al cálculo de
esa volatilidad en el tiempo. Por lo mismo me parece sensata su petición en el sentido de la
designación de un comité técnico jurídico para que evalúe el caso.
Quiero concluir enfatizando mi caracterización del fiscal Francisco Barbosa. De entrada, no es garante
de imparcialidad. Actúa con el perfil de funcionario avieso. Como adjunto cierto de la ideología del
Partido Centro Democrático, En un artículo reciente “Tiempo de Terror”, yo digo:
Tiempo que corre en velocidad, desparramando hechos. Siendo, nosotros, como sujetos sometidos al encharcamiento en
espíritu. Un gobierno oprobioso. Una figura parecida a “Las Tatmadaw” delRégimen Birmano. Hoy por hoy obra el “miedo
ambiente”. Ante las andanadas cada vez màs mortíferas por parte del poder que obra como dictadura civil y como Estado
Corporativo. Las verdades se tuercen o se incorporan al anecdotario de la historia oficial. De la misma manera en que fueran
incorporadas por parte de las tenebrosas dictaduras en Argentina, Uruguay y Chile en la década de los setentas y comienzos
de la década ochenta.
En este hoy de profundización de la violencia oficial, cada paso, cada palabra y cada acción son una contribución a la
exacerbación de la perversidad. Este Diego Molano trabaja denodadamente por asimilar la doctrina del imbécil Iván Duque
Márquez, de su partido Centro Democrático y de su antecesor en el ministerio de defensa. Este sujeto, Diego Molano, a
proferido una expresión no conocida hasta ahora, Solo tendría su semejanza en las expresiones del miserable Donald Trump
cuando separara a los niños y niñas inmigrantes de sus familias: “los y las menores de edad que estaban en el
campamento deGentilDuarteno eran otracosa que máquinas deguerra” (declaraciones en medios de comunicación
los días 9 y 10 de marzo de 2021). Doctrina que retrotrae las ordalías de la Europa Medieval.
Es una manera de tratar de minimizar lo denunciado por el periodista Hollman Morris (varios medios de comunicación los días
8 y 9 de marzo de 2020) en términos del bombardeo por parte del ejército en territorio (Calamar) del Depart amento del
Guaviare.
Tratan de construir un velo malicioso,antela opinión pública,publicitando y elevando a la categoríade héroe
nacional a un policía muerto en un lance común y corriente con algunos supuestos hampones.
Y como si fuera poco, en este mismo lapso de tiempo, presentan con tronante de orquesta destemplada la vulgar decisión del
coordinador de fiscales ante la Corte Suprema de Justicia (Gabriel Jaimes, áulico de la Procuraduría General de la Nación, en
la administración de Alejandro Ordóñez Maldonado y grosero lameculo del fiscal General de la Nación Francisco Barbosa); en
términos de absolver al bandido Álvaro Uribe Vélez, por la vìa de un silogismo jurídico (“algunos de los cargos no
constituyen delito alguno y los que si lo son, no se le puede endilgar el título de determinador”). Cuando es
absolutamente claro que la tipificación de la Corte Suprema de Justicia està plenamente soportada en lo que corresponde a
los códigos penaly de procedimiento. Y, además “los medios” en la voz cantante delperiodista corifeo *** (Noticiero Caracol
Radio de la mañana sección “soy la voz”) en su emisión del martes 9 de marzo de 2021 hizo una expresión perversa en contra
de la Jurisdicción Especial de Paz (JEP) endilgándole que la elección de sus integrantes ha sido amañada. Y que sus decisiones
jurídicas están pegadas con argamasa. Y que han procedido (en mensaje subliminal miserable que infiere la defensa de Álvaro
Uribe Vélez. Determinador de los falsos positivos); arguyendo que en Colombia no se da el mismo caso de Serbia y Yugoeslavia
en términos del genocidio promovido por Slobodan Milosevic en su condición de presidente de Serbia Herzegovina (1989-
1997) y de Yugoeslavia (1999-2000) y que fuera procesado y condenado por estos hechos por elTribunal de la Haya en 2002,
Pero, este sujeto, ya nos tiene acostumbrados a ese tipo de expresiones, aprovechándose de su condición de director del
referido noticiero. En otra de las emisiones (aproximadamente de mediados del mes de febrero de 2021, una vez conocidas
las cifras reveladas por la JEP en términos del número de víctimas de los falsos positivos; entrevistó a José Miguel Vivanco,
Director de Human Rigths Watch, durante menos de cinco minutos y le cortó la palabra cuando estaba señalando (José Miguel
Vivanco) que él y la organización que dirige no ha conocido de un caso similar en el mundo (los falsos positivos) como política
sistemática y de estado (durante los periodos gubernamentales de Álvaro Uribe Vélez (2002-2006 y 2006-2010).
Inmediatamente después (el tal ***) se comunica con Álvaro Uribe Vélez y le permite hablar al respecto durante veinte
minutos. Es de anotar que el tal Álvaro Uribe Vélez se despachó contra José Miguel Vivanco, señalándolo como “amigo de las
FARC. Pero hay màs en emisión de cuatro días antes una periodista del mismo perfil e ideología de su jefe en el mismo
noticiero le dedicó una hora y quince minutos al sujeto determinador de falsos positivos; para que descargara todo su odio en
contra de las revelaciones de la JEP. Es de anotar que el tal *** ya había dado muestra de su peculiar conocimiento e
interpretación delderecho penal, a comienzos de 2020, cuando elmédico pistolero asesinóa trespersonas con pistola
de alta gama con elargumento que “…meiban a robar”. Elsusodicho periodista-abogaducho, inmediatamente tipifico
la acción del médico pistolero como “acción en defensa propia”. Claro que, aquí en esa expresión lo acompañaron la
alcaldesa Claudia Nayibe López Hernández y el asesor jurídico del noticiero Hernando Herrera y, después, por uno de los
tantos jueces venales que pululan en el poder judicial.
Es más, aun a riesgo de aparecer como sujeto tendencioso, yo tipifico a Francisco Barbosa como
fiscal del mismo talante de Néstor Humberto Martínez Neira. En mi artículo “El Caso Santrich”. Dije:
16. Para el caso y, en lo fundamental, la figura de la Fiscalía General de la Nación, no solo ejerce como institución de iteración
compulsiva, en lo jurídico instrumental y propiciador de constantes insumos; tratàndose de ejercer como relevante sujeto
acusador constante. Y, en el caso del fiscal general Néstor Humberto Martínez Neira, es puro sujeto pernicioso, sesgado. Por
lo mismo que su formación jurídica no es, propiamente, dechado de virtudes asociadas a la pureza teórica del derecho como
ciencia. Es màs, su acceso al cargo, estuvo provisto de vicisitudes casi grotescas. En un juego constante de pura nervadura
maliciosa. En lo que esta figura supone la impúdica intromisión. No de la política como ciencia de la conducción e interpretación
de los procesos de gobierno y administración pública. Este no sería el momento adecuado para acentuar en mi caracterización
del perfil de quienes han ejercido el cargo desde su creación en 1991; pero todos y todas han tenido esa misma impronta y
nervio.
Pero, en este mismo entramado en ciernes, el sujeto ejecutivo y premio nobel de paz, es simple y acucioso vocinglero lineal.
Sin perfil, ni nervio, ni pulso humanístico. Para nada. Simple sujeto que ha trasegado por la administración pública de nuestro
país; como heredero de poder económico y politico. Todero nefasto. Para decirlo, “asì, de one” como dicen los y las jóvenes:
mucho tintín y nada de paletas”. O, de otra manera, qué pudiera esperarse del sujeto que avaló toda la trama impúdica de
Álvaro Uribe Vèlez. Incluida la creación de un partido a su imagen y semejanza. Incluida la pérfida invasión a Ecuador en 2008
y que, ahora, deja solo al presidente Lenin Moreno (independientemente de lo que pueda ser mi caracterización de èl como
gobernante al servicio de la rancia burguesía ecuatoriana) con el argumento que “a los trabajadores de la comunicación
ecuatorianos, secuestrados y muertos, lo fueron en su propio país…y que, Guacho, nació allí, en Ecuador”. Como diría cualquier
pensante generoso “mucho malparido. Amigo de mierda”.
Y ni que hablar de la institucionalidad en términos de la rama judicial de Estados Unidos. Queda claro que su formación y
soporte en derecho es de extirpe sesgada. Siempre han inventado pruebas para justificar las inv asiones. Panamá, Irak,
Afganistán, Granada…y muchos etcéteras asociados. Manipuladores con imaginario pervertido, siempre. “…tenemos
conocimiento que Jesús Santrich y varios, están conspirando para enviar diez toneladas de cocaína a nuestro país. Asociados
con uno de los carteles mejicanos. Interpol, en este caso muy acuciosa, impartió circular roja, de una.
Y el FiscalGeneralde la Nación. Y elpremio nobelpresto, veloz. Y la Corte Suprema de Justicia. Y los autoproclamados “Medios
al servicio de la justicia y la democracia”, sin excepción dan por hecho que son válidas y contundentes las pruebas de la DEA.
Y candidatos presidenciales y sus fórmulas vicepresidenciales, juntan voces. Unos y unas para declararse impolutos videntes
que ya habían advertido y presumido lo mismo. Otras y otros, para declarar, casien puro lenguaje cantinflesco, palabras con
las cuales no comprometen ninguna interpretación (el vomitivo de lo tibio).
Cuando lo único claro, en mi opinión, es lo siguiente: el cuerpo delActo Legislativo 1 de 2017, es un todo normativo. Construido
a partir de las mismas necesidades que obligaban a modificaciones constitucionales. Compromiso único, relevante, inamovible
(por lo menos en el ejercicio que relaciona víctimas y victimarios). Que conlleva, por esto mismo, al entendido del debido
proceso, en su propio universo contextualjurídico. Las pruebas tienen que ser conocidas y valoradas por la instancia creada
para asumir los procesos. La JEP es, en ese horizonte del Acto Legislativo 1 de 2017, la única instancia que debe conocer,
valorar, cotejar y analizar las pruebas. En la misma lógica jurídica e instrumental en que deviene un proceso soportado en el
nexo existente entre confrontación, configurada a través deltiempo. Entre el Estado y la insurgencia. Rebelión que termina
en un consenso de partes. Y que, por lo mismo estas, se subsumen en procedimientos para “acoger el nuevo ordenamiento
vinculante que difiere, en el tiempo, las repercusiones y daños colaterales.” Aquí cabrìa explayarse en lo que referiría una
interpretación de fondo. En lo que podría ser la reinterpretación del significado básico de la sociedad. Como sumatoria de
postulados, de sujetos y de sujetas. Con el Estado como garante básico y fundamental. Con cada uno de los instrumentos
asociados. En eso que tienen las corporaciones e instancias que acogen, en la connotación màs precisa. Pero, almismo tiempo,
mucho màs amplia. En las modalidades conceptuales que hacen de los y las sujetos partícipes.
Ya, entonces, la rebelión postulada por las Farc es propósito pasado. Y lo que viene, en ese mismo contexto dado por la
dinámica de su proyecto politico, asumen la disposición para cumplir con lo acordado. Incluido, y esto es fundamental, el
entendido de juridicidad propio de un acuerdo que no modifica, para nada, el entramado politico y económico burgués.
Ahora bien, en razón a la orquestación de la DEA y de la Interpol, se deriva la opción de extradición. Y que, de por sí, esta
figura compromete opciones de interpretación relacionados con la soberanía nacional y las instrumentación jurídica propia
como país y como nación; queda claro que se haría mucho màs pleno el contenido del acuerdo que reglamente, en todo su
proceso jurídico, el Acto Legislativo 1 de 2017.
Luego, y en conclusión, es relativamente simple el Caso Santrich. Aplicación del debido proceso en el contexto del Acto
Legislativo 1 de 2017. Particularmente, en términos de la Justicia Especial Para la Paz (JEP). Lo demás, no es otra cosa que
el de las maromas de entelequias, promovidas por el Fiscal General Néstor Humberto Martínez Neira; por el espurio Premio
Nobel Juan Manuel Santos Calderón; por “Los Medios” (sin excepción) asl servicio de la variante màs inmoral, anti-ética y de
extrema derecha en este país. Al servicio del Imperio. Asì les suene a término y caracterización, supuestamente, delpasado,
pasado.