El documento describe las estrategias implementadas en un instituto agrícola para mejorar las habilidades de lectura de los estudiantes de primer grado, como la lectura en voz alta en grupos pequeños, animar la participación en lecturas rotadas, hacer énfasis en la comprensión a través de preguntas, y vincular la lectura con el desarrollo de habilidades de escritura. El objetivo es generar hábitos de lectura en los estudiantes y que alcancen avances significativos en esta competencia comunicativa para el final del año.

1. DIA A DIA MEJORANDO LA LECTURA
La apatía de algunos niños y niñas del grado primero del Instituto Agrícola de
Charta sede B, por la lectura como el proceso lento de la misma y después de
haber alcanzado el nivel inicial de alfabetización en la escritura y lectura, ha
llevado al planteamiento y accionar de estrategias que conlleven a que estos
estudiantes mejoren esta competencia y se generen hábitos en el proceso lector,
razón por la cual se hace indispensable actuar a tiempo para mitigar esta
situación.
En el transcurso del año se han venido implementando ciertas estrategias con
miras a fortalecer y mejorar dicho proceso, para que al culminar el grado los niños
y niñas de primero hayan alcanzado avances significativos en esta competencia
comunicativa.
El plan lector que se desarrolla para compartir con los niños y niñas el placer de la
lectura mediante su práctica continua abarca estrategias tales como:
Aprovechamiento en el manejo lúdico del lenguaje a través de textos literarios
sencillos para leerlos y comentarlos como son los trabalenguas, adivinanzas,
retahílas, rimas, fábulas, cuentos entre otros.
Realizar momentos de lectura voz alta por pares, en pequeños grupos y
colectivamente, ya que esta lectura lleva a favorecer el progreso de los niños y
niñas que tienen dificultades para leer en forma individual pues les da seguridad,
les ayuda a vencer la timidez y evita que los estudiantes se sientan ridiculizados.
Animarles a participar de la lectura rotada para qué los niños desarrollen su
atención y sigan la lectura sin dejar de lado la comprensión y la identificación del
tipo de texto.
Insistir en la práctica de la lectura silenciosa y propiciar el desarrollo de las
actividades en las que se evidencie la comprensión del texto que se lee.
Orientar en cada lectura la identificación y comprensión del uso de los signos de
puntuación, uso de las mayúsculas, la modulación de la voz y la correcta
articulación.
Releer el texto cuando se haga necesario.
Pedirles que hagan altos en la lectura para verificar la comprensión de lo leído
mediante preguntas
A medida que se ha avanzado en este proceso se les facilita a los estudiantes,
material impreso de algunos textos en los que ellos resaltan los signos de
puntuación, familiarizándose así con su uso. .

2. De la mano con esta competencia se desarrolla el proceso escritor al cual se le
anexaran otras actividades relacionadas al plan lector como es el uso del
diccionario para conceptualizar palabras desconocidas encontradas en las lecturas
y hacer consignación, uso de sinónimos, escritura de palabras difíciles, producción
de textos con sentido.
CONCLUSIONES:
La práctica de la lectura día a día, conlleva al mejoramiento del aprendizaje.
Mejora la redacción y la fluidez verbal.
Hacer de la lectura una experiencia agradable llena de significado y sentido
despierta el hábito lector en los niños y niñas a temprana edad.
DORI MARTHA TOLOSA
DOCENTE GRADO 1° Sede B
INSTITUTO AGRICOLA CHARTA