3. Los momentos de recreación en nuestra vida cotidiana, nos
ayudan a despejar nuestra mente de las exigencias del ámbito
laboral y las tensiones que esto puede generarnos, y simplemente
distendernos realizando alguna actividad de ocio, que comprende a
todas las acciones que elegimos simplemente porque nos gusta
hacerlo, persiguiendo una finalidad específica pero sin la
obligatoriedad que nos da la percepción de un beneficio, sino la
simple diversión.
4. • La libertad: La recreación es auto motivada, es decir no existe
presión externa alguna por realizarla. A diferencia de las restantes
formas de actividad, esta tiene su fin en sí misma y se realiza sin la
mediación compulsiva de influencias externas directas, como la
búsqueda del sustento de leyes, y disposiciones legales, presiones
familiares, compromisos políticos, regímenes y disciplinas
institucionales.
• El placer: Como resultado de actividades recreativas se proporciona
una gran satisfacción, un interés, que no se encontrará de otro
modo. Todo acto o experiencia recreativa reúne ciertas
características básicas. Una de estas es la satisfacción inmediata y
directa que la actividad trae al individuo.
5. • Pasiva: La recreación pasiva se da cuando el re creacionista no
necesariamente realiza actividad física (juegos), sino también
cuando aprecia y disfruta de la variedad de la cultura en la que el
ser humano se desenvuelve
• Funcional: La recreación cumple una etapa a través del tiempo libre
denominada autodesarrollo. Dado que es la posibilidad personal
que tiene cada individuo de crearse condiciones para la
participación consciente, la formación de hábitos responsables,
participación en la vida social a la vez la formación de habilidades
para la creación y el enfrentamiento a cualquier situación social.
6. Ha sido científicamente comprobado que aquellas personas
que se ven inmersas en sus rutinas laborales y que no dedican
espacios a experiencias de recreación, suelen sufrir por lo general
mayores niveles de stress, angustia y/o ansiedad. Por tanto, la
recreación sirve al ser humano no sólo para activar el cuerpo, sino
también para mantener en un sano equilibrio a la mente. Por el
contrario, llevar una vida sedentaria y orientada únicamente a
cumplir con las obligaciones no hará más que desequilibrar a la
persona que lo padece y aumentar su cuadro de estrés.