3. El ambiente de aprendizaje se fundamenta en una
necesidad y considera los procesos y principios
psicológicos generales que facilitan el acto de aprender, su
importancia radica precisamente en ello, en que a través
de su gestión se busca generar un espacio adecuado en lo
emocional, cognitivo e instruccional que impacte
positivamente en la adquisición de competencias por
parte del alumnado.
5. El Clima de aprendizaje puede
ser entendido como aquel
conjunto de percepciones
acerca de los factores
ambientales (desde un ámbito
psicológico, cultural, relacional
y organizacional) que influyen
en el proceso de aprender
El Clima de aprendizaje
6. Tiene que ver con aquellas
características del profesor y del
ambiente que inspiran
sentimiento de comodidad y
seguridad en los alumnos, pero
que a la vez son desafiantes para
su aprendizaje.
7. “Es indudable que el clima de aprendizaje
influye en el logro y en la satisfacción por
aprender”
8. Un clima de aprendizaje
propicio es aquel en donde el
alumno trabaja con la
convicción de que el profesor
está genuinamente interesado
en su aprendizaje y en él como
persona. Cuando los alumnos se
sienten tratados como personas
capaces de aprender y
desafiados y las expectativas de
éxito son altas, estos se
encuentran en un clima de
aprendizaje adecuado
11. Diseñar y desarrollar
clases interesantes
relacionadas con la vida
real con un docente
que facilita el dialogo y
aclara preguntas sin
molestarse por ello.
Interés y Participación
12. Genera trabajos grupales
en los cuales los
participantes pueden
tomar decisiones sobre la
forma de trabajar y el
docente facilita los
debates grupales.
Cohesión del grupo
13. Contar con un docente
amable, confiable,
asequible y abierto a
los estudiantes.
Apoyo del profesor
14. El docente tiene claro los objetivos del curso,
los comunica a sus estudiantes y establece con
ellos los compromisos y normas a seguir
Orden y organización
16. No considerar al participante como un recipiente que
hay que llenar de conocimientos únicamente.
Permítele crecer, motívalo a crecer, ayúdalo a crecer.
No te conviertas en el profesor tradicional que cree
tener todo el conocimiento y que no permite que sus
participantes opinen, provoca el aprendizaje
fomentando un clima de libertad.
1. Da libertad
17. Es necesario saber aceptar críticas y sugerencias a
la labor que se realiza. No cierres tu mente a los
posibles comentarios de tus participantes. Siempre
serán en tu beneficio.
2. Ten madurez emocional
18. Fomenta el autodesarrollo de los participantes
a través de su participación activa.
3. Genera la creatividad
19. No te exhibas titubeante, desconfiado o
receloso, mucho menos inseguro. La mejor
fórmula para obtener seguridad es teniendo
un alto conocimiento del tema, un dominio
absoluto de la materia o de los temas que
vayas a impartir.
4. Muestra seguridad.
20. Manéjala de tal
manera que te
hagas sentir en
el grupo como
un coordinador,
un facilitador y
no como un jefe
o supervisor.
5. Evidencia autoridad.
21. Es necesario que conozcas algunas características
individuales de tus participantes, con ello estarás en
posibilidad de revisar constantemente el
comportamiento de tu grupo e ir corrigiendo, si esto es
necesario, las desviaciones que pudieran presentarse
en la conducta de los participantes.
6. Demuestra manejo de grupo
22. Muestra los procesos a
seguir. Se el primero en
poner el ejemplo, dirige
las actitudes positivas de
tu grupo hacia el éxito
del curso.
8. Orienta a tus participantes.
23. Adopta actitudes y posiciones
corporales propias ante tu
grupo. No te presentes
desaliñado, ni con la ropa
sucia o arrugada. Se ejemplo
a seguir.
9. Cuida tu imagen.
24. Piensa que algunos
estudiantes (sobre todo
adultos) presentan
resistencia a la enseñanza,
requiriéndose por lo tanto
un grado mayor de
paciencia para
conducirlos.
10. Ten paciencia
26. Para que un material didáctico resulte eficaz en el
logro de unos aprendizajes, no basta con que se trate
de un "buen material", ni tampoco es necesario que
sea un material de última tecnología. Cuando
seleccionamos recursos educativos para utilizar en
nuestra labor docente, además de su calidad objetiva
hemos de considerar en qué medida sus
características específicas (contenidos, actividades,
tutorización…) están en consonancia con
determinados aspectos curriculares de nuestro
contexto educativo.
27. Entre los factores a considerar debemos mencionar:
- Los objetivos educativos que pretendemos lograr.
Hemos de considerar en qué medida el material nos
puede ayudar a ello.
- Los contenidos que se van a tratar utilizando el
material, que deben estar en sintonía con los contenidos
de la asignatura que estamos trabajando con nuestros
alumnos.
- Las características de los estudiantes que los utilizarán:
capacidades, estilos cognitivos, intereses, conocimientos
previos, experiencia y habilidades requeridas para el uso
de estos materiales...
28. - Las características del contexto (físico, curricular...) en
el que desarrollamos nuestra docencia y donde
pensamos emplear el material didáctico que estamos
seleccionando. Tal vez un contexto muy desfavorable
puede aconsejar no utilizar un material, por bueno que
éste sea; por ejemplo si se trata de un programa
multimedia y hay pocos computadores.
- Las estrategias didácticas que podemos diseñar
considerando la utilización del material. Estas estrategias
contemplan: la secuenciación de los contenidos, el
conjunto de actividades que se pueden proponer a los
estudiantes, la metodología asociada a cada una, los
recursos educativos que se pueden emplear, etc.
29. Así, la selección de los materiales a
utilizar con los estudiantes siempre se
realizará contextualizada en el marco
del diseño de una intervención
educativa concreta, considerando
todos estos aspectos y teniendo en
cuenta los elementos curriculares
particulares que inciden. La cuidadosa
revisión de las posibles formas de
utilización del material permitirá
diseñar actividades de aprendizaje y
metodologías didácticas eficientes.
30. A partir de la consideración de la plataforma
tecnológica en la que se sustenten, los medios
didácticos, y por ende los recursos educativos en
general, se suelen clasificar en tres grandes grupos,
cada uno de los cuales incluye diversos subgrupos:
TIPOLOGÍAS DE LOS MEDIOS DIDÁCTICOS