Este documento describe aneurismas de la arteria pulmonar, una afección poco frecuente. Puede ser congénita o adquirida, asociada a malformaciones cardiacas, infecciones, traumatismos u otras enfermedades. Los síntomas incluyen disnea, hemoptisis y dolor torácico. El diagnóstico se realiza mediante tomografía computarizada o ecocardiograma. El tratamiento quirúrgico se indica cuando hay riesgo de rotura del aneurisma.
2. • Los aneurismas de la arteria pulmonar (AAP) representan una
entidad muy rara y de difícil diagnóstico por su baja
prevalencia y su sintomatología inespecífica.
• Los (AAP) son una afección poco frecuente.
• La etiología de los (AAP) puede ser congénita o adquirida.
3. • Los congénitos suelen asociarse a malformaciones cardiacas
que ocasionan hipertensión pulmonar; el ducto arterioso
persistente es el más frecuente. Otras causas serían las
comunicaciones interauriculares e interventriculares.
4. • Los adquiridos pueden ser idiopáticos o asociados a otros
procesos, como infecciosos (tuberculosis, sífilis), traumatismos,
estenosis valvular pulmonar o enfermedades del tejido de
colágeno. Por lo tanto, en gran parte de los AAP concurren una
serie de situaciones fisiopatológicas previas al desarrollo del
aneurisma: el aumento del flujo pulmonar, la hipertensión
pulmonar y/o la coexistencia de un proceso patológico que
afecte a la pared vascular.
5. • En los casos infrecuentes en que el AAP no se debe a ninguna
anomalía funcional ni estructural del sistema cardiovascular,
recibe el nombre de AAP idiopático.
6. SINTOMATOLOGÍA
• En cuanto a la presentación clínica, varía; puede ser
asintomática y ser un hallazgo casual en una radiografía de
tórax.
• En aquellos sintomáticos lo más frecuente es disnea,
hemoptisis y dolor torácico.
• La hemoptisis, generalmente, indica inestabilidad del
aneurisma y es un indicador de la necesidad de intervención
quirúrgica.
7. ETIOLOGIA
• Los AAP representan una entidad muy poco frecuente,
identificándose en menos del 1% de los aneurismas
• más de la mitad de los casos de AAP se asocian con cardiopatías
congénitas
• la causa más frecuente es la hipertensión pulmonar
• Los AAP idiopáticos son los menos frecuentes, no asocian ninguna
anomalía funcional ni estructural cardiovascular y sólo se pueden
diagnosticar por exclusión
• Otras causas menos frecuentes incluyen enfermedades del tejido
conectivo, infecciones y traumatismos.
8. DIAGNOSTICO
• El diagnóstico precoz es crucial, ya que la mortalidad es del 100% en
caso de ruptura del aneurisma.
• Se considera la Tomografía Computarizada (TC) con contraste
intravenoso; aporta información sobre la localización y extensión,
tamaño, número y morfología del aneurisma.
• el ecocardiograma trasesofágico permite visualizar el tronco y
descartar hipertensión pulmonar o afección valvular pulmonar
y shunt intracardiaco como causas secundarias del aneurisma.
11. TRATAMIENTO
• El tratamiento médico es limitado y estará reservado para aneurismas
de evolución «benigna» como los idiopáticos
• La indicación quirúrgica será perentoria e ineludible en aquellos
aneurismas inestables, con hemoptisis, en los que se describe un alto
riesgo de rotura y mayor mortalidad: : los micóticos y los asociados a
enfermedad de Behçet, síndrome de Hughes-Stovin y enfermedad de
Osler-Weber-Rendu, fundamentalmente.
• Según la localización y la causa, se optará por la resección, la
aneurismorrafia o la embolización del aneurisma y , cuando no sea
posible otra elección, la lobectomía de los más periféricos.
12. • Como conclusión, los aneurismas pulmonares son
extremadamente raros; frecuentemente son un hallazgo casual
en una radiografía de tórax.
• La TC de alta resolución y la angiorresonancia son pilares
diagnósticos.
• El tratamiento quirúrgico se indica en pacientes con riesgo de
disección o rotura.